Al otro día nos levantamos, desayunamos y nos fuimos a preparar para la siguiente clase: Natación.
Jasón era el encargado de esa clase. Lux obviamente estaba allí con sus amigas y Caya.
—Bueno, esta clase de natación sé que no es buena idea, pero es más que nada para que puedan aprender algunas cosas básicas sobre como nadar correctamente. Bien, van a hacer filas de cinco chicas y se van a parar frente al borde de la piscina por hileras.
La piscina de la Academia era olímpica, era bastante grande y sabía nadar a la perfección, así que me iba a divertir bastante en esta clase.
Observé a Lux, no iba a desperdiciar esta oportunidad.
Pasaron las primeras cinco chicas, entre ellas Marivith y Melin.
En la segunda fila, estaba yo, Lux, Jade, Agus y Clara.
—No creo que sea buena idea que Lux y tú estén en la misma fila— comentó Jason.
—No es problema, Jasón, relájate— tranquilicé.
—Solo procuren no ahogarse entre sí, solo van hasta el final de la piscina y vuelven, sencillo.
—Entendido— respondí.
Llegar hasta el final de la piscina y cuando llegue a la mitad, fingir que me ahogo así, tú me rescatas y me das respiración boca a boca delante de Lux. Si claro que entendí, a la perfección.
Así fue, me tire a la pileta cuando Jasón dio la señal y mi plan comenzó, llegue hasta el final de la pileta y cuando llegue a la mitad, comencé a hacer que me ahogaba. A los lejos escuché la voz de Marivith que decía que me estaba ahogando y la de Lux decir que me hacía la que ahogaba, pero no paso ni cinco segundos que Jasón ya se había tirado a la pileta para rescatarme, hasta qué logro sacarme.
—¡Jasón, haz algo, no reacciona!— pidió Maritivh.
—No puedo creer que hayan caído en su trampa— oí la voz frustrada de Lux.
—Lux no es momento para estupideces— respondió Jason molesto.
—¡Hazle respiración boca a boca, apúrate!— pidió Marivith.
Gracias, Mar, alabada seas.
—Si, eso haré.
Jasón tapó mi nariz y apoyó sus labios sobre los míos y el aire comenzó a entrar en mis pulmones.
—Esto es patético, me largo.
En el primer intento no "Reaccione", los haré sufrir un poco más.
—No reacciona— avisó Jason con temor.
—¡Pues sigue intentando!
En el segundo intento "Reaccione" mientras largaba unos exagerados tosidos.
—Rhea, ¿cómo te sientes?— indagó Jason con alivio.
—¿Estás bien?— interrogo Marivith.
—Si, no se preocupen, solo quiero ir a descansar, si eso es posible.
—Sí, ve, yo le informaré al Señor Bell.
—¿Puede venir Marivith conmigo?
—Si claro, ve con ella— accedió Jason.
Fuimos de regreso al cuarto.
—¿Cómo te sientes?— indagó Marivith con preocupación.
—Para haber hecho un plan de cinco minutos y haya salido a la perfección, pues me siento bastante bien— levanté amabas cejas con diversión.
—¡Estás bien loca!— soltó una carcajada.
—Solo era para fastidiar a Lux.
Mientras hablábamos, alguien entro a la habitación, golpeando fuertemente la puerta.
—¡Eres una maldita, yo sabía que todo era actuado!— dijo Lux a gritos.
—¿Lo sabías?. ¡Felicidades!— solté unos aplausos con mis manos— Te has ganado un autógrafo de mi parte.
—Y estoy segura de que lo del insecto fue culpa tuya también.
—Felicidades, ya puedes recibirte de adivina— respondí burlona.
—Esto no se quedará así— advirtió.
—Suerte con eso.
—Te daré donde más te duele.
Solté una carcajada.
—Para eso si vas a necesitar suerte.
—Ya lo veremos.
Se retiró del cuarto furiosa y yo me recosté sobre mi litera.
—Es realmente irritante— comentó Marivith.
—Si, pero no me conoce, hace mal en meterse conmigo.
—¿Qué vas a hacer?
—Voy a subir la apuesta, besaré a Jasón delante de ella y tú debes ayudarme.
—Solo dime qué debo hacer.
—Jasón, hoy ayudará a poner las cosas de la mesa a la hora del almuerzo, entonces yo aprovechare y haré que hablo con él mientras que este solo, luego haré la que me tropiezo y lo besaré, tú solo debes encargarte de que Lux nos vea.
—Dalo por hecho— respondió Marivith con complicidad.
Luego de unos momentos, llego la hora del almuerzo, ya tenía todo arreglado, solo debía distraer a Jasón hasta que Lux venga.
Ahí estaba Jasón en el gran comedor, preparando las cosas para el almuerzo. Galen no había llegado, seguro que estaba en clases, en fin, me acerque a Jasón y espere a que Lux llegara.
—Me tomo mi trabajo con seriedad, quería agradecerte por haberme salvado hoy, por eso seré buena y olvidaré que te has comportado como un idiota el día de ayer.
—¿Hasta cuando seguirás con eso?— formó una sonrisa— No fue nada, era mi responsabilidad como el encargado de la clase y siento haberme comportado así.
—Si, pero de todos modos te lo agradezco.
—No hay nada que agradecer y dime, ¿te sientes mejor?
—Sí, es solo que soy pésima nadadora— bromeé.
—Si, ya lo note— soltó una risa.
Cuando hablaba con Jasón, apareció Marivith haciéndome señas de que Lux estaba llegando al comedor.
Hice que me acomodaba el zapato, perdí el equilibrio y caí sobre Jason, no dude en besarlo y él correspondió el beso.
Lux ingresó al comedor y lo primero que vio fue a mí y a Jason besándonos.
—¿Qué haces maldita?— indagó Lux despotricando furia.
Nos levantamos rápidamente.
—Nos estamos besando o ¿no ves?— respondí obvia.
—¡Eres una perra!
Se acercó a mí y me empujo e hizo que cayera al suelo.
—Y tu una maldita loca, por eso Jasón te dejó y ya no quiere estar más contigo.
—Que poco hombre eres Jasón.
—No te debo ninguna explicación— replicó Jason.