Next Game

Ya habían pasado 3 días en los que el grupo creado por X no daba señal alguna.

X: Como han estado mis marionetas

Fue el primer mensaje recibido después de ese tiempo, despertando la inquietud del grupo. Pero aquel comentario, mas que inquietud, despertó el odio en Jessica, odio hacia esa criatura, a ser considerada una simple marioneta y no poder hacer nada al respecto.

JESSICA: Marioneta tu abuela.

JESSICA: Yo no soy juguete de nadie.

Tasha: aquí nadie es tu marioneta maldita loca.

Tomy: Déjanos en paz aquí nadie te ha hecho nada. No te basto con lastimar a Mateo!!??

Nadie esperaba una respuesta a eso, pero llego,  aunque ellos hubieran preferido que jamas llegara.

X: No aun no. La verdad me estoy divirtiendo a chorros. Y quiero mas, mas sangre... Mas miedo.

Dante: Lau ya para. Por favor detente. Ya es suficiente.

La desesperacion en aquel mensaje era obvia, pero a X no le provocaba nada mas que risa y excitación, le provocaba querer lastimarlos aún mas.

X:Sera suficiente cuando yo lo decida maldito hipócrita.

Maira: que ocurrió con mateo. Esta bien?

Fue la primera pregunta sobre aquel tema que,  por miedo a cual fuera la respuesta, nadie quería tocar.

Tasha: Como esta el chico, al menos respondenos eso.

X: Tranquilos el volverá en brevedad.

En un pequeño cuarto de un centro psiquiátrico Mateo se encontraba descansando, su brazo había sido operado curado y vendado. Su madre lo llevo allí luego del suceso del brazo cortado,  entre lágrimas y repitiendo una y otra vez, que su hijo se habia vuelto loco. 
Sobre la pequeña mesita de luz su móvil sonaba y vibraba. Mateo se despertó alarmado por el sonido. Miro su móvil en la pequeña mesita y lo tomo. Abrió sus conversaciones de WhatsApp y vio los mensajes del grupo Nadie sale  asustado por lo que podría ocurrir si lo ignoraba escribió.

Mateo: Hola chicos estoy bien. Me han internado en un centro psiquiátrico creen que tengo esquizofrenia.

Luhan: es entendible. Quien te creería que un demonio que creó un grupo de WhatsApp iría a tu casa por un "juego" y te cortaría el brazo.

Tania: es verdad nadie lo creería.

JESSICA: Si si si la princesita esta viva y que. Nosotros aun estamos en este juego. Seremos los siguientes y a nadie le importara.

Si tal vez sonaba cruel, pero para Jessica era la mejor manera de hacer pasar los malos momentos por la elección con ese niño. Al menos así dejaría de pensar en cómo lo lanzó como cerdo al matadero y como, probablemente le arruinó la vida.

Tasha: Siempre tienes que actuar como una maldita cínica!?

JESSICA: Siempre tienes que actuar como una maldita monja!!??

Luli: Esto es una maldita idiotez.

Luli: por que no terminamos con todo esto de una vez. Si vamos a morir lo haremos ahora.

Y como se arrepentiría de haberlo sugerido.

X: Si así lo quieren.

X: Siguiente juego.

X:Eliminación.

X:  consiste en sobrevivir una noche a una visita de mis amigos.

X: Deben encerrarse en sus habitaciones y a las doce en punto deberán estar en sus camas. No deben moverse ni hacer ningun sonido, o mis amiguitos los mataran.

X: Ho y hay reglas.

X:1 nada de móviles.

X:2 nadie debe entrar a su habitación, si lo hacen morirán ellos y ustedes también.

Tania: Por que nós haces esto. Estas loca.

X: Cero móviles.

Al instante los móviles de todos los chicos del grupo se apagaron. Ya no había forma de comunicarse con nadie mas, ahora estaban solos y a punto de ser visitados por unas criaturas extrañas. Miedo?  No, mas que eso.

En la habitación de Ezequiel no había sonido alguno. Este se encontraba petrificado. Tenía miedo si,  pero quería vivir.

11:30 y cerró las puertas y ventanas de su cuarto. Apago las luces y se recostó en su cama cubriendose completamente con sus sábanas. 
00:00 en punto, se expande un frío extremo por todo su cuarto. Las Ventanas se abren de golpe causando un enorme estruendo. Ezequiel ruega que nadie lo haya oído aun que, estaba solo y tal vez eso era lo peor. Podía escuchar gritos desgarradores de almas en pena mezclado con risas perturbadoras y susurros extraños. No quiere moverse,  apenas si respira,  el terror se apodera de el. 
De repente un peso se posiciona sobre sobre su cuerpo. Una respiración helada y nauseabunda. Ezequiel comienza a sentir el miedo en sus venas. Pero se resiste a moverse o gritar.

"Tranquilo tranquilo tu puedes"

Las sabanas que cubrían su cuerpo son retiradas violetamente. Ezequiel se contiene de dar un respingo. Sabe que con el más mínimo movimiento esas cosas lo mataran. Así pasa una hora. Entre golpes y gritos y en todo momento Ezequiel siente como alguien o más bien algo le respira en la nuca y una pequeña risa siniestra suena en sus oídos.

Al fin siente como la temperatura comienza a ascender y tanto la respiración como los diversos sonidos cesan. De todos modos Ezequiel no se mueve ni emite el más mínimo sonido. A pesar de todo aun teme que eso sea una trampa y que estén esperando un mínimo movimiento para matarlo. Luego de unos minutos Ezequiel cae en un profundo sueño.

El a sobrevivido esa noche