My Destiny

Capítulo 4

 

Tyler

Ya me encuentro al frente del departamento de Zed (el cual supe cuál era gracias a José, el portero), pensar en que pasare la tarde con él solo me hace recordar lo raro que fue la mañana, la forma en que se miraron Zed y Trevor me hace pensar en que ocultan un pasado, algo más que una amistad.

Cuando trate de preguntarle a Trevor solo me dijo ¨hay cosas que no te he contado y son malas, pero cambie, ya no soy la misma persona que Zed conoció¨. Lo que me dejo peor, la intriga me da curiosidad.

Pero no voy a preguntar, él sabrá cuando estará listo para contarme y como su amigo voy a estar junto a él.

Toco la puerta, después de unos segundo Zed me hable la puerta.

—Pasa —cuando estoy adentro veo que su departamento es casi igual al mío, con la gran diferencia de que aquí todo esta ordenado—. Creí que ya no vendrías—sé que me demore mucho, pero Tany me necesitaba.

—El tráfico—miento.

—¿Qué libro vamos a elegir?— pregunta.

—Yo no sé nada de libros, nunca fui fanático de la lectura. La verdad es que no sé, digamos que no es lo mío—contesto lo miro y él hace una expresión de que me comprende.

—Entonces elegiremos uno que me guste a mí—comienza a caminar por el pequeño pasillo que lleva a las habitaciones (en serio que igual al mío) se voltea a mirarme—que esperas.

Lo sigo y él abre la puerta de un cuarto, cuando entro para ver qué es lo que quiere que vea me doy cuenta de que es una habitación 4x4 y lo que me sorprende es que las cuatro paredes están llenas de libros; es como una mini biblioteca y en centro de ella hay una mesa con una silla, es algo increíble por qué él no parece que fuera amante de libros y si comparamos con su personalidad por lo poco que he compartido con él no encaja.

—Te sorprende que tenga muchos—habla sacándome de mis pensamientos.

—No, es solo que por tu personalidad… no pensé…—lo miro. Él me está analizando, escuchándome tan concentrado con el ceño fruncido qué pensaría que está enojado— pero me sorprendes, tendremos que conocernos más.

—Sí conocernos—dice en un susurro que casi no logre escuchar—pero bueno elijamos uno—pasa rosando mi mano lo que hace que se me erice la miel y sé que él también lo sintió porque se paralizo por unos segundos, pero camino hasta llegar a una esquina rápido.

—¿Qué genero elegiremos?—pregunto para quitar la tensión que se está comenzando a sentir solo por un rose que ha puesto los pelos de punta.

—No sé—contesta mirando los libros—que te parece misterio, terror o….

—Romance—salen las palabras de mi boca sin pensarlas. Me mira a los ojos, con un azul en su mirada que hace que el palpitar de mi pecho aumente. Joder, no sé qué diablos me pasa, jamás me ha ocurrido esto con solo la mirada de una persona.

—Es un género muy interesante y mi favorito—comenta.

—También me parece interesante, representa el sentimiento más fuerte que hay—le digo.

—El amor—contesta. No despega la mirada de mí en ningún segundo y una mitad de mi desea que lo haga pero la otra no, lo que da miedo porque no es normal— pero también es el sentimiento que puede destruirte poco a poco, hasta que sientas que ya no puedes más y mientras más lo sientas, más pide que des todo de ti. Envolviéndote por completo hasta que ya no hay salida.

Cada palabra ha llegado a lo más profundo de mi ser y deseo saber por qué llego a esa conclusión. 

—Bueno muy interesante tu punto. Pero yo creo que el amor es la salvación en muchas ocasiones, contar con alguien que sea capaz de hundirse contigo, que arriesgue todo solo por un minuto junto a ti, que se envuelva contigo en las cadenas del sentimiento, que tú seas su vida y esa persona la tuya. Es algo que no todos llegamos a conocer por completo, pero daríamos todo por tener un poco de ella.

Solo nos miramos en silencios, él en una esquina y yo en otra. Tratando de entendernos, jamás he hablado tan abiertamente de algo y menos de sentimientos, sé que sus palabras causaron algo en mí y noto en sus ojos que las mías también abrieron algo en él.

—Bueno que tal si comenzamos con el trabajo— se voltea a agarrar un libro y se sienta en la silla.

Me acerco a la mesa y lo miro abrir el libro, tiene unas pestañas largas y un rostro perfecto, su color de piel es muy claro y sus labios son carnosos con un color rojizo. Sé que él causa algo en mí; algo me hace querer saber todo de él, conocerlo y también sé que parece raro pero yo no soy de quedarme con dudas. 
Tengo miedo de saber que es los que causan esos ojos azules en mí, pero es lo que más me llama la atención.

—El sábado por la mañana los chicos y yo iremos a las cabañas como todos los años y si deseas puedes ir con nosotros—le dijo. Las cabañas están en el bosque son propiedad de mi padre, también cerca de ellas vive mi abuela; es un lugar muy bonito. Él levanta la vista del libro—vendremos hasta el lunes por la tarde, nos saltaremos las clases.

—¿Ira Zara?—pregunta, no sé qué diablos me pasa por que la pregunta me ha molestado un poco.

—Sí, todos iremos.

—Bueno, si voy— contesta bajando la vista al libro.

Y si Zara no fuera ¿Él no iría?, no pensaba que a él le había gustado, ella es guapa pero no creí…. y desde ahí se comenzaron a formar mil preguntas en mi cabeza.; causan algo en mí, pero las ignoro y me dedico al trabajo. 
 



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En el texto hay: amistad, miedos, amor lgbt

Editado: 15.10.2021

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