Mis cuentos.

El pez raro.

En una tarde muy calurosa, estaba en un zoológico dónde había muchos animales. Había una parte del zoo abierto donde se encontraban animales como por ejemplo, jirafas, gaviotas, un gato montés, etc...

Y otra zona interior donde también había un pez muy raro.

Tenía la cabeza de un tiburón martillo, el cuello de una jirafa, el busto como el de una foc, la cola como la de un gato montés y hasta tenía dos alas de gaviota. ¡Eso era un pez muy pero muy raro!

Mucha gente, de tanto que les parecía extraño ese animal, pensó que nunca deberían prestarle atención.

Otras personas pensaban lo contrario y decían que había que admirar ese pez, ya que era muy raro y nunca encontrarían nada igual y se sacaban fotos con él.

 

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Era un domingo como los demás, cuando de repente, llegó un grupo de personas para transferir dicho pez a otro acuario y examinarlo.

Pudieron entonces descubrir que era hembra y la llamaron Malena.

La cuidaron por lo menos cuatro años. Pero un día en el que cambiaban el vidrio superior de su piscina en el acuario, ella se fue volando con sus lindas alas de gaviota.

Los visitantes al ver a Malena al ver a Malena volar por el cielo se sorprendieron.

Cerca de donde volaba Malena a unos minutos de haber emprendido su viaje, se encontró con un chico que andaba en globo aerostático, quién al ver un pez tan raro, la llevó a otro zoológico.

Se quedó allí por lo menos dos meses, pero como no le gustaba mucho, una mañana que limpiaban el pasadizo submarino para salir al mar, se lo olvidaron abierto y ella pudo escapar silenciosamente.

Todos se preguntaban: "¿Dónde está Malena?" Y no la encontraban, pero ella ya estaba navegando libremente por los mares.

 

🌸💚🌸

 

Malena navegó tres meses enteros descansando en las islas. Pero un dí, Malena no vio que en la isla donde estaba descansando había un acuario.

Pero una nena sí vio a Malena que nadaba alrededor de la isla y como sólo se le veía la cabeza salir del agua comenzó a gritar: "¡Un tiburón martillo!" Entonces el guardia del acuario, pensando que realmente era un tiburón martillo, la capturó con una red. Muchos al ver qué capturaba a un inocente animal pensaban: Pobrecito. Mientras que otros se reían y se burlaban de ella.

Pero el guardia no era malo. Le dió una mejor vida a Malena, cuidándola y echando a todos los que se burlaban de ella y dejándola salir a pasear en el mar todas las veces que deseaba.

Malena muy contenta y orgullosa, no escapó más. Se encontraba demasiado bien allí y decidió no irse nunca de ese lugar tan especial.



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En el texto hay: cuentos infantiles breves

Editado: 09.10.2020

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