CAPÍTULO 6:UN MUNDO DESDÉ EL AIRE

Retomaron el camino y bajo un sol abrasador, caminaron en silencio sin decirse nada la una a la otra provocando un momento que a Noelia la la iba incomodando cada vez más.
Esta trató en varias ocasiones de entablar algún tipo de conversación con la hada, pero esta la ignoraba o simplemente la respondía con monosílabos.

Las horas fueron pasando cuando en la distancia observaron un camino que se dividía en dos direcciones. La hADA se detuvo se sentó delante de los dos caminos.

—¿Por qué nos detenemos?—preguntó Noelia.

—Necesito descansar. Ya he volado durante bastante tiempo y necesito hacer un pequeño descanso— respondió.

Noelia estiró su mano y justo cuando fue a coger al pequeño ser esta se apartó..
Noelia la insistió pero esta seguía negándose a que esta la agarrase.

—Si me dejas que te ayude podemos continuar el camino y tú descansar—

— No quiero que me vuelvas a desobedecer ni que ignores las cosas contra las digo. Solo te pido ese favor de que me hagas caso. Si queremos continuar este viaje tenemos que confiar la una en la otra y apoyarnos y si digo que no hagas algo por favor no lo hagas—

La hada se posó en el hombro de Noelia y la indicó el camino a seguir. Según se iban acercando unos árboles de gran tamaño, comenzaron a aparecer, teniendo que esquivar . Era la primera vez que en mitad del camino Noelia se encontraba árboles de esa altura ya que normalmente los había visto en el bosque.

—Qué raro que haya un bosque en mitad del camino. Desde que estoy aquí es la primera vez que lo veo—dijo Noelia sorprendida.

La hada continuó mirando en todas direcciones también sorprendida. Los árboles tienen una altura cuya vista no podían ver ni siquiera la parte más alta ya que las hojas enormes impedían su visión hacia arriba.
Según fueron pasando los minutos y seguían adentrándose en ese bosque en mitad del camino empezaron a escuchar voces y ruido por encima de sus cabezas algo que inquieto a Noelia hasta el punto de hacerla temblar.

—No me gusta ese sonido. Quiero irme de aquí—dijo Noelia muy muy asustada.

La hada trató de tranquilizarla.

—Sea lo que sea no es malo porque estamos en el camino y esto es territorio de la reina. Creo que nos estamos acercando a otro mundo—

Justo en ese instante una puerta enorme les cortó el paso definitivamente. El camino se desviaba por un lateral para continuar hacia adelante sin embargo ellas optaron por seguir de frente hasta la puerta de grandes dimensiones cuyo cartel se podía leer" Blacky coast"..

Nada más entrar un rinoceronte de gran tamaño les recibió.

—Bienvenidos a nuestro mundo.¿ En que os podemos ayudar?—

La hada respondió con rapidez.

—Estamos cansados y necesitamos descansar—

El animal les pidió que les acompañara y así caminaron junto a él hasta que llegaron a una explanada donde había un círculo enorme en el centro. Mientras caminaban Noelia no deja de mirar hacia arriba escuchando el incesante movimiento que había por encima de sus cabezas. En ese instante el animal se detuvo.

—C uando quieras puedes subir arriba por alguna de las escaleras que hay vive con tus propios ojos lo que hay arriba. Verás en este mundo hay animales que se desplazan entre los árboles a gran velocidad . Como verás este lugar está lleno de árboles con pequeñas cabañas hechas entre las ramas que es donde duermen algunos animales .Una manera de divertirse en este lugar e incluso verás más adelante que hay toboganes, incluso un lago donde a muchos animales les gusta bañarse—

El rinoceronte hizo una pequeña pausa y señaló al círculo enorme que había más adelante.

—Hay muchos animales que no pueden moverse por arriba , por lo que la otra mitad de animales vive en tierra dentro de ese agujero enorme que ves ahí. Es un agujero cuyo fondo es infinito y donde viven la otra gran mayoría de los animales—

Noelia rápidamente se subió a uno de las escaleras y puedo contemplar como a diferentes alturas felinos, primates y aves, se movían muy rápido en pequeños circuitos hechos por ellos mismos con indicaciones. También arriba descubrió lo cómodo que eran las cabañas, y lo resistentes que eran. Eran cabañas donde muchos animales dormían y que también se usaban para que entre tanto movimiento de árboles podrían descansar.
Aprovechando la fuerza de las ramas habían conseguido con la ayuda de las hojas de varios metros de los árboles, crear pequeñas zonas muy cómodas y con espacio suficiente para descansar. Desde arriba puedo contemplar la inmensidad del mundo mágico, momento que la hada quiso compartir con ella.

—No me había fijado que este mundo era tan grande. La verdad es que en mi vista no alcanza a ver el final. Mientras estaba arriba La hada vio algo que la llamó la atención. Un pequeño zorro, correteaba por la zona jugando con otros animales . La hada descendió a toda velocidad, hasta llegar al pequeño animal al que abrazó y besuqueó por toda la cabeza.

—ooo amigo . Qué preocupada me tenías. No vuelvas a irte de mi lado por favor. Te he echado mucho de menos— decía entré lágrimas.

Noelia descendió y corrió a acariciar al pequeño zorro. Una peculiaridad era que este animal era el único que no hablaba lo cual la sorprendió .
El animal estaba eufórico feliz de encontrarse a su amiga, y de conocer a Noelia a la que saludó dándole pequeños golpes con la cabeza para que no dejara de acariciarla.

—Celsius es un zorro muy muy cariñoso. Nos conocemos desde hace bastante tiempo y es mi compañero de viaje mientras voy recorriendo el mundo mágico y todos sus rincones—

Noelia aprovechó que la hada jugaba con su amigo para descender al agujero y contemplar cómo vivían los animales ahí abajo y la realidad era que era un lugar que tenía todo.
Descendió una pequeña rampa agrándose a los laterales y comprobó como había pequeñas zonas de descanso iguales a las que había en la parte de arriba. En el centro una barandilla te metían ver ver el agujero cuyo fondo no se veía.
Fue descendiendo varias plantas hasta que se percató de que había muchísimas y la pereza la hicieron detenerse antes de seguir.