Muerte Platina

Capítulo 38. Una luz tenue en la oscuridad.

En mi caso sabía que alguien de mi vida pasada era la responsable de que ahora me encontrara en esta situación, tenía curiosidad y quería averiguarlo, pero también me preguntaba si podría llegar a ser una historia  de la cual me arrepienta conocer. Me quede callada y me solte de Victor, estaba junto a la luz por lo que crei que estaria bien, ademas estabamos encerrados juntos por lo que tambien pense que estaria bien, me acerque a la pequeña ventana, estire las manos hacia arriba para agarrar  los barrotes y luego me impulse hacia arriba mientras usaba mis pies para equilibrarme contra la pared, en cuanto me estabilice, mire por la ventana y para mi sorpresa podía ver cosas a través de esta, podía ver lo que estaba sucediendo fuera, o al menos un poco ya que la ventana no era lo suficientemente grande.

Podía ver que estábamos en una especie de torre, veía el vacío a través de la ventana, tambien veia la ceniza seguir cayendo del cielo sin más reparo, mire más allá y tan pequeño como el muñeco de una maqueta, pude ver el barco de madera, seguía intacto, pero eso no era todo, junto  al barco podía ver demonios, apenas reconocibles, pero sabía que eran ellos, estaban alrededor del barco de madera, era la primera vez que los veía desde que habíamos entrado a la isla, no se por que  hasta ahora aparecían, pero no podría ser por algo bueno; eso era todo lo que podía ver, era algo bastante frustrante, ellos seguían jugando con nosotros y nosotros seguimos cayendo en sus malditos juegos. Suspire y me solté de la ventana para acercarme de nuevo a Victor, el se me quedó mirando un poco extraño, solo me encogí de hombros y me senté junto a él, aun seguía con la capa puesta, estaba torcida así que la acomode, mire hacia la ventana en busca de un cielo, pero en este lugar no había, solo ceniza.

-Deberías dormir un poco.-Los ojos aún oscuros y hundidos me indican que su energía realmente estaba al borde del colapso, estos seres aunque no lo necesitaban, sufren cuando una necesidad como el sueño o el hambre los azotaba.

-¿Tienes hambre?-Hable de nuevo, pero no obtuve respuesta, luego de unos segundos  él sacudió la cabeza y se acomodo usando mi regazo como almohada, como un perro grande, no sabia cuanto tiempo había transcurrido desde que ingresamos en la isla, el tiempo en estos lugares siempre parecía diferente, en especial este que parecía cambiar acorde a cómo los demonios quisieran, por lo que era difícil medir el tiempo, la puerta parecía el único lugar por el cual podríamos escapar, por lo que me sentí un poco frustrada nuevamente. Necesitaba la fuerza de la parca que está conmigo, por lo que también necesitaba que durmiera un poco, eso lo ayudaría a recuperarse más rápido, si dormía un poco los círculos alrededor de sus ojos podrían mejorar e incluso desaparecer, mi collar se sentía cálido en mi pecho, Victor no tardó mucho en conciliar el sueño, pronto sentí que su cuerpo se relajaba y dejaba de estar conciente del lugar en el que estaba.

Espie un poco a Victor mientras dormía, no me atreví a moverme por miedo a despertarlo, pero podía ver sus rasgos de esta manera, pestañas y cejas perfectamente dibujadas tan oscuras como el carbón, piel pálida que combinaba con lo que era y como lucía, era como si nunca hubiese estado expuesto al sol, no como en las historias de los vampiros, pero definitivamente era alguien pálido, pero qué sabía yo, Dereck también era algo pálido, más bien era una característica de las parcas, tal vez. Habían dias, cuando mi trabajo se tornaba pesado en los de que lo único que deseaba era llegar y tomar una siesta, hoy era un dia como esos, pero ahora no podia tener ningun tipo de alivio en nada, en vez de eso despeje mi cabeza de todo tipo de pensamiento negativo y deje que el silencio me arrullara,  no estaba tranquila, pero mi cabeza estaba más ordenada, solo me quede mirando a la ventana como si estuviera hipnotizada, pensé en las pistas que estaban en la mesa, pero no había ningún tipo de relación con la situación ahora.

Tampoco era seguro que las pistas dejadas en la cabaña  hayan sido dejadas con buenas intenciones, mucho menos cuando estas fueron dejadas en un mundo creado por demonios, que intenciones tendrían al dejar el tallado o la frase, nada de lo que entra a este mundo estaba vivo, por lo que esto solo hizo que mis sospechas aumentaron aún más, mi vida se había acabado y ahora mi  muerte había tomado un extraño giro de eventos, por lo que no podía confiar en nada más. Recordé el momento de nuestra muerte, todo era normal excepto que la lluvia era un poco fuerte, también en  ese punto estábamos cerca de llegar a casa, también habíamos revisado el auto e incluso habíamos descansado la noche anterior para poder emprender camino con seguridad, incluso todos contábamos con cinturón de seguridad, entonces ¿Que paso?, aún poseía uno de los sobres, el de Lily, lo saque del interior de mi ropa y lo revise, pero no encontré nada nuevo, excepto que la paloma se había movido ligeramente, asi que volvi a meter el sobre en mi camisa.

Sabía que mis amigos eran de asignación especial, pero ¿Por qué?, también, ¿Qué más pudo pasar en medio del accidente?, no podía recordar nada más desde el momento en que escuche el grito  de Lily, ese es  mi último recuerdo, sacudí la cabeza para intentar obtener un recuerdo o una pista más, tratar de recordar algo antes de despertarme y darme cuenta que todos estábamos muertos, entonces pensé en algo, lo había pasado desapercibido, pero cuando fuimos a la escena del accidente en la ocasión en la que necesitaba enlazarme a ellos por primera vez, recuerdo que por un leve momento mire la calle y la barda rota por la que habiamos caido, pero algo era extraño, definitivamente recuerdo que la principal razón por la que ocurrió el accidente fue debido al rayo, un rayo golpeó la carretera e hizo que todos perdieran el control de los  vehículos, lo que al  final también tuvo como resultado que cayéramos.




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