Capítulo 2. Desconcentrado

*NICOLLAS*

No podía dejar de pensar en Rebecca, saliendo del hospital recordé que el propósito de mi visita era llevarle las tareas del día, pero hice todo menos darle las tareas.

Lo único que quería al llegar a casa era dormir, pero recordé que tenía demasiada tarea, tenía que pasar los trabajos en limpio y ponerme al corriente con el grupo, pero no podía dejar de pensar en Rebecca, lo hacía más difícil porque no me lograba concentrar, solo pensaba en ella.

-¿En qué piensas tanto Nicko?-me saco mi madre de mis pensamientos.

-Mejos dicho quien-la corregí. Sabía que no podía ocultarle algo a mi madre, era imposible no contárselo, le tenía muchísima confianza y le contaba de todo.

-¿Quién, en quien piensas tanto?

-En una chica que he conocido hoy en clase.

-¿Cómo se llama?-pregunto con curiosidad.

-Rebecca-mencione.

-Es un lindo nombre.

-Ella también es linda-respondí con una sonrisa.

-Creo que mejor iré a terminar unas tareas, me dejaron bastantes para la siguiente semana, pero no quiero dejar todo para el último.

-Me alegra mucho que lo hagas en el momento cariño.

-Adiós mamá.

-Adiós cariño.

Algo que me gustaba de mi madre era que le podía contar cualquier cosa y nunca me juzgaba.

Decidí ir a mi habitación y poner música un rato.