- (Ríe)- los monstruos no existen-
"Si existen ... yo soy uno de ellos" piensa el pequeño angelito llamado "M".
- Si existen-
- Deberías ver caricaturas de princesas y no de monstruos-
- Las princesas son monstruos-
- (Sonríe)- ¿enserio?-
- Sí, las princesas, las muñecas, los ositos, los juguetes, los cuadros, algunos objetos y "ella" son monstruos-
- Tienes una gran imaginación-
- Hablo enserio-
- Cuando yo era pequeño decía lo mismo, pensaba que abajo de mi cama habían demonios- (ríe)-, pero nunca los ví-
- Yo si los v, la ví a "ella"-
- ¿Me vas a decir quién es "ella"?-(hace comillas con los dedos)-
- No-
-¿Por qué no?-
- Porque tú no la ves-
- Deberías ser psicóloga-
- ¿Por qué?-(pregunta inocente)-
- Eres buena en psicoterror-
- (Silencio)-
- ¿Enserio no tienes miedo?-(pregunta la nenita mirando a sus espaldas, Hueis no se da cuenta)-, ¿no sientes nada?-
- No hay nada a que temer-
- "Ella" te persigue-
Hueis evita sus ganas de mirar hacia atrás y un escalofrío causado por las palabras de la niña recorre sus brazos y piernas.
- Nadie me persigue-(dice vacilante, él nunca tiene miedo, aunque no sabe que lleva a la muerte sujeta de su mano)-
- Si lo hace, yo la puedo ver-
Otro escalofrío recorre el cuerpo de Hueis, él ama esa sensación, por eso su cuarto está lleno de películas e imágenes terroríficas, vaya que esa pequeña tiene potencial en el psicoterror.
- Ya llegamos- (el joven cambia el tema de conversación y la niña suspira)-
- Tu casa es bonita-
- Gracias-
- Pero "ella" esta aquí-
- Me caes bien, tienes gustos iguales a los mios-
Toca la puerta.
Unos pasos se escuchan dentro de la casa y la puerta se abre.
- ¡Hueis!-(la madre emocionada lo abraza y lo ayuda con la bolsa de pan)- ¿dónde carajo te habías metido?, me tenías preocupada ... ¿y ella?-(la madre de Hueis señala a la niñita con una clara expresión de confución)-
- Te explicaré adentro-
La madre abre paso, Hueis junto a la niña se adentran a la casa sentándose en uno de los muebles de la sala, los demás familiares se percatan de la situación acercándose para matar su curiosidad.
Esta familia no es muy grande ni muy pequeña: papá, mamá, dos hermanas hembras y dos varones, el mayor es Hueis y la menor es Liha, la cumpleañera.
- Ella es ... "M", estaba sola llorando en el centro, decidí traerla hoy y mañana buscar a sus padres o por lo menos a algún familiar-(explica Hueis con tono de aburrimiento)-
- ¿Cómo así?, Hueis, no puedes mirar a una niña llorando y simplemente traerla, eso nos podría causar problemas, de seguro sus padres la están buscando- (lo regaña el padre)-
- El centro estaba vacío y las tiendas estaban cerradas, no la iba a dejar ahí, sola-
-¿El centro estaba vacío?-(inquiere la hermana de Hueis, esta tiene 15 años y su nombre es Liscriel)-. Eso es raro-
- El señor James dijo que era por lo tarde, él también estaba cerrando-
- Pero ese centro está abierto toda la noche por las discotecas-(la madre aprieta las cejas extrañada)-
- Yo también me confundí, pero esa era la realidad, el centro estaba solo-
- Bien, supongo que ella dormirá aquí por hoy y mañana buscaremos a sus padres-(sentencia la madre)-. Preciosa ¿te perdiste cuando estabas en el centro?-(se dirige a la pequeña)-
Ella niega con la cabeza.
- ¿Me puedes contar lo que pasó?-
Ella vuelve a negar y la señora suspira.
- ¿Quieres pastel?-("M" asiente)- vamos a cantar cumpleaños-