15.-¿Qué eso tan importante?

Natasha:

En los 2 dias siguientes no me atreví a verlo a la cara,no quería  hacerlo,me día el alma y se que a él también.Me la pasé llorando todas las noche ,junto a las pesadillas.No aguantaba más nada .Mi corazón dolia.Se que él me amaba pero no entendía que él ya tenia su vida echa,junto a su hijo y yo no quería interponerme a eso.

Me habia resignado a comer y haber a esos malditos especialistas,había vuelto al principio,las ganas de vivir se habian esfumado,me sentía perdida,sin rumbo ,ni sentido.No sabia como salir de esto y es que una parte de mi tampoco quería hacerlo .

Era prácticamente pasado mediodía y justo era la hora de comer.Solo estaba sentada en la silla de ruedas mirando hacia la ventana.La puerta emitió un sonido e imaginé que se trataba de Mark o de algun sirviente que me decía que era la hora de comer pero me equivoqué.

-Puedo pasar.-se escuchó la vocecilla del pequeño.

-Si adelante.-me di la vuelta con la silla de ruedas ,mientras el pequeñín habría la puerta.

Al igual que su padre llevaba un pantalón negro y una camisa blanca,era un mini Mark.El corazón se me estrujó al ver el niño en la puerta,respiré profundo y contuve las lágrimas para que el niño no me viera llorar.

-Mi papá me ha  dicho que te acompañé, que es la hora del almuerzo.-me regaló una sonrisa de forma tímida.

No dije nada ya avancé hacia él,mientras avanzaba él no se movia de la puerta para que yo pudiera avanzar.Le observé sin entender ,él se movió y se posicionó detrás mió y empujo las sillas de ruedas.

-Yo te llevó.-Dijo mientras nos dirijiamos al ascensor.

Al llegar a la sala Mark ya estaba sentado en el gran banquete y nos miraba sonriente.Uno de los sirvientes retiró un silla y Lució acomodo mi silla a la altura de la mesa.

-Cumplí la misión,papá.-dijo con entusiasmo Lucio.

-Bien hecho.-le sonrió y Lucio se sentó junto a su padre.

Miré mi planto con bastante asco y repulsión,a su costado había una infinidad de cubiertos que aun me costaba acostumbrarme a su función.No se cuanto tiempo pasó que me quedé mirando mi plato,que ellos ya iban por el postre.

-Debes de comer.-me rogó Mark.

Pero le ignoré,soltó un bufido acompañado del fuerte grito de Lucio.

-¡Mamá!.-El pequeño corrió y le seguí con la mirada donde Elisa estaba parada con los brazos extendidos esperando a Lucio.

Hiba realmente hermosa,unas botas negras y con un mini vestido de lana,Mark se levantó a saludarla y se quedó un poco sorprendido al verla,al parecer no se esparaba su llegada.

Me sentí totalmente fuera de lugar.

-Gracias.-susurré y me fui para mi habitación.

Mark:

Fue mucha mi sorpresa al ver a Elisa allí parada,supuetamente venia dentro de un mes.No me gustaba que viniera sin avisar,no hay horarios para que vea a Lucio pero me gusta que me avise para no tener que pasar por momentos incomodos para Natasha.

Me volteé a verla y no estaba,fui casi volando a su habitación.No habia probado ni un bocado de su comida.

Su puerta estaba abierta asi que me adentré en ella,como casi siempre estaba mirando la ventana.

-Lo siento,mucho,no sabia que hoy volvía.-dije tras su espalda.

-No tienes por que disculparte,ella tiene el ismo derecho que yo o mas de estar en esta casa,es la madre de Lucio.-Habló pesadamente,se que no le gustaba.

Suspiré.-No has probado bocado Natasha,por favo tienes que comer.-posé mis manos en sus hombros y besé su cabeza.Aquel acto la estremeció y se aparto de mi.

-No vuelvas ha hacer eso.

-¿Besarte e intentar demostrarte cariño?

-si exactamente.-me habló de forma fría 

Lo que ella quería era a Lucas y no a mí . Mordiendome lla lengua, salí,para no decir alguna tontería.

Natasha:

-¿Que pasó?¿Porque me llamas,Lucas?

-Estooy en el avión pronto aterrizaré,a media noche estaré por la mansión.

-Te necesito.-susurre

-Y yo a tí.-sollozó y colgó

Le esperé hasta le media noche que justo llegó.Yo lle esperé en mi cama observando la puerta.Cuando se abrió,el entró corriendo y se lanzó a mi.

Empezó a llorar y a llorar recostado en mis piernas y abrazado a mi.Yo también lo hizé, también lloré apoyando mi mentón en su cabeza.

No sé si pasaron horas o minutos y el llanto cesó y vino acompañado junto al cansancio de llorar tanto.

Me había acostumbrado a tener que llorar en el hombro de Lucas,con Mark se me era extraño,me sentía extraña llorar con él.

Cuando me desperté era casi de mañana,estaba amaneciendo y era bonito ver los rayos del sol reflejados en el pelo rubio de Lucas.

Mientras más sol se adentraba por la mañana,Lucas se hiba despertando. Él tenía un aspecto horrible,unas ojeras realmente pronunciadas ,el rostro pálido y los ojos rojos, estoy casi segura que yo estaba igual.

Se levantó de mis piernas y se sentó en la cama dando la espalda.

-¿Pasa algo?.-le interrogué y le volví a escuchar sollozar y vi que dando me la espalda se estaba quitando la camisa,cuando vi su espalda,me llevélas manos a la boca para ahogar el grito que estaba a punto de dar y con pánico ante lo que estaba viendo.

Su espalda desnuda llevaba,un corte que partía de forma diagonal su espalda con restos de sangre seca y cosido,añadiendo los varios moretones.

-Lucas...tú...no puedes seguir así.-Rompí a llorar viendo todo el maltrato que le hacía su padre.

-Tengo miedo... Natasha...y no puedo hacer nada.

-Dios...te está maltratando...puedes denunciarlo.

-No puedo...no puedo y eso me frustra.-Hizó las manos puños.-Mi padre me mataría.

-Me duele tanto,no poder hacer nada por ti,que salgas de ese infierno.-mis lágrimas caían y el pechyme dolía.

-Todo acabará cuando me casé...