— ¡Basta! Quieres parar de comportarte como un niña malcriada, menuda infantil -dijo entre dientes- lloriqueando por personas que ni siquiera son tu familia, cuando tú verdadera familia está ahí afuera peleando una lucha que tú comenzaste, estoy harto de estar cuidándote el trasero mientras te escondes -dió un fuerte golpe en la mesa donde nos encontrábamos- ¡Maldición Elis tienes que parar! No quiero verte así. -dio una paso hacia mi.
–por un momento me hubiera creído toda esa mentira y estuviera corriendo hacia sus cálidos brazos para que yo de verdad me dolió malcriada Dios donde encontramos familia cuando yo hacía en aquel suelo sola y herida dónde estabas tú joder esta situación está agotando. Y si yo te quiero como una niña estúpida es muy puto problema. -en otra situación habría detenido pidiendo disculpas por lo que dije pero había llegado muy lejos – y sabes que tú haces Yo más capaz de darme la vida nomás traído más que problemas desde que te conocí -gruñí, lo quité el camino con un empujón me puse a espaldas a él me desesperé Cómo se llama meter al aire- estoy harta de que siempre estés a mi sombra salvandome el trasero ¿y qué? cuando de verdad te necesitaba dónde estabas hoy vivir así Y aunque no había nada interesante y tenía esas personas en mi vida Te juro que.. -hice sonar mi nariz me volví y acerque- a él- hubiera preferido quedarme con mi vida extremadamente aburrido estar en medio de esta situación de mierda.
cuando me disponía a marcharme porque había dejado todo claro me tomó por el brazo.
– ¡Bien! eso quieres pues quédate con tu absurda vida de mentira siento arruinar eso -sus ojos se encontraron con los míos llenos de rabia y los de él que no sé algo que no conocía pero tampoco podía descifrar- creer que ellos volverán a vivir y morir de dolor aquí escondida no te hace más fuerte es hacerle frente a esta situación y dejar de ser de verdad pensé que eras más inteligente.
–que estaba diciéndome no me lo podía creer- ¡Bien! ya está satisfecho arruinastes mi vida no te necesito comprende ¡Lárgate ya! -grité tan fuerte como quería.
-soltó su agarre- Esperaba alguna respuesta dulce de su parte pero eso no sucedió, por mi rostro se cruzó la decepción reprimí ese crudo sentimiento y mantuve mi expresión dura mientras se marchaba.
Luego de eso vi cuan estúpida me veia allí de pie en el centro de aquella sala estar fría..
los días siguientes a ese él se desvaneció no volvió a la casa nunca pensé que te tomaría tan en serio eso de dejarme en paz pero así fue..
Las horas, los días, las semanas serían más largas más frías y oscuras empezaba a pistearme el estar en ese lugar sentía que les pase a mi alrededor se hacía más pequeño mis días no eran más que dormir y llorar Ya que ni reconocía mi reflejo en el espejo Me acercaba a él y no había más que los recibe una chica que aparentaba ser fuerte y que ahora estaba hecha añicos mi cabello estaba asqueroso había perdido su brillo mis ojos con grandes sombras negras a su alrededor mis labios palidos al igual que mi rostro en ese momento exacto donde pensaba que no podía más que estaba harta y necesitaba un descanso por ese momento donde me di cuenta de lo mucho que habia cambiado Pues ahora sólo pensaba en escapar de todo cuando antes trataba de hallar una solución pero ¿solución a qué? A la miserable vida de mierda que estaba llevando mis lágrimas salían sin control me aleje del espejo y fui directo a la cama en segundos me quedé rendida como de costumbre.
🖤🖤🖤
– ¡Riley!
– !Mamá! ¿¡Dónde estás!?
– Cariño, estoy aquí yo siempre estaré a tu lado.
Siento un suave roce en mi mejilla.
–Mami, porque no puedo verte -empiezo a sollozar.
– No lo sé -suspiró
– ¿Como puedes estar aquí?
– No hay tiempo mi Riley, necesito que confíes en mí en mi.. - no me podía mover y mucho menos verla, no sabía que estaba pasandome, era la extraña primera vez que me sucedia- Tienes que ser fuerte, no puedes quedarte aquí, nosotros estamos bien y creemos en ti..
– ¿Porque me está diciendo todo eso?
- Riley, ¡tienes que despertar ahora!
- ¿Por qué? No quiero, quiero quedarme contigo, no puedo más me estoy agotando y ya no me queda nadie..
- Riley puedes salir de aquí, esto no está bien tu misma estás logrando que te maten y por lo tanto me matarás a mi nuevamente -aquello, me hizo caer en cuenta que, solo era imagicion mía.
- Pero ma.. no.. no puedo seguir sola
- Sabes muy bien que no estás sola mi niña -la voz de mi madre comienza a sentirse muy lejana a mi- Jacob te adoro, el jamás te dejaría y lo sabes solo tienes que ser valiente para aceptar todo lo que el tiene por darte..
- ¡¡Noo!! No quiero hacerle daño, toda las personas a las que quiero terminan heridas o aún peor.
– Es.. eso no sucederá.. lo.. pro.. prometo.
- ¡Madre! ¿A dónde vas? Mamá te necesito aquí,
Bastaron unos segundos de silencio para aceptar que se había ido.
–Debes luchar -escuche en susuro.
- ¡Riley debes despertar! -el sonido autoritario de si voz me sobresalto pero al fin logré despertar..
La primero que sentí fue algo pesado en cada una de mis manos pero lo que veian mis ojos era mucho peor.