-yo… me lastimas, Christopher soltó a Elena, - yo… lo siento, no quería, Elena abrazo a Christopher y un ruido se escuchó fuerte, el viento soplo muy fuerte que abrió la ventana del cuarto de Christopher haciendo que las puertas del armario se abrieran de par en par, - lo prometo, Christopher dejo caer unas lágrimas de sus ojos, jamás había sentido que un abrazo se sintiera tan bien, Christopher sentía una sensación inexplicable dentro de sí, era como fuego esparciéndose por todo su cuerpo y que se detenía en su pecho, los días pasaron, ya es navidad, Christopher bajo las escaleras un poco soñoliento y una mujer de aproximadamente cuarenta años estaba sentada en el sofá principal de la casa, acariciando un gato negro dijo con una vos grave - buenos días, - buenos días madame, -¿ no preguntas quien soy, y por qué estoy aquí,? - no le faltaría el respeto a una hermosa dama como usted señorita, la mujer coloco una expresión de satisfacción en su rostro, Matías salía de su cuarto hacia la cocina, por el desayuno, - ¿Carmen por que hace tanto frio aquí? Matías se quedó paralizado al encontrase con nada menos que la hermana mayor de su esposa, –buenos días, - ¿qué haces aquí? – valla ahora sé que mi sobrino se parece a su madre y gracias a dios no a ti, en ese momento Carmen salía de la cocina con el desayuno de tres personas, - buenos días señor Matías, - eres una completa inútil, como dejas entrar a cualquiera en la casa, -lo siento señor… - Carmen puedes terminar y retirarte, - si señorita, - ¿cómo para que estas aquí?, - ser arrogante es lo único que te sale bien, bueno iré al grano, tenemos que hablar del futuro de tu hijo,- creo que eso a ti no te incumbe, - tienes razón, pero el niño no tiene una madre, - pero tiene un padre, quiere decir que no te necesitamos, - es navidad Matías deberías de estar más contento, Matías golpeo con sus manos la mesa, -lárgate de mi casa vieja bruja, - padre, no deberías de tratar así a tus invitados, Matías miro a Christopher, la mirada de su hijo era como la de su padre, sus miradas transmitían, liderazgo, era como estar ante un alfa, - por favor padre, siéntate, Christopher se sentó en la mesa y miro a la señora, - disculpe, -hola señorito, soy tu tía, la cabeza de la familia, de parte de tu madre Elena, mi nombre es, - Roxanne, es la primera de tres hermanas de la familia de mi madre la cual se apellida Thomson, Roxanne Thomson, la principal cabeza de la familia, la segunda es Esmeralda Thomson y la tercera Elena Thomson, mi madre, mientras distendía un abanico - valla la inteligencia de tu hijo me impresiona, Matías, - sabes a que he venido, claro, ha venido porque quiere que sea la cabeza de su familia, - si tienes razón, tu eres el que sigue en la lista, pero hay una condición de la cual hay que discutir, Matías se levantó de la mesa – no estoy de acuerdo, Roxanne hizo una pequeña risilla de burla hacia Matías, - pero si aún no digo cual es esa condición, - señorita, debo rechazar su oferta, la mujer miro desesperadamente a Christopher sintió como la mirada del niño la hacía sentir débil, - quizá, le hizo la vida imposible a mi madre, y talvez le guste fastidiar a mi padre, pero yo no seré ningún tonto señorita, - como es que sabes…- he leído las memorias de mi madre 14 cuadernos al menos 7 de ellos mencionando l demasiado mala, que una persona como usted puede ser, guardo su abanico - valla creí que ibas a ser diferente a ellos, pero resultaste igual de ingenuo, - ¿¡discúlpeme señorita!? pero no discutiré con una persona que malgasto su vida en el alcohol y en apostar todo su dinero, ella se quedó sin palabras, lo se señorita, al volverme la cabeza de su familia, sus deudas se convertirían en mías, y usted se estaría lavando las manos en mí, o es así señorita, Matías coloco su mano en su boca, y comenzó a reírse de Roxanne, - creíste que mi hijo aceptaría así por así, mi hijo solo será la cabeza de la familia Aweler, el corazón de Roxanne comenzó a latir súper rápido que lo único que escucho fue a Christopher decir - lo siento tía, pero no veo un futuro donde yo sea manipulado por ti como mi madre lo fue, la mujer tomo su bolso y salió rápido de la casa, azotando la puerta principal, mientras que Matías se reía como un niño pequeño, - deberías comportarte padre, esa mujer no se rendirá tan fácil, Matías se acercó a su hijo coloco su mano sobre el hombro de Christopher y lo miro directamente a los ojos, - eres como tu madre, estoy feliz hijo, hiciste lo que tu madre tardo años en hacer, - hice lo correcto, - exacto, y estoy muy orgulloso de ti, hoy es navidad pídeme lo que sea, yo lo are por ti te lo has ganado, - bueno me gustaría pedir una cosa, pero no sé si estaría bien, - no importa, dime lo que es y yo lo are, - quiero que nuestra familia y la de Carmen pasen navidad con nosotros, Matías quito rápido la mano del hombro de su hijo y la sonrisa desapareció de su rostro, - ¿estás seguro que eso quieres?, ¿ella te dijo que dijeras eso? – ¡que!... No, padre yo solo quiero conocer a la familia de Carmen, - pero… Christopher miro a su padre con tristeza, - está bien, Matías se dirigió a el jardín de la casa, Carmen se encontraba colgando las sabanas, - Carmen, - señor Matías, perdóneme por dejar entrar a esa señora su casa, - ya no importa Carmen, - entonces… ¿necesita algo?, - si yo, respiro profundo y miro hacia otro lado, solo prepara temprano la cena a las 5pm y puedes irte, -si señor Matías, el entro a la casa y Christopher emocionado pregunta,- que dijo Carmen padre, - ella, no tiene tiempo, - pero creí…- Christopher necesito que vengas con migo debo enseñarte algo, - si padre, subir y entrar al estudio de Matías, Christopher había entrado antes ya que allí mismo era biblioteca, pero, su padre saco una llave detrás de una foto de su madre y abrió una puerta que él había visto pero que no le prestaba importancia, y al abrirla, dentro solo había un piano, el cual estaba cubierto de polvo, Matías tomo un trapo y lo limpio un poco, Christopher se acercó y cuando toco el piano una mujer apareció delante de él, ella estaba sentada tocando una hermosa melodía, al acercarse mas, pudo notar que ella estaba embarazada y al mirar el rostro de la mujer, - mama, ¿mi madre tocaba para mí cuando estaba embazada? – lo hacía seguido, luego de que ella nos dejara, deje de tocarlo y lo guarde, pensé que si no lo miraba no podría tolerar saber que ella ya no estaría, pero… aun escucho el piano, - ¿Por qué decidiste mostrármelo? –creo que es hora de que tú lo toques, - no me apetece tocarlo, - ¡pero!, Christopher salió de aquella habitación, y un poco disgustado se fue a su cuarto, cerrando con un gran impulso la puerta, Carmen pudo escuchar el sonido de la puerta cerrándose, se acercó a ver, el señor Matías bajaba las escaleras paso a paso, - ¿sucede algo señor Matías?-nada que pueda interesarte negra estúpida, no te metas en esto y vuelve a tu trabajo, - lo siento señor, -dame la llaves del cuarto de Christopher, -sí señor, Carmen saco las llaves que siempre carga en su delantal, no son las originales son solo copias, al sacarlas Matías se las arrebato, subió al cuarto de su hijo, y al abrir la puerta encontró un niño llorando acostado en su cama abrazando una almohada, no importaba que Matías hiciera a Christopher superdotado, al final es un niño de 10 años que también tiene sentimientos, Matías cerró la puerta y recostó su frente contra ella – soy un mal padre, - no, no lo es, sin usted quizá el señorito Christopher jamás hubiera llegado a ser tan listo, - Carmen … solo siento que yo no hago feliz a mi hijo, -señor Matías, él lo es, Matías se dirigió a su oficina, y entro en aquella sucia habitación lo limpio, y lo saco a la sala, y allí lo miro, acaricio el piano, se sentó a querer tocarlo pero era como si no pudiera recordar ninguna canción, coloco sus manos sobre teclado y pudo apreciar una mano de mujer sobando su mano derecha y moviéndola, colocándola, sobre las teclas con las que debería comenzar, Matías cerro sus ojos y comenzó a tocar, pero no se detuvo allí, comenzó a tocar y mientras lo hacía una luz salía de su pecho todo se tornaba como un atardecer, en su mente comenzó a pasar una serie de imágenes de como conoció a su esposa, de cómo pasaron tiempo juntos, su primer beso, su boda, de sus peleas y al terminar de cuanto le gustaba su sonrisa, y de que tan suave era su piel, sentía a Elena tocar con él a su lado, aunque no pudiera verla él sabía que estaba allí, lo sentía en lo más profundo de su corazón, Elena es la luz de mi vida la que alumbra en la oscuridad y que me hace sentir el calor de más de mil chimeneas, y al terminar de tocar todo se quedo en silencio, Matías abrió los ojos y al mirar a su lado no estaba Elena como él pensaba, - papa lo siento, de los ojos de Matías comenzaron a caer lágrimas, aun no sé si de alegría, lo único que sé es que ama a su hijo, - no hijo yo lo siento, Matías abrazo a Christopher, - feliz navidad papa, - feliz navidad hijo, y así pasaron otra navidad juntos, unos días después sería el cumpleaños de Christopher.