10/10/2020
—¿Me recuerdas tu nombre, cariño?
—Ariadna... Melisa Moretti Vólkova.
—¿Edad?
—Catorce.
—Entonces, sos dos mil seis, ¿No?
—Sí. Ocho de mayo.
—¿Y naciste?
—Acá.
—Bien, no es un interrogatorio lo que estamos teniendo, son preguntas básicas y, las que vienen, me respondes lo que quieras pero, sin mentir. Es muy importante que no me mientas, nadie se va a enterar de lo que hablemos.
Se vería como la doctora rellenaba unos papeles.
—¿Usted... quiere ayudarme? ¿A mí...?
—Así es, Ariadna. Quiero y lo haré. Solo un par de preguntitas más.
Se vería a la menor asentir tímidamente con la cabeza.
—¿Qué hay de tu padre? —Minutos de silencio—. Te ayudaré con algunas preguntas, ¿Cómo se llama? ¿Qué edad tiene? ¿A qué se dedica? ¿Qué hace en su tiempo libre? Cuéntame un poco.
—Él... Su nombre es Igor Vólkov... em... tiene treinta y cinco años y él es albañil... am...
—No es necesario que respondas todas de una... poco a poco, a tu tiempo.
Se vería como la niña jugueteaba con sus manos y su mirada bajaba hacía el suelo.
—En su tiempo libre... be... él... em...
—Toma agua y tranquila, nadie nos apura.
—Igor siempre toma alcohol cuando llega a casa y... fuma...
—¿Te molesta que lo haga? ¿Cómo te trata cuando hace eso?
—Él me trata bien... vemos... fútbol juntos y... suele defenderme de... mamá...
—Ya veo, ya que la nombras, cuéntame un poco de ella, igual que hiciste con tu padre.
—Su nombre es Perla Moretti, tiene treinta y cuatro años... Ella no tiene trabajo, cuida de mis hermanitos. Ella toma todo el día, ella... ella...
Se vería a la menor temblar y desviar la mirada a un lado.
—Ella discute con papá... él se va y ella siempre me golpea... ella fue quien me hizo esto, yo antes era normal.
La menor miraría al frente señalando su ojo izquierdo. Tenía heterocromía a causa de una lesión.
—¿Ellos se llevan bien a veces?
—Sí. Ellos lo hacen por un tiempo, dicen que están juntos por nosotros y que todo estará bien pero, todo siempre vuelve a salirse de control y yo ya no quiero vivir eso... quiero morir, doctora.
—No digas eso, prometo que te ayudaré a salir de eso.
—...
—Nombraste algo de tus hermanitos, ¿Cuántos son? ¿Qué edad tienen?
—Son dos, Elián, que tiene tres años y Irina de uno.
—Así que la mayor, ¿Sentís que tenes alguna responsabilidad sobre ellos?
—Sí, siempre soy quien los cuida mientras mamá está tomando, soy la que les cocina y debo ducharlos cada día a las seis de la tarde, si papá llega y no lo hice, él me deja sin cenar y a veces, cuando mamá le miente y exagera las cosas, él me golpea.
—¿A qué te refieres con exagerar?
—Ella comienza a decir que yo golpee a alguno de mis hermanos... que... le conteste a ella de mala manera o... que llamaron del instituto para quejarse de mí... mi madre me odia, doctora, lo sé, ella quiere que muera y no entiendo... no entiendo porqué no he muerto hoy cuando corte mis brazos, odio que me hayan salvado... ¡Si ellos quieren que muera!
Se vería como la menor comenzaba a entrar en un ataque de ansiedad. Pasaron unos minutos y la entrevista pudo continuar.
—¿Recibís afecto de algún tipo en tu familia? No solo padres, puede ser-
—Mi abuela Beatrice es la mejor, ella siempre me abraza, dice que merezco buenas cosas y que ella me las dará. La vida me dará cosas buenas porque las merezco... Ella debe estar muy triste por lo que hice... Yo le prometí a mi abuelo que cuidaría de ella y... y...
—Vamos a hacer una pausa para que meriendes, Ariadna, ¿Si? Cuando sientas que queres seguir hablando, decime. Voy a estar en la puerta.
Se vería a la psicóloga ponerse de pie y salir del cuarto. Una hora después, Ariadna llamó a la psicóloga para continuar.
—¿Pensas que practican bullying en tu instituto?
—Sí.
—¿Por qué?
—Mis compañeros me golpearon algunas veces... o... dicen cosas de mí... cosas feas...
—¿Qué hacen?
—Una vez cortaron mi pelo de un solo lado... me empujaron contra el escritorio... em... ellos... me llaman puticienta... odio ese apodo...
La menor desvió la mirada al suelo, volviendo a jugar con sus manos.
—¿Por qué crees que te llaman así?
—Ellos siempre se burlan de mi cuerpo porque es... "perfecto" y no combina con mi vida de mierda... Y me tratan de... que... ando con todos y no es así...
—Ya veo, los niños suelen ser muy crueles.
—Yo también lo era y nunca quise herir a alguien... solo a mí...
Silencio.
—¿Tenes amigos? ¿De qué edad?
—Tengo uno... Su nombre es Thomas y tiene quince años.
—¿Cómo te hace sentir Thomas?
—A veces bien y a veces mal...
—¿Qué hace para hacerte bien y qué para mal?
—Él me incluye en sus cosas, no siente pena de mí pero, a veces, sus palabras son hirientes... él conoce bastante de mí y eso hace que sea más fácil para... burlarse. A la vez, es la única persona que se disculpa después de hacerlo.
—Bien. Y decime, ¿Qué hace que te sientas estresada? En general.
—Mis padres.
—¿Y qué haces cuando eso pasa?
—... Fumo... hierba... bebo...
Editado: 22.11.2024