#5: Juls

¡Todo estará bien, solo camina, tu puedes Juls!

Me animo a mi misma antes de bajar por completo del auto que se ha encargado de traerme hasta el enorme hotel, donde el aniversario de la empresa de papá se llevara a cabo, caminar frente a todas estas personas es sumamente incomodo, aun cuando vas acompañada por mas de seis personas.

Así que antes de obligarme a seguir caminando respiro profundo para darme el valor que ha desaparecido desde hace unos años atrás y sin mas comienzo mi caminata por la gran alfombra roja con el único propósito de llegar hasta donde mis padres se encuentran, así que camino hasta donde ellos se encuentran sin voltear ni un momento hacia los miles de fotógrafos que me piden a gritos que me detenga pero no lo hago hasta que estoy frente a Charlie, quien me mira sorprendido.

—Tu... Es.. —Balbucea torpemente pero no dejo que continúe, pues lo rodeo para así llegar hasta donde mis padres se encuentran, quienes quedan encantados al verme.

—Cariño estas hermosa —Me dice mama mientras me envuelve entre sus brazos, lo cual agradezco de inmediato, pues era algo que necesitaba.

—Gracias mamá.

—"Lucha contra tus miedo...

—...y podrás dominar el mundo" —Termino la frase de papá, el cual me sonríe con cariño antes de abrazarme de igual manera.

El eran el único que sabían todo lo que había pasado al principio de mi vida. Nadie podía saber de todo lo que paso, sabia que todos me odiarían por esconder secretos, lo sabia muy bien y por eso mismo era que vivían guardándolos dentro de mi ser.

—Tenemos que tomarnos la foto. —Nos interrumpe una voz tras nosotros y por mas que trate de no bufar ante su voz, simplemente no lo consigo, no después de lo idiota que se ha comportado, así que sin mas rompo en abrazo con papá con la intención de enfrentar al idiota.

—Aquí no —Me toma mamá de la mano al ver mis claras intensiones, a lo que me limito a asentir con la cabeza.

—Pues vamos ya —Nos pide papá tomando el brazo de mama para emprender su camino hasta el centro de la alfombra roja, donde miles de fotógrafos esperan ansiosamente, así que sin mas sigo el paso de mis padres tomando de la mano a los pequeños mellizos, quien me cuentan sus anécdotas con bastante emoción. 

Estas frente a tantas cámaras era incomodo para mi pero el tener a mi familia rodeándome me da mucha mas confianza en mi misma de la que tenia desde que podía recordar. Mis hermano mayor es el primero, después sigue mis dos hermanas dejando así a mis padres en medio de nosotros, dejándome justo a lado del idiota, quien parece aburrido y fastidiado ante todo esto, para terminar con los pequeños mellizos quienes se encuentran frente a todos.

—Sonrían —Nos dice papa a lo cual todos sonreiremos pero la mía desaparece al sentir un brazo deslizarse sobre mi cintura, acercándome mas al idiota que parece disfrutar mi expresión.

Y eso no es lo que mas me desconcierta. Lo que mas me sorprende es que  Charlie sea el dueño de la mano que acarician mi costado de una forma abrumadora, consiguiendo despertar sentimientos que hace mucho no aparecían, acelerando mi corazón al doble de las pulsaciones normales que un humano puede llegar a tener.

Pero el contacto se rompe cuando es hora de entrar, cuando estoy a punto de preguntarle a Charlie por tan raro comportamiento es rodeado por miles de personas, como si de una verdadera celebridad se tratara.

¡Maldito Charlie!

Suelto antes de empezar a caminar hacía la recepción del gran  hotel.

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La fiesta es impresionante todo ha salido de maravilla o eso es lo que yo puedo observar, justo ahora todos nos mantenemos plenamente callados al estar comiendo de nuestros caros platillos mientras una música suave suena de fondo. Los gemelos parecen contentos con el pastel de chocolate que han servido de postre, ambos ríen cuando alguno de los dos llega a mancharse de chocolate en alguna parte de su rostro, lo cual me contagia logrando que la incomodidad de tener a Charlie sentado justo a lado de mi, desaparezca por unos minutos.

Las luces bajan un poco y se que el momento que he estado evitando a llegado, así que respiro hondo antes de tomar la mano de la persona que la ha extendido para mi, quien es nada mas y nada menos que Charlie Woods, con el que tendré que bailar la primera canción de la noche, acompañando a mis padres y a mis hermanos, haciendo honor a la tradición de los Woods, donde todos debemos de participar.

Me pongo de pie a regañadientes y me encamino hasta la pista de baile sujetando la mano de la persona que menos me agrada, pero algo ha cambiado, al estar tomada de la mano de el, el sentimiento de odio y rencor desaparece siendo remplazado por cariño y una paz que hace mucho no había sentido. Me desconcierta mucho la tranquilidad que a ambos nos rodea pero me desconcierta aun mas la manera en que el pulgar de Charlie traza círculos sobre mi mano.

¡Es una trampa, el esta actuando, el nunca haría algo así por ti!

Grita mi subconsciente pero mi cuerpo no parece reaccionar, es como si se encontrara bajo un hechizo, uno que no soy capaz de controlar. Puedo escuchar la música, también puedo sentir la mano que Charlie ha posado sobre mi cintura y la manera en que ambos nos movemos ante la música.

Mi subconsciente me grita que me aleje, cuando nuestros rostros están a una distancia muy corta, una que da miedo. No se que me pasa o mas bien no se que le pasa a mi cuerpo, quien parece estar encantada ante su contacto, ambos nos mantenemos la mirada, ambas se retan, se mezclan y se pierden una en la otra.

Nunca me había pasado esto, no desde hace ocho años, cuando conocí al mismísimo diablo, ninguno de los dos habíamos tenido una cercanía tan profunda como la de estos momentos, es mas, nunca nos había saludado, ni mucho menos bailado.

Me alejo por primera vez en toda la noche, soy capaz de tomar el control completo de mi cuerpo. El parece sorprendido pero aun así no me suelta, impidiendo que salga corriendo en dirección contraria a el.