Gabriel sufre de un trastorno obsesivo compulsivo que le impide relacionarse e intimar con las mujeres, y que le complica los planes de casarse y formar una familia. Una exigencia que debe cumplir si quiere permanecer a la cabeza del negocio de una familia muy tradicional como la suya.
La solución a su problema: Contratar una esposa de mentiras.
Antonella es una chica cuyas relaciones siempre han sido problemáticas y ya está harta de caer en lo mismo, por lo que un inesperado contrato de matrimonio que solo será de apariencias, sería muy beneficioso para ella sobre todo para olvidarse de su ex; pero, quizás lo será hasta que ambos tengan que convivir bajo el mismo techo y ella descubra las extrañas obsesiones de su marido de mentiras.
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