Capítulo 39

--No puedo creer que tengas una casa en el árbol, sabes cuantas veces hice berrinche para que mi padre me construyera una—mi mano tomaba la mano de Allison para ayudarla a subir

--Bueno la tengo porque cuando tenia 10 años yo la construí—

--Wow creo que eres un gran constructor— con un poco de trabajo lograba sentarme en aquella casa y dejarle un pequeño espacio a Allison

--Desde ahí descubrí mi amor por la arquitectura—

--claro había olvidado que eres arquitecto—

--Liam baja tu enorme trasero de ahí y baja que mamá y David aran el brindis de Navidad—

--Vamos baja tu primero para que yo tenga espacio—Allison comenzaba a bajar y cuando veía que ella estaba ya abajo yo comenzaba a bajar y al estar en el último escalón sentía como mi pie derecho se resbalaba y me hacia caer sobre el

--Liam estas bien—Allison se arrodillaba a mi lado mientras yo me revolcaba en el piso con el dolor

--Me duele el tobillo, derecho—Allison de inmediato me quitaba el zapato y el calcetin y comenzaba a revisarlo

--Es el que te lastimaste el otro día verdad?—yo solo asentía mientras Allison comenzaba a moverlo

--Creo que solo es un esguince, vamos a dentro para ponerte hielo—Allison me llevaba a dentro mientras yo cojeaba y me dejaba en la sala para después colocarme un poco de hielo.

--Bueno tengo que irme mis padres me esperan, pero prometo venir antes del mediodía para saber cómo sigue tu tobillo—

*Allison*

—Mamá podrías apurarte le prometí a Liam que llegaría temprano para revisarle el tobillo— mi madre aparecía en el lobby del hotel

—Tranquila no pasará nada si llegas 5 minutos después, y espero que así te apresures para cuando vayas a otros lugares y no sólo con Liam— yo simplemente rodaba los ojos ante el comentario de mi madre

—Y bueno a todo esto tú y Liam están en una relación?— mi padre me preguntaba mientras se ponía de pie y caminaba junto conmigo y mi madre para salir del hotel

—No, solo somos amigos—

—Que lastima yo que quería boletos gratis para los partidos—

—Y yo que ya quería pasar todas estas festividades con su familia—

—pueden parar con sus comentarios— mis padres solo se reían de mi y los tres salíamos del hotel para dirigirnos a la casa de Liam

Al llegar a casa de Liam David nos recibía con una enorme sonrisa

—Bienvenidos llegaron Justo a tiempo para el almuerzo, mi esposa está poniendo la mesa— cuando David pronunciaba esas palabras sonreía aún más

—Me encanta llamarla así, por cierto Allison Liam está en su habitación Ian no lo dejo bajar hasta que tú llegarás—

—Y donde está Ian?—

—El y Madison se fueron temprano a la casa de la madre de Madison—

—Bueno creo que iré a ver a Liam— subía las escalera y caminaba a la segunda puerta y tocaba

—Adelante— al abrir la puerta veía una habitación pequeña de color azul cielo y muebles en color madera y en las paredes había dibujos de fachadas de casa

—Hola Pastelito Feliz Navidad— Liam estaba acostado en una pequeña cama individual

—Hola Cherry—

—Como sigues?— yo me acercaba a Liam quien me veía con una sonrisa

—Ya no me duele tanto pero aún está inflamado— me acercaba y revisaba su tobillo

—Tengo que ir a la farmacia a comprar algunas cosas, hay alguna farmacia cerca—

—Si hay una a unas cuadras, vamos yo te llevo— Liam hacia el movimiento de quererse poner de pie pero yo de inmediato lo empujaba

—Ni lo pienses tú te quedas, necesito que reposes si quieres regresar a entrenar en dos días—

—Pero no quiero que estes sola por la calle—

—Tranquilo solo serán unas cuadras—

—Lo se pero es navidad y las calles están solas—

— Ya cálmate paranoico, ahorita veo y no te levaste o me enojare mucho— dicho eso salía de su habitación y caminaba hacia el comedor donde la madre de Liam, David los abuelos de Liam y mi padres ya estaban almorzando

—Liam no bajará a almorzar?— su abuela me preguntaba mientras bajaba sus cubiertos

—Si, solo que antes necesito comprar unas cosas para colocarle en su tobillo y así pueda pisar—

—Vamos yo te llevo a la farmacia— David de inmediato se ponía de pie

—No te molestes David yo puedo ir ya vi que no queda muy lejos, tú sigue con tu almuerzo si pasa algo yo les hablo—, yo tomaba mi bolso ya salía la calle para dirigirme a la farmacia, cuando llevaba unos metros de distancia sentía vibrar mi teléfono

—Hola—

—Cuanto te falta para llegar a la farmacia—

—Liam apenas unos segundos deje tu casa, puedes calmarte—

—Perdón pero siento algo raro, estoy como mi madre cuando le dan sus presentimiento— durante todo mi camino a la farmacia Liam iba hablando conmigo pero al parecer su paranoia se me estaba contagiando porque sentía que alguien me seguía, pero buscaba con la mirada y no lograba ver a nadie

—Liam sabes que te voy a colgar porque con tu llamada me estás poniendo nerviosa, ademas ya voy a llegar te veo en un rato— sin esperar a que me respondiera colgaba y guardaba mi teléfono en la bolsa para entrar a la farmacia y comprar lo que necesitaba.

A mitad de mi camino de regreso a casa de la familia de Liam un hombre chocaba conmigo haciéndome tirar mi bolsa

—Perdón señorita no la vi— el hombre que había chocado conmigo me ayudaba con mi bolsa y me la entregaba

—No hay problema— al tomar la bolsa me fijaba en aquel hombre alto y rubio con mirada penetraren

—Le puedo hacer una pregunta?—la mirada de aquel hombre me hacía ponerme nerviosa y un poco ansiosa

—Dígame señor en que puedo ayudarlo—

—Eres tu la novia de Liam Anderson el jugador de los Boston Stars—

—No, creo que me está confundiendo— dicho eso me giraba para continuar mi camino, pero en cuanto me giraba aquel hombre me tomaba del brazo

—Creo que me estás mintiendo— el hombre me extendía su teléfono donde me mostraba una foto donde yo estaba con Liam afuera de mi departamento, después me mostraba otra foto de ayer en la estación de autobuses, al parecer aquel hombre era algún fanatico