Por fin después de dos largas semanas en donde solo me la había pasado buscando departamentos por internet mandando papeles por correo, mandando muebles con la mudanza, por fin dejaba Atlanta para irme a Boston
—Cariño te vamos a extrañar mucho, nos aras falta para la hora de la comida y la cena—
—Mami yo también los voy a extrañar pero diario hablaremos por teléfono y sabes que cuando quieran tú y papá pueden ir a Boston yo los estaré esperando con los brazos abiertos— al decirle eso a mi madre, ella me daba un abrazo y podía sentir como mis lágrimas corrían por mi mejilla, de pronto sentía que un dedo limpiaba aquella lágrima
—Mira mujer ya hiciste llorar a mi princesa— al escuchar la voz de mi padre levantaba la vista para ver sus ojos los cuales comenzaban a llenarse también de lágrima
—Ven aquí princesa, no llores y no nos hagas llorar a nosotros que este momento no debe de ser triste, tenemos que estar contentos por ti que irás a cumplir un gran sueño— dicho eso mi papá se alejaba del abrazo
—Así que todos limpien esas lágrimas que es momento de que te vayas antes de que se haga más tarde y tienen que tomar un largo viaje por carretera— yo asentía con un movimiento de cabeza y regresaba a darle otro abrazo a mi mamá
—Adam te pido que manejes con cuidado, revisaron el coche y todo está perfecto pero si algo falla no dudes en detenerte pedir ayuda y obviamente avisarnos—
—No se preocupe señor Levine así será— Adam y yo nos despedíamos de mis padres para subir al auto y comenzar este gran viaje. Después de un largo viaje de unas 8 horas aproximadamente llegábamos a Washington DC donde sería nuestra primera parada.
—Amor puedes buscar cómo llegar al hotel?—
—Claro, solo espera un momento— dicho eso saco mi teléfono para buscar la dirección del hotel donde pasaremos la noche y seguir las instrucciones del gps.
Al llegar al hotel, Adam baja una pequeña maleta y ambos nos dirigimos a nuestra habitación
—Ya es algo tarde ya no nos dará tiempo de ir a los museos—
—Pues tendremos que regresar en otra ocasión— Adam me toma de la mano para salir del hotel
—Pero podemos ir a la Casa Blanca a tomarnos una foto y de ahí ir a buscar que cenar porque muero de hambre—
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Después de dos días por fin habíamos llegado a nuestro destino, por fin estaba en Boston y no sabía cómo sentirme estaba emocionada pero a la vez estaba nerviosa
—Estuvo entretenido el viaje no lo crees?—Adam me preguntaba mientras se detenía a un semáforo—
—Si, pero hubiera estado mejor si hubiéramos visitado bien Washington y sobre todo Nueva York, algún día tú y yo tenemos que visitar NY, no sabemos cómo extrañó ir de vacaciones en navidad— al momento que halaba podía notar como Adama apretaba un poco más de lo normal el volante
—Allison perdón, por arruinar tus ultimas navidad haciéndote pasar tiempo con mi familia—
— No yo no ....—
—Si Allison lo quisiste decir y lo dijiste—, Adam me interrumpía a lo que decía y era algo que odiaba, odiaba que quisiera pelear por todo lo que no le parecía que dijera, y sobre todo ahorita parecía que siempre estaba a la defensiva que todo lo que yo decía era para reclamar algo
—Creo que en esta calle tienes que dar vuelta?—le decía a Adam mientras observaba una fila de autos que daban vuelta
—No Allison el gps dice que aún faltan dos calles--
—Pero esos carro van a dar vuelta—
—Si Allison, pero esos autos van a la misma dirección que nosotros?—Mientras Adam decía eso se giraba a verme mientras yo negaba con un movimiento de cabeza
Después de perder como 10 minutos en el tráfico por fin llegaba al que sería mi nuevo departamento
—Oh por dios es aquí— mi vista se fijaba en una puerta negra que era la entrada de un edificio, Adam se acercaba más al volante y se asomaba por la ventana
—En verdad es aquí?— el tono de voz que usaba no me agradaba para nada ya que hacía sonar que el lugar era poca cosa
—Porque dices eso Adam?—
—Amor pensé que tus padres te pagarían un mejor lugar— mientras Adam hablaba me veía fijamente y en momentos veía la puerta del lugar
—Pues déjame decirte que ellos no pagarán mi renta, yo la pagaré— Adam al escucharme decir eso abría sus ojos en sorpresa
—Valla no me esperaba eso, pensé que ellos pagarían, pensé que como te vendrías a vivir lejos y tú sola ellos ahí si te darían para pagar la renta—
—Adam ya hemos hablado sobre eso, entiende no quiero ayuda de mis padres, ya tengo 25 años tengo un empleo y creo que ya puedo vivir por mí misma, por eso si me iba a vivir contigo tampoco les iba a pedir ayuda, podía notar como Adam fruncía el ceño
—Y como yo te eh dicho si tuviera esos padres yo sí pediría ayuda, y sé que cuando te dije lo de vivir juntos a tu padres no les pareció la idea porque ellos me odian— odiaba tener esa conversación con Adam porque sabía que siempre terminaba en discusión, porque a ninguno de los dos nos gustaba perder
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Editado: 06.03.2022