Lina.
¿Alguna vez han tenido un encuentro que los deja con una sensación de adrenalina? ¿Conocer a alguien con tanto impacto, tanta presencia, que llega a ser intimidante si no estás preparado? A mí me pasó, y aunque fue un modo extraño en el que ocurrió, fue gratificantemente emocionante, lo suficiente para que ignorará el hecho, de que mi suéter favorito fue destruido.
Primero, debo agradecer a Kyun Ryu la tortura de casi cuatro años para enseñarnos coreano a Jhoath y a mí, porque eso me ayudo a comunicarme mejor con ese chico.
Segundo, no creí agradecerle a la fuerza que hizo que mi suéter se atorará de ese modo, y aunque al principio me hizo enojar, fue ese accidente lo que me llevó a ese momento.
Tercero y último, gracias a la fuerza cósmica que llevó a Kim SeokJin a salvarme, me ayudó a llegar a tiempo a clase, y por supuesto, eso es importante, ya que tengo la mala costumbre de llegar tarde a casi cualquier lado.
Sí, terminé con un suéter roto, la dignidad dolida por el patético momento y mal sabor de boca, al irme y no agradecer correctamente, pero afortunadamente, pude obtener su número telefónico. Ahora que salí de clases y espero que mi hermana salga de la escuela, reflexionó ante el momento regalado por la vida, destino o lo que sea.
Algo que noté desde un principio, es que Jin tiene un aura atrayente, seria y poderosa, llama la atención, y eso es peligroso, mas, porque él es consciente de ese poder, y no parece dudar en usarlo a su favor, no sé si de un buen o mal modo, pero esa seguridad puede llegar a intimidar, claro, si fuera alguna especie de chica con carácter débil.
Mirándolo de cerca, observe unos ojos oscuros bastante llamativos, una piel clara y perfecta, sin ninguna clase de imperfección, rasgos finos y varoniles, labios carnosos y sensuales. Generalizando es muy atractivo, lo suficiente para intentar calificarlo en la palabra “perfecto”. Digo intentar, porque no conozco su carácter, que puede llegar a ser un asco, así que eso podría restarle puntos.
Suspiré un poco, no por el hecho de que su recuerdo cause algún efecto en mí, sino, porque espero que las expectativas que tengo sobre él, no se desmoronen. Espero que sea un chico educado y lo suficientemente amable para no tacharlo de un patán, eso sería una tristeza, porque un buen físico no debería ser desperdiciado en una mala actitud.
¿Me fijo mucho del físico? Por supuesto, es lo primero que te vende una persona, y si, suena como que sólo me dejó llevar por eso, pero tranquilos, tengo la suficiente paciencia para conocer su actitud, después de todo, no todo es una cara bonita, aunque hay que admitirlo, es lo primero que una persona ve, quieras o no.
–¡Lina! –me llamó Jhoath, haciendo que mirará el cómo corría hacia mí.
–Hola, niña nerd –salude, levantándome de la banca donde me había sentado.
–¿Qué haces aquí? Pensé que papá iba a recogerme.
–Tuvo una reunión de emergencia, me pidió que te recogiera.
–Ah, bueno, no hay problema.
–¿Todo bien en tu primer día? –pregunté con interés.
–Pues sí, lo típico: Los maestros me aman, los alumnos me odian. Nada cambia este año.
–Oh, ya veo –murmuré decepcionada.
Odio este círculo que se ha formado al pasó de los años. Jhoath es uy inteligente, un genio, pero eso hace que los demás sólo la cataloguen como una nerd, no pensando en los sentimientos que pueda tener, al ser tratada sólo de ese modo. Ha recibido insultos, pero sabe cómo defenderse, papá se tomó en serio eso de que nos sepamos defender de todo y todos, siempre y cuando, sea para protegerte y proteger a otros.
Al principio, Jhoath no entendía porque la gente se alejaba de ella, incluso, llegó a llorar por eso, pero esas veces, papá, mamá y yo la reconfortamos y explicamos todo. Como había ocasiones en que coincidíamos en las clases extracurriculares (porque llegaba a aburrirse de las normales), yo la defendía de todos, y no por obligación, es porque amo a mi hermana y ella no tiene la culpa de que la gente sea idiota y no sepa valorarla.
Ahora, parece que la situación ya no le duele, pero me desquicia que este año nada sea diferente, que vuelva a estar sola y tenga que soportar a esos estúpidos, pero sé que ella es lo suficientemente fuerte para ignorarlos.
–Oye, ¿qué le pasó a tu suéter? –preguntó, señalando el feo hoyo que se hizo, riéndome un poco.
–Esa es una historia muy graciosa.
–Uh, quiero escucharla –pidió emocionada.
Comenzamos a caminar a casa, contándole con lujo de detalle, lo que me pasó con Jin. Jhoath no es sólo mi hermana, es mi mejor amiga, porque aun cuando es un súper genio, tiene un gran tacto y sensibilidad, lo que la hacen una gran consejera. Adoró compartir este tipo de relatos con ella, porque aun cuando existe una diferencia de edad, ella me comprende y aconseja muy bien.
Jhoath se emociona con mi relato, pues sus expresiones son tan transparentes, que me tienen riendo, hasta que entramos a casa.
–Wow, eso suena como la escena de una película de romance –terminó de decir, quitándose la bufanda.
–Esto no es una película, es la vida real.