Sofía Clark
Me encontraba mejor que la última vez que vino Elliot, he tenido sueños extraños, aunque creo que son recuerdos vividos, uno de ellos fue estando escribiendo una carta, fue algo rápido y preciso, no vi bien que decía, ni a quien se la escribía, aunque recuerdo sentir lo que sentía en eso momento miedo.
¿Por qué tendría miedo de escribir una carta? Tal vez fue para una tarea ¿O si era para alguien? Y por eso el miedo mientras la escribía, el otro fue corriendo por la avenida, eso sí que me parece más extraño, ¿Por qué estaría corriendo en la avenida? Ni cuando me mandan hacer mandados rápidos lo hago.
Y también con esa mujer que se parece a mí, sé que a veces pienso en que soy una heroína, que canto delante de muchas personas en un gran escenario o cualquier evento por inútil que parezca.
Aunque los “sueños” entre comillas como me gusta llamarles, porque no parecen sueños, la psicóloga no hablo sobre estas cosas, si dijo que habrían bajones emocionales, momentos felices y así, pero nada de sueños extraños que solían parecer algo más que ello.
No he vuelto hablar con Elliot no porque estemos peleados o algo así, es que ha estado muy ocupado trabajando, le he dejado miles de mensajes y no le llegan, no me desanima la idea de que no hablemos todo el tiempo, entiendo que él tiene su vida y quiere seguir adelante, ya que sus padres son esos típicos padres que no te apoyan en las cosas que quieres hacer, porque no es lo que ellos tenían planeado para ti.
Agradezco que mis padres son más abiertos a cualquier cosa que quiera hacer con mi vida, por eso considero que soy una chica afortunada. Elliot no cuenta con mi misma suerte, por eso trabaja para conseguir la mayor cantidad de dinero posible para independizarse de sus padres.
Mientras tanto estoy comenzando a estudiar para el examen para poder ir a estudiar a la universidad, una carrera que no quiero, que mi vida se allá pausado por dos años, no significa que dejare mi vida igual que como estaba, tengo que seguir adelante, nada está sucediendo como lo había preparado hace años, mi vida no sigue el curso que yo quería que siguiera, para este momento estaría en la gran ciudad estudiando mi carrera favorita, aunque pensándolo bien, por más que mi vida siguiera ese camino sería imposible porque necesitaría dinero, el cual no tenemos.
Era medianoche, me había quedado dormida en la sala con la computadora abierta en páginas de internet explicando cómo pasar con éxito el examen, y libros con la información que necesitaba para el mismo. Me despertó la vibración de mi teléfono al lado de la mesa, me habían llegado un mensaje de Elliot.
Elliot Joel 12:08am
Hola, lo siento por no estar conectado últimamente, he estado muy ocupado, te amo, besos.
Respondí al instante.
Sofía Noé 12:09pm
Entiendo, todo estará bien si me traes galletas la próxima vez que vengas.
No hubo más respuestas de su parte, lo cual me decepciono un poco, aunque como dije hace rato entiendo su situación.
***
Han pasado varias semanas, cada fin de semana Elliot y yo nos reunimos, vemos películas pues tengo una gran lista de ellas y estrenos que no vi por estar en coma, Elliot llega con una bolsa llena de comida, incluso en varias ocasiones le trajo a mi madre también, en una ocasión o dos se tuvo que quedar porque afuera estaba lloviendo y así no se podía ir a su casa.
A veces traía el Monopoly para jugar, también jugamos UNO, ha pasado tiempo desde que tuve sueños extraños, otras personas tienen otros tipos de sueños, tal vez en este momento pienses en aquel sueño extraño que tuviste la última vez.
Desde hace unos días he empezado a sentir la presión, no le he dicho a Elliot que las noches en las que no he ido al mirador, o los fines de semanas que no puedo ver películas con él, no son porque me quede dormida, son por otra razón, cuanto me gustaría que fuera así en realidad.
La verdad es que he pasado noches estudiando, preparándome para obtener mi título de bachillerato. En mañana será la prueba, que solo me harán a mí, porque soy la única persona que la vida la quiere tanto que decidió quitarle dos años de ella. Decidí tomarme esta noche como descanso, me encuentro de camino al mirador, apenas este ahí le avisare a Elliot como me he sentido estos días.
A raíz de eso, otra cosa que le he estado ocultando es que mi madre al saber que tendré el título y que quiero continuar mis estudios, anda con la idea de que estudie biología y química, en la universidad del pueblo en donde vivimos, la mayoría de lo que están estudiando no consiguen ejercer sus carreras en un pueblo tan poco civilizado, de que me sirve pasar cinco años de mi vida estresándome por una carrera que no quiero, que no voy a ejerceré o tal vez si, solo para darle clases a unos simples adolescente que en esa etapa todo les vale mierda.
Pensar en ello me estresa, me estresa muchísimo, estudiar esa carrera o no, me estresa, esa es la verdad. Que no he querido gritarle al mundo, por miedo a que piensen mal de mí, que soy un caso perdido.
Odio que no se tomen el esfuerzo de ayudarme a ir a una mejor universidad, hemos vivido siempre en el conformismo, conformándonos con lo poco que podemos lograr, con lo poco que podemos hacer.