Prólogo

Actualmente, existen diversos factores que influyen en la vida de las personas, cada vez todo se acelera, el estrés aumenta, las enfermedades físicas y mentales están por todos lados. Es prácticamente improbable encontrar a alguien que esté en óptimas condiciones o saludable. Todo se ha convertido en un diagnóstico clínico, sea físico o mental. Todo va mal; la información se distribuye casi que a la velocidad de la luz; las facilidades de obtención de información se han convertido en un arma de doble filo. Todo se sabe, todo está al alcance de las manos, no hay forma de detener esto.

Pero tengo una pregunta. ¿Qué importa? La vida en general es algo que se busca preservar. Sin embargo, las acciones diarias de la misma humanidad llevan a que se deteriore. Estamos plagados de enfermedades y entre ellas las más comunes se han vuelto las mentales; el índice de depresión aumenta cada día, los trastornos se diagnostican a diario y las personas no saben qué hacer. Ahora mismo, en cualquier red social habida y por haber, existen canales de difusión u otras personas que brindan herramientas para lidiar con estas problemáticas; algunas realizarán este contenido de manera general y otros se dedican a personalizarlo. Pero ¿con qué fin? Entre más soluciones se buscan, más crece la problemática. Cada día es más común ver gente que dice tengo esto, aquello o padezco de tal trastorno, y algunas personas hacen miles de cosas con tal de superar aquello y están aquellas que solo se dejan llevar hasta el fondo. La depresión se ha convertido en el SIDA de esta nueva era, no entiende ninguna diferencia entre las personas, solo ataca, se contagia y en algunos casos consume a quien la padece y a quien acompaña.

Olvidenlo, hablo de manera general y realmente ese no es el punto. Si importa o no, es cuestión de cada uno, después de todo somos libres en esta jaula que hemos creado como sociedad, toda persona tiene el derecho de decidir, ese si es el punto, vivir es decidir diariamente, en todo momento. Todos tenemos nuestros pensamientos, visiones, perspectivas, puntos de vista, opiniones o como lo quieran llamar, y no hay manera de que se viva eso en colectivo, nadie vive la vida fuera de la suya, la realidad es individual y no importa mucho encontrar la verdad absoluta de todo como muchos quieren hacerlo.