My Destiny

Epílogo

 

Tyler

Años después…

 

—¡Ahh! Es hermoso—veo como aparece frente a mí, Mari; llega puesto un vestido con mucha pedrería de color rosado—Tío ¿verdad que esta hermoso el vestido que me hizo me tía?

—Es lindo, pero más vale que tengan cuidado con los chicos  en la fiesta —le recuerdo.

—Tío, solo es la graduación. Los chicos no importan, lo que importa es que cantare—dice mientras da vueltas con el vestido. Se crecieron tan rápidos, ya se irán a la universidad.

—Lo importante será que muchas chicas se deleitaran mirándome, querrás decir hermanita—habla, Gustavo, viene modelando un traje de color plata, llamativo; perfecto para él.

—Los dos se verán muy bien, pero recuerden que faltan unas semanas y su madre me dejo a cargo mientras salía de viaje, así que si se portan mal, no irán—molesto un poco.

—¡Tío! —gritan los dos y comienzan a renegar.

 

—Claro que si irán, no por nada hice los magníficos trajes—dice Tany, siempre robándome autoridad. Se sienta junto a mí, aún recuerdo esos meses difíciles; nos tratamos de arreglar pero al principio no pudimos, ella se fue a finales de año y me alegro que cumpliera sus sueños. Ahora vive en Francia y tiene una pequeña boutique con todos sus diseños, le ha ido muy bien y cuando regreso reconstruimos nuestra amistad.

—No los consientas mucho, parecen ángeles, pero son unos demonios—todas esas noches que se escaparon para ir a fiestas lo confirma, iguales que su madre.

 

—Es que me es difícil, los extrañaba…ahora que recuerdo les traje regalos, están en el carro, chicos vallan y así me dejan un rato con su tío—los dos asienten y rápidamente desaparecen.

 

—¿Cómo estuvo el viaje? —le pregunto.

—Agotador, pero siempre me hace feliz visitarlos. Cuéntame cómo va todo.

—El trabajo bien—ser doctor es demandante, pero amo mi trabajo—. Zara y Roma se comprometieron—lo que paso entre ella nadie se lo espero, al principio no se llevaban bien, hubo mucho drama en todo lo que tenían, pero al final se enamoraron y se casan muy pronto.

—¡Que emoción! Me alegro por ella, las iré a visitar más tarde—sonrió.

—Sí. Clary, bueno, ella termino con su pareja, pero se ha ocupado con los arreglos para la boda. Mar vino hace unas semanas, esta tramitando papeles, quiere adoptar un bebe con su pareja.

—Como ha pasado el tiempo, ya todos somos treintañeros, pronto seremos viejitos tomando café—comenta con emoción—¿ y que me dices de la chica con la que tuviste aquella cita? Comentaste que te gustaba.

—Sí, pero las cosas no avanzaron ¿y tú?

—Ahorita estoy más concentrada en mis diseños que en buscar pareja, pero hay alguien…

—¿Te gusta? —pregunto.

—¿Qué?¡No! el solo molesta, jode  y cree siempre tener la razón, ni que fuera el mejor, su jodida sonrisa piensa que me vencerá.

—Creo que ya lo hizo…—me empuja—solo decía.

—¿Qué me dices de Zed? —tengo semanas sin hablar con él.

—La última vez que llamo dijo que estaba escribiendo una nueva historia y ya sabes que cuando lo hace desaparece. Tiene pareja y que su madre estaba un poco enferma.

—Espero y ya esté mejor. Voy a ver que hacen los chicos, están demorando—dice antes de levantar y salir. También me levanto y camino hacia mi cuarto, busco en unos de mi cajones de ropa y saco la pequeña caja.

Recuerdo el día que la recibí, fue hace cinco años y me sorprendió quien la enviaba, Zed. Desde el día que se fue no nos habíamos comunicado y recibir algo de el después de años…no lo esperaba. Había una carta dentro, en donde me contaba todo lo de su vida, sentimientos y la razón por la cual no se había atrevido a hablarme; estaba emaciado y cuando vi el libro quede perdido. Un libro titulado My destiny escribió toda su vida, pensamientos, miedos, dolor, tristeza, amistades, amor…todo el plasmado en un libro. La primera página con una mensaje para las personas que dejaron de huir y una dedicatoria para el chico de los ojos turquesas. La carta decía que era para que lo conociera mejor y no hay mejor manera de conocer una historia que leyendo un libro. Por semanas no me atreví a pasar de la primera hoja, saber más de él era como volver a desear que estuviera junto a mí y pensar que creía que ya lo había olvidado. Un tuve el valor y lo hice, en parte solo me quedaba analizando sus palabras y en otras solo no sabía que pensar…su libro era estupendo y triste.

Lo llame, nos quedamos callados por minutos y el me invito al lanzamiento de su libro, me dijo la fecha, hora, lugar y sin dejarme decir algo colgó. Pensé en no ir, Tany me convenció y aunque fue incomodo al principio nos volvimos amigos, no unidos, pero amigos. Llegue a pensar que podríamos intentar algo, pero eso no paso, los dos seguimos nuestras vidas.

Mi trabajo me llena, ya no hay crisis, pero sigo visitando a Nathalia. Mi padre murió el año pasado, que pesar que nunca cambio, solo deseo que allá encontrado la paz; nos dejó todo su dinero, la mansión y de más propiedades. Creo que fue su manera de pedir perdón, vendimos casi todo, pero no podíamos perder la mansión, ese era el hogar de mi madre; la mayor cantidad de dinero fue destino a distintas fundaciones, era mejor.

Hemos tenidos altas y bajas, pero creo que todo ha valido la pena y soy feliz.

Siempre seguiré guardando un poco de esperanza con, Zed. Aunque sé que es feliz.

Tal vez llegue alguien para mí.

Dejare que mi destino siga escribiéndose.



#24057 en Novela romántica
#5262 en Joven Adulto

En el texto hay: amistad, miedos, amor lgbt

Editado: 15.10.2021

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.