Moonlight Serenade

De repente es primavera (Suddenly It's Spring) Primera parte

Maia despertó con el sonido de los pájaros que anunciaban el amanecer, estaba demasiado fresco y con un poco de neblina. Ella  se estiró y decidió despertar a todos los demás quienes seguían durmiendo a pesar del ruido, se debían de ir para poder llegar a la junta que iban a tener ese día. Al despertarse el grupo de chicos se dirigieron hacia la estación del metro que los llevó a la academia.

Al llegar a su destino fueron primero a la tienda de conveniencia para desayunar algo para después irse al dormitorio donde se cambiaron. Mientras Maia se arreglaba  sentía nervios, sabía que ese día vería al maestro y lo más seguro sabría su decisión. El día anterior lachica había decidido pedirle que la dejara quedarse y en ese momento se había sentido sumamente feliz y con la certeza de que lo lograría, pero estando en la habitación temblaba de los nervios. Estaba tan intranquila que se tardó en arreglar por la cual sus amigas se adelantaron dejándola sola, esto la ayudó para intentar calmarse repitiendose a si misma que no tenía nada que perder. Con esto fue que se dirigió al auditorio.

Tras cruzar los jardines y llegar a la puerta de cristal del lobby se detuvo, su coraje se fue después que escuchara la voz de la directora quien comenzaba a hablar dentro del recinto. Abrió un poco la puerta para ver adentro, visualizando el escenario en donde estaba la directora de pie con un micrófono en la mano y en el mismo escenario sentados los profesores de cada uno de los instrumentos. Maia cerró la puerta y comenzó a caminar de regreso al dormitorio, se alejó tanto que había llegado al principio de los jardines donde se hizo consciente de lo que estaba haciendo, ahí se detuvo y se preguntó a sí misma «¿qué estaba haciendo?». Con esto fue que respiro hondo y tomó fuerzas para regresar, al dar la vuelta se encontró con él maestro Choi quien estaba parado en medio del pasillo observándola  Por un momento ella olvidó todo lo que le iba a decir, pero él fue quien habló primero:

—¿Qué haces aquí?—Esa pregunta hizo salir de su perturbación a la chica quién tomó valor y dijo:

—Vine a la junta y hablar contigo—el chico se quedó mirándola sin decir nada, eso le dio la oportunidad para comenzar a hablar y decirle lo que había ensayado:

—En realidad vine porque quería pedirle o más bien rogarle que no dijera nada. Ya se que estoy cometiendo un fraude pero en realidad no estoy perjudicando a nadie, el lugar que he ocupado en realidad pertenece a mi prima que me lo dio y que ni iba a venir, por lo cual este lugar se hubiera quedado vacío y nadie lo iba a ocupar.

—Tienes razón pero entonces ¿por qué debería de hacerte caso?—le preguntó él.

—¿Qué? —preguntó ella sin entender lo que había dicho, pero el chico no dijo más así que ella continuó: —Porque... porque yo se que los chicos que están aquí pueden ser muy talentosos pero no te puedo asegurar si están comprometidos al 100% con lo que hacen o están aquí por sus padres, lo único que te puedo asegurar es que yo si estoy aquí porque quiero. Tal vez la vida me dio esta oportunidad para seguir algo que me encanta y que tal vez al principio era por ayudar a mi prima, pero ahora estoy segura que lo hago porque quiero.

Con esto terminó, el chico solo sonrió o más bien se estaba riendo, sorprendiendo demasiado a Maia quien se quedó ahí sin decir más, así que él dijo:

—Eso no era a lo que me refería

—¿de qué hablas?—contestó Maia sin entender bien.

—Pregunté porque quería saber porque estabas aquí afuera cuando deberías de estar adentro en la junta, vamos— dijo él, mientras se hacía a un lado del pasillo para que ella pudiera pasar antes. Ella se sintió sorprendida y caminó hacia el auditorio, cuando pasó al  lado de él, fue que entendió lo que eso significaba.

—Espera eso significa que me puedo quedar ¿Verdad?— dijo ella asegurando de que fuera eso. El chico sonrió de nuevo y le dijo.

—Eso significa que te puedes quedar.

Esas palabras hicieron automáticamente muy feliz a Maia tanto que por un segundo quiso abrazarlo y agradecerle, pero se contuvo y solo le dijo:

—Gracias,muchas gracias.

Y se fue caminando hacia el auditorio, aguantando las ganas de saltar y celebrar. Al llegar a la puerta del recinto  Maia intento abrirla lo más lento posible pero por el peso de esta estuvo apunto de azotarse, por suerte la detuvo el chico, quién logró poner su mano en la manija para volver abrirla, este gesto hizo que sus manos rozaran entre ellas por unos segundos, Maia sintió cómo su corazón se aceleró e inconscientemente soltó la manija. Pero el chico sin percatarse de este acto detuvo la puerta y le hizo una señal que entrara ella primero.

Maia asintió y entró lo más silenciosamente que pudo, yéndose a sentar a un lugar que estaba lo más cerca de la puerta para no molestar a los demás. Él se sentó a la misma altura que ella pero al otro lado del pasillo.

En el estrado seguía la directora hablando:

— ...esta tercera etapa del curso se enfocará al concierto. Por lo tanto los horarios de las clases se van a modificar. Habrá sesiones con sus profesores por cada uno de los instrumentos pero también tendrán sesiones generales en donde todos practicarán en conjunto. Al igual los chicos que lograron sus solos tendrán sus sesiones aparte. La maestra Yoon se encargará de darles sus horarios durante esta semana. Y bueno eso es todo por hoy y muchas felicidades por sus esfuerzos y espero que trabajen duro y lo disfruten.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.