Déjame ir
00:11 a.m.
Con dificultad he escrito esta carta, con mis últimas fuerzas, con mi última añoranza de verte, me recosté en la cama a pensar en que decirte, no quisiera despedirme, pero la culpa de no hacerlo me la llevaré al marcharme de este mundo. Sé que vienes pronto pero no llegarás, ella llegará primero a buscarme y solo encontrarás lo que fui, tal vez sea mejor así, no querrás ver los estragos que ha hecho esta enfermedad en mi. Tú me recordarás, como aquella muchacha ingenua que pensaba en que volvieras de aquel viaje, en reencontrarnos, la que esperaba por ti para seguirte amando.
Pero no puedo esperar más, la vida se me va con cada letra que escribo y cada lágrima que corre por mi rostro, no olvides vivir, no dejes de soñar, solo me conformo con eso, y con que alguna vez sueñes conmigo quizás, si así lo deseas, yo iré a tus sueños para conversar, iré a ti cuando me llames, y sí un día ya no me amas más, lo entenderé, así debe de ser, déjame ir si quieres, te prometo que me iré.
Tengo ganas de cerrar los ojos, aquí en este papel he dejado todo, toda la vida que me quedaba.