Jamás me había sentido tan sola, abandonada por todos, alejada de mi mundo...una mala elección, el salir de él, salir sí, pero no por obligación, sino porque así lo desee yo, y ahora en la penumbra, perdida y asustada, la mano que me guiaba me dejo a medio camino... no, espera, no me dejo, fui yo la que le soltó cuando me guiaba por el lugar correcto, seguí una sombra que me prometía amor e ingenuamente creí en ella, pero me arrastro a la oscuridad y desapareció, y ahora estoy sola, esperando que alguien me rescate, del mundo que no conozco.
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Editado: 20.01.2019