V

Laila pero en qué momento tomaste confianza con él, apenas lo conoces hace un día y ahora Arnold tiene una foto de mi dónde le parezco adorable, creo que la falta de amigos hombres o hombres en mi vida me afectó me estoy ilusionando muy rápido, pero ahora me doy cuenta que todos los amigos hombres son virtuales, eso es triste.

Teresa: LAILAAAAA!!!!!

Laila: Dios Teresa, no grites que necesidad, estoy a lado tuyo.

Teresa: ya llegamos al colegio, que pasó te subiste a tu nube, que ni viste en que momento llegamos.

Laila: ya ok lo admito me perdí entre mis pensamientos, mejor salgamos antes qué nos cierren las puertas._ volteó y su miradas se encontro con la de Arnold, él con una sonrisa y Laia con una mirada que amenazaba.

Llegaron al café pidieron sus desayunos Teresa más que Laila.

Teresa: no me piensas decir en qué estás pensando.

Laila: en nada estoy bien por qué Megan no estará en mi casa.

Teresa: no trates de engañarme esa mirada es nueva, se tratará de un chico.

Laila: no hay nadie en especial sabes que nadie me haría caso, al menos que esté tan mamadísima  como las demás, solo míralas su cintura de avispa, labios perfectos, sin ningún grano o espinilla y altas, todos los hombres quieren unas así.

Teresa: por qué siempre te opacas al ver a las demás, tú estás bien tienes tu cintura formada, abdomen plano, con una cabellera radiante.

Laila: solo mira esto, mucha grasa, hasta ya me está creciendo la papada._ apretó sus rollitos mostrando a Teresa sus imperfecciones.

Teresa: como tú digas Laila, no quiero discutir contigo nos reunimos para reforzar nuestra amistad.

Teresa comió su desayuno hasta no poder más sentía que en cualquier momento su prenda iba a estallar, Laila apenada lo tocó su empanada.

Teresa: segura que te llenaste, si quieres te puedo esperar.

Laila: si ya no puedo más, me lo llevaré para comer más tarde, la voy a terminar no te preocupes.

Llegaron a su colegio entraron justo al receso, Teresa decidió jugar fútbol con las demás mujeres que estaban en la cancha, Laila con gusto la acompañó en medio juego su estómago rechazo su desayuno tratando de ignorarlo no quería desechar un desayuno delicioso pero ya había mal acostumbrado a su sistema. Corrió al baño con su mano en su boca y la otra en su abdomen pero otra vez se vio de rodillas votando su emesis.

Teresa: ¿Laila? Donde estás._ cuando acabó se acomoda su cabello y trató de verse presentable.

Laila: estoy aquí tranquila ya salgo.

Teresa: Laila pero que susto estas bien, ocupas algo.

Laila: estoy bien solo necesitó mucha agua. Debemos apresurarnos el maestro no nos dejará entrar.

Regresaron a su aula tuvieron la suerte, de que su maestro no había llegado aún, cuándo llegaron a su mesa vieron que otra muchacha ocupaba el lugar Laila.

Teresa: disculpa te equivocaste de mesa.

Laila: está ocupado, yo ocupó ese lugar.

Desconocida: si hay perdón, es qué recién acabó de ingresar.

Teresa: tranquila aquí adelante hay uno.

Desconocida: muchas gracias, por cierto soy Shanne.

Laila: mucho gusto Shanne yo soy Laila y ella es Teresa.

Shanne: que bonitos nombres.

Con su nueva amiga las tres se sentaron a conversar, Shanne parecía estar en un interrogatorio por Teresa, por poco le pregunta qué tipo de sangre lleva, culminó su día de clases intercambiaron números con Shanne la nueva. Para mantenerle al tanto de los horarios, el uniforme y las tareas, Arnold esperó que Teresa se bajara para poder ir con Laila.

Arnold: hola Laila.

Laila: hola de nuevo.

Arnold: que tal tu día, te escapaste al parecer.

Laila: no creas que me olvidé de la foto, tienes qué eliminarla.

Arnold: ¿para qué? Igual lo tienes en tu red social.

Laila: ya lo puse privacidad ahora sólo falta que tú lo elimines.

Arnold: no puedo cuanto lo siento.

Laila: pero qué sarcasmo, bueno yo me pongo a escuchar música puedes volver atrás.

Arnold: ese es tu plan ignorarme, bueno tú ganas lo voy a eliminar por qué no te quiero ver enojada._ sacó su celular lo eliminó delante de sus ojos de Laila para quedar contenta, pero lo que no sabía es qué ya lo había guardado en otro lugar, Laila arrebató de sus manos de Arnold y tomó una selfie de los dos ella con una sonrisa con su cabello suelto, él con una mirada seria, su primera selfie juntos. (No sé pero esa parte de mi vida la llamó felicidad).

Laila: ¿por qué serio algo tienes contra todo el mundo?

Arnold: que tiene no le veo algo de malo, es mi mirada normal.

Laila: ¿tienes dientes?

¡¡Wtf!! (What The Fuck)  Quién pregunta eso, si los tengo no por qué no sonría en las fotos quieres decir que no tenga dientes, Laila y sus preguntas extrañas. (Arnold).

Arnold: si tengo, todos tienes.

Laila: ya sé están amarillos o sucios, ¿verdad? Tranquillo no te voy a juzgar.

Arnold: ¡Wtf! Qué estás diciendo, si tengo mira están blancos, no me gusta sonreír es todo.

Laila: amargado.

Arnold: ¿qué preguntas más raras?

Laila: Jajajajaja.

Arnold llegó a su destino conversar por la mañana y por la tarde era una costumbre que le alegraba el día a Arnold. Laila no sé hacia ilusiones por qué no se sentía su amor propio a ella y no estaba segura para sentir por otra persona. Laila llegó a casa y lo primero que vio fue el coche de la golfa (diré la amante de su padre) la odiaba tanto qué decidió ponchárselo una llanta, no le diría nada a menos que estaría su padre pero igual no le importaría su regañada o lo que le va a decir, escuchó llantos y gritos entró a su casa estaba su padre, su madre, Megan, el perro y la inmundicia (basura, suciedad).