Región Zerstörung
¡Comandante, hay nuevas noticias! - grita mi soldado llegando con las tropas
¿Que descubrieron? - dije dirigiéndome hacia el con mucha seriedad.
Créame, le va a gustar verlo en persona-responde mi soldado con una sonrisa llena de malicia.
Subo a mi caballo y empiezo a dirigirme hacia el Bosque de la Muerte, subiéndonos a una colina hasta llegar a lo más alto.
Tome y mire quienes están por los arbustos del este- dice entregándome los Binoculares.
Pude observar como la reina Mayida empezó a hacer su inspección y lo mejor de todo es que estaba sola, aun mejor, así la podríamos asesinar sin dejar testigos.
Ya saben que hacer – decrete sin dejar de ver en los binoculares, de inmediato veo como Mayida empieza a seguir a un hombre y no era nadie más que el Rey Antón de la Nación de la Paz, junto a él su esposa Ágata, al parecer se reunió la familia y no fui invitada.
Esperen, déjelos que se vallan- preceptúe con mucha seriedad, dejando los binoculares en la tierra.
Pero mi Señora- intenta decir mi soldado con mucho valor.
Pero nada, es que no lo ven, la familia se acaba de unir dejemos que se encariñen para después asesinar a cada uno, quiero que vean a sus seres más queridos muertos, quiero ver esa expresión en sus rostros para después ¡cortarles la cabeza! - explique sin dejar de reírme.
Podía sentir los rostros petrificados de mis soldados como si se tratara de ver a una psicópata y lo era….
Flashback:
Cuando era una niña no podía comprender muchas cosas, una de ellas era la empatía y la culpa, pero jamás los mostraba hasta ese día….
Miren a quien tenemos aquí, es la niña mimada- dijo sin parar de reírse, siempre me molestaba, pero lo único que hacía era evitarla, pero no podía dejar de pensar en ver su rostro mientras le cortaba sus dedos de su mano, quería ver ese rostro lleno de lágrimas y mis manos llenas de sangre implorándome piedad.
Sin más me empecé a retirar hasta que siento como agarra mi cabello y me tira hacia al piso dejándome raspones en mi pierna, me paro sin dejar de reírme.
¿De qué te ríes idiota? A ver si te ríes con esto- observo como intenta golpearme, pero este no llega ya que sin darme cuenta ya estaba encima de ella sin dejar de golpearla, podía ver su rostro lleno de sangre y lágrimas en su mejilla, me imploraba perdón a gritos, pero era el peor error que había hecho mi secreto es que me fascina que me imploren perdón, sentía mucho placer, hasta ya no poder sentir sus movimientos y sus gritos ahogantes.
<<Estaba muerta>>
¡¿Qué hiciste?!- escucho la voz mi padre a mis espaldas, podía ver su rostro lleno de miedo y pánico.
No podía dejar que me descubrieran, no lo permitiría, empiezo a sollozar, me dirijo hacia mi padre hasta abrazarlo.
Papá tenía miedo, no sabía que hacer me empezó a atacar, y-yo no quería- dije sin parar de sollozar y manteniendo abrazado.
Tranquila, nadie se va a enterrar de esto, vámonos, tu padre se encargará de todo- dijo sin más, largándonos de esa placentera escena.
Desde ese día sentí como mi alma se llenaba de oscuridad, pero me fascinaba….
A partir de esa escena me empezaron a llevar a la psiquiatra, pero no tuvieron ningún efecto en mí…
Fin del flashback
Empezamos a cabalgar hacia la Región Zerstörung, de inmediato bajo y me dirijo hacia mi habitación sin poder de dejar de preguntarme <<¿cómo reaccionara la Nación Warrior con mi visita?>>
Escucho portazos de mi puerta, era mi soldado al parecer se encontraba muy emocionado.
Pasa…- ordeno es un suspiro.
¡Comandante! Ha llegado, acepto la propuesta- anuncia mi soldado con brillo en sus ojos.
Muy bien, el día ya se acerca- dije sin más.
<<Prepárate hermanito, que tu muerte se acerca, y yo seré la que la engendra>>
Editado: 04.03.2021