Capítulo 12

• Little wolf- Epic musical (saga wisdom)

Al día siguiente todos se encontraban en el campo de entrenamiento, habían jóvenes practicando el tiro con arco, esgrima o combate en parejas, mientras buscaba a Anya, sentía las miradas de las personas que estaban ahí.

-¿Princesa Evangeline?- la voz de un hombre, le dijo su nombre, al voltear vio un hombre de armadura a medio poner, con ojeras y cabello despeinado.

-Si, soy yo señor….

-Caballero, caballero Deer; soy quien estará con ustedes en su entrenamiento del día de hoy.

-Señor Deer..

-Caballero- interrumpió Deer con un tono molesto.

-Lo siento, caballero Deer, no tengo experiencia en combate, jamás he peleado de ningún tipo de forma…

-En ese caso será una lástima si llega a lastimarse. Sígame.

Deer y Evangeline se dirigieron a una zona donde solo estaban, los herederos, Anya, y más jóvenes que no conocía, de inmediato que vio a Anya se acercó a ella.

-Hola, ¿cómo te sientes?- le consulto Anya.

-Muy nerviosa, cuando venía en camino todos me veían como si fuera un fenómeno, y digamos que le di una muy buena impresión a Deer.

-Las personas de aquí son prejuiciosas, pero estarás bien, yo te podré ayudar.

-No te preocupes, tuve un presentimiento antes de salir y traje mi varita- de su bota pudo mostrarle su varita escondida.

-¿Es un presentimiento bueno o malo?.

-”Estoy teniendo un deja vú” , Depende, solo sé que tenía que tenerla cerca.

Deer, lanzó armas al suelo: espadas, hachas, mazas, látigos, ballestas, alabardas, arcos, lanzas; todos se reunieron alrededor de las armas que estaban en el suelo.

-Hoy todos están aquí para recibir un entrenamiento, nuestro gran rey Kellan me dio la orden especifica que todos los nobles jóvenes asistieran a este entrenamiento, la mayoría de los que están aquí no han recibido algún tipo de entrenamiento en toda su vida, a excepción de los hijos de las familias reales, de ellos espero resultados excepcionales, de los demás no espero nada, tomen un arma.

Todos se abalanzaron a tomar alguna paso de la pila de armas, Evangeline ni siquiera pudo ver lo que tomo hasta salir de la multitud, en sus manos pudo ver un arco de madera, pintado de negro.

-”Perfecto, tengo una terrible puntería”, busco con la mirada a las personas que conocía, Anya tomo una lanza, Tristan una espada, Cris un hacha, Audrey un latigo y Dago una ballesta.

-Las armas que tomaron serán las que tendrán que dominar hasta el día en que mueran, no van a intercambiarlas con nadie, aprenderán a usarlas ustedes solos..

-Caballero Deer, usted dijo que iba a estar con nosotros el día de hoy- interrumpió Evangeline.

-Por supuesto princesa, dije que estaría con ustedes, pero ustedes aprender a luchar.

Después de escuchar sus palabras, no pudo escuchar nada más jamás estuvo en un combate y le aterraba, la idea.

-Evangeline, ¿me estás escuchando?.

-Lo siento Anya, no estaba prestando atención.

-Tal vez podamos entrenar juntas, ven ayúdame a mover mi pells para poder practicar.

-¿Habías usado antes una lanza?.

-No, ¿y tú un arco?.

-No, pero solía jugar dardos.

-¿Entonces tienes buena puntería?.

-No- mustio Evangeline.

Ambas movieron el pells para que Anya pudiera entrenar junto a Evangeline, cada una trato de entrenar en su propia arma asignada, Anya daba golpes precisos pero era muy lenta, le costaba sacar su arma después de el ataque; Evangeline por su parte, no podía mantener firme el arco, los brazos se le cansaban muy rápido, la flecha se movía sin razón, cuando pudo dejar quieta la flecha la soltó, la flecha no cayó muy lejos ya que no hizo la suficiente fuerza para poder darle más velocidad a la flecha.

-Creo que necesitaras ayuda con eso- Tristan apareció detrás de Evangeline lo que la asustó.

-Tristan, vas a matarme de un susto.

-Y tú matarás a alguien con esa cosa.

-No es mi culpa, nunca había usado un arco.

-Cris y Dago no se la estan pasando mejor que tú, yo tengo una espada, no me es tan dificil ya he usar una antes, ¿quieres que te ayude con eso?.

-No gracias, ya encontraré una forma de aprender por mi misma.

-Hola Anya, lo siento por no saludarte; no te ví- le dijo de una forma burlona.

-Ya estoy acostumbrada Tristan.

-Creo que tampoco se la están pasando tan bien.

-A mi no me preocupa el arco, pero no se pelear con una persona, cuerpo a cuerpo.

-Yo puedo enseñarte, no soy un experto, pero me defiendo.

-Literalmente- dijo con una risa nerviosa.

-¿Te importa si te la robo un momento Anya?, gracias yo sabía que no.

Tristan jalo a Evangeline con él, no antes de que Anya tome la mano de Evangeline, la jalo provocando que Tristan la soltará, eso le dio oportunidad de hablar ellas solas.