Capítulo 8

                       Jhon

No hemos podido coger a Peter, el muy cabron se ha ido antes de que nosotros llegasemos, pero hemos obtenido unos documtos y un pendrive, Anaís se ocupará del pendrive. Richard y Brian han vuelto a su casa. 

Marck me ha comentado que va darle“clases"a Lucía, esa chica va a tener al mejor como su maestro. El esta asustado porque ha descubierto la venganza de Raquel para nosotros, ella quiere que sepamos lo que es esta embarazada, menuda tonteria. Pero será mejor no provoca a Raquel durante estos meses. Ya ha empezado con los cambios de humor, el otro día cuando le dijimos que nos teníamos que ir durante unos días, se puso hecha una furia, luego comenzo a llorar mucho y no teníamos ni idea de que hacer. Dios estos cambios de humor son muy extremos y pasa con cualquier comentario, no queremos que se vuelva a enfadar con nosotros, lo bueno del embarazo es que si libido se ha disparadodisparado, eso es lo único en los tres la podemos ayudar y no voy a negar que lo nos gusta mucho. Estamos deseando encontranos con ella. 

Entró en la cocina y allí está Raquel, se está comiendo una galleta de avellanas, es lo más normal que la he visto comenze en los últimos días. No lo puedo evitar y me acerco a ella para besarla. Ella me mira y no dice nada, tiene la boca llena de galletas. 

Raquel— Marck no está, ha ido a ver a Lucía. Me ha dicho que estará fuera un buen rato. 

Jhon—Si, algo me había comentado¿ Estas celosa de Lucía? 

La abrazo, tengo una gra erección en mis pantalones. 

Raquel—porque debería de estarlo. Ella me cae bien y no creo que Marck se vaya a acostar con ella. 

Jhon—Tienes razón, a ninguno de nosotros te haría eso. Te somo muy fieles. 

La beso, ella abre la boca y le meto la lengua. Sabe a avellanas, comienzo a bajarle el vestido que lleva. De depende noto otras manos en la cintura de Raquel. 

Dereck— Te dejo solo un momento y te encuentro en esta situación sin siquiera avisame. 

Raquel—Vamos arriba, que ni quiero que entre nadie y nos vea. 

Dereck la cogió y la cargo al estilo princesa y nos fuimos corriendo a la habitación. Si Marck no se hubiera ido para enseñar a tortura... 

Nos desnudaron y Raquel se tumba en la cama. Dereck se ocupó de su clítoris y yo me lanceoladas hacia sus pechos que se estaban haciendo cada vez más grande, bendito embarazo. Cuando ya está lista Raquel se puso encima mio y se colocó encima de mi polla, sus movimientos eran suaves y Dereck se la metió por detrás. 

                 Raquel

Me levanto de la cama y voy directamente al baño, odio las náuseas, entre las náuseas y los mareos, estoy muy jodida. Para estos lo peor son según ellos mis cambios de humor, YO NO TENGO ESO. Vale puede que me altero enseguida, pero es culpa de esos, son unos pesados y unos imbéciles. Casi nunca me dejan sola, siempre tengo a uno de ellos cerca. Pero bueno pronto llegara la máquina de los dolores y ellos sabrán lo que es sufrir de verdad, la lastima es que no haya ninguna para que sepan lo que son estos síntomas.  Pero solo inventaron para los dolores, bueno siempre me queda los sacos de patatas. De momento no los voy a obligar a ponérselo, porque están muy ocupados por lo de Lucía. Me gustaría poder ayudar en algo, pero a diferencia de ellos, no soy ni una mafiosa ni una hackers como Anaís, lo único que puedo hacer por ella es see su amiga. He pensado en hacer una fiesta de pijamas , estaremos las cuatro: Marina (si esta libre y si su padre la deja) Anaís, Lucía y yo. Ya se que somos pocas, pero mejor. Además quiero hacerlo antes de que tenga la barriga más grande y no me pueda mover. 

                      DERECK

Me despierto y no encuentro a Raquel, me dirijo al baño y no está, lo más seguro es que este en la cocina comiendo algo raro. El otro día se estaba comiendo un sándwich de pepinillos y crema de cacahuete, que asco. No me atreví a decirlo en su cara por miedo a su reacción. La última vez que alguien le dijo le lanzó un vaso, menos mal que tiene mala puntería, de lo contrario teníamos que llevar a uno de mis hombres al hospital para que le diera puntos en la cabeza. Ahora tenemos mucho cuidado con ella también cuando tenemos sexo, no queremos que le vaya a pasar algo a los bebés, se que el doctor dijo que no pasaba nada, pero nos queremos llevar ningún susto. 

Marck acaba de llegar de la mansión de Richard. 

Dereck—¿ Que tal te ha ido con.. Lucía? 

Marck—Bien, ella aprender rápido. Creo que es porque esta muy motivada. Estoy pensando en regalare un cuchillo especial para la caza. 

Dereck—Puedes conseguir uno de nuestros proveedores. 

Marck—Le voy a hacer grabar un mensaje. 

Dereck—Se nota que te ha caído bien esa chica. 

Marck— Es agradable, al pesar de lo que ha pasado. Todavía se mantiene en pie, creo que cuando acabe con su venganza, se sentirá muy bien. 

Dereck—Ya me lo dijo Richard, que es una mujer muy fuerte mentalmente. Porque otras en su lugar nunca hubiera confiado en ningún hombre, pero ella en cambio...