Capítulo 1

Estoy sentada en el filo de mi cama sin saber que ponerme, hemos vuelto de vacaciones, se supone que debo regresar a la escuela con un nuevo estilo, o quizás solo un pequeño cambio en mi forma de vestir.

—¡Annia, cariño, tu desayuno está listo! —grita mamá una vez más para que baje a desayunar junto a ellos.

Me miro nuevamente al espejo y solo pongo un poco de color rosa a mis labios, un pequeño toque de rubor muy suave a mis mejillas y bajo a desayunar con mi hermosa familia.

Somos: mamá, papá, Luke; mi bello hermano y yo, una familia pequeña.

—¡Buen día familia! —saludo con una sonrisa.

—¿Cómo está la chica más bella del planeta? —me pregunta papá extendiéndome sus brazos.

—Muy bien, espero llegar a la escuela con buen semblante —respondo regalándole una sonrisa.

—Pues lo harás solo si consigues llegar a tiempo —dice Luke.

—Luke, deja que Annia desayune tranquila —le regaña mamá.

Y yo cual inmadura le hago un mohín, al que él responde de forma muy graciosa.

Amo a mi hermano porque siempre está para mí, con sus tonterías y burlas, pero siempre lo está.

Al llegar, Luke estaciona el auto en el aparcamiento.

Él luce muy bien, con el cabello peinado, una camiseta que resalta sus brazos y esa sonrisa que derrite a media escuela.

—¡Annia, al fin llegaste, pensé que este año no te vería, amiga! —grita Sophy, mi mejor amiga.

—Deberías dejar de exagerar un poco —le respondo en medio de un abrazo.

—Sophy, este año estás más hermosa que nunca, debo empezar a considerarte… —dice Luke, a mi mejor amiga con una media sonrisa, logrando que ella se sonrojara inmediatamente.

—Pues no creo que debas considerarme, no soy un objeto, Luke —le responde dejando a un lado su timidez.

Sophy siempre creyó que mi hermano era un mujeriego y no la culpo, yo sé muy bien que ella siempre estuvo enamorada de él, pero Luke, bueno Luke jamás se fijó en ella. Hasta ahora que la encontró tremendamente guapa. Sabía que sus vacaciones en las Vegas la traerían algo cambiada.

—Hermanita, te deseo suerte hoy, pórtate bien —dice dándome un sonoro beso en la mejilla.

Se acerca a Sophy y le dice algo al oído que no alcanzo a escuchar, pero por la expresión de ella sé que es algo pícaro.

—Pero, ¿qué te ha dicho Luke que te ha dejado así? —le pregunto.

—Me dijo: “realmente estás hermosa, Sophy” —responde ella.

No puedo evitar molestarla y ella sonríe como una tonta.

—Vamos Sophy, ambas sabemos que mueres por mi hermano —digo en tono obvio.

—Pues, aunque es cierto, tu hermanito es un mujeriego y si antes no se fijó en mí, ambas sabemos que mucho menos ahora —responde la pelirroja.

Caminamos hacia la escuela, con dirección a los pasillos cuando...

—¡Por todos los cielos! ¡Sophy, estás preciosa y de hecho con más físico! —le dice Lesley, abrazándola con mucho ánimo.

—¡También estás guapa! —le responde mi amiga.

—Ay, Annia, creí que en las vacaciones cambiarías tu estilo, siempre tan rutinaria… —dice Lesley, dándome un jaloncito en mi cabello.

—Bueno, ya sabes que ese tipo de cosas no se me dan, prefiero estar como siempre —le digo.

Y es la verdad, esta mañana pensé en ponerme algo distinto, pero acabé poniéndome mi ropa al puro estilo de Annia Lorn.

—Pero miren a quien tenemos aquí. Lesley Robinson, tan torpe como siempre, Sophy Drew, vaya... algo cambiada y... —ríe—. ¿Annia? Bueno, como siempre tan desorientada—empieza a decir Rose a su club de brujas, Tifany y Lola.

Sin duda eran las insoportables, populares y escandalosamente bellas chicas de la escuela. Con la que todos los chicos deseaban estar.

—Lo mejor será que te vayas Rose, no quiero amargarme el día —advierte Sophy.

—Pero si ya lo tienes amargado, junto al par de tontas estas —dice Lola señalándonos a Lesley y a mí.

—Por Dios, ¿es que acaso no tienen algo mejor que hacer, que fastidiarnos la vida? ¡Montón de brujas! —espeta Lesley, ya frustrada.