La flecha eléctrica voló por el aire con tal velocidad que alguien normal no la habría visto pero la Pica la partió en el aire y pese a que los trozos de esto también explotaron con leves destellos, el monstruo estaba intacto, por lo que movilizo con sus tres espadas hacia ambos muchachos.
Gerard lo intercepto desviando la espada con un golpe.
— ¡Destruyan al Trébol!— Dijo el chico poniéndose en guardia, defendiéndolas contra la espada de la Pica.
—Bien— Radis se giró y con un rápido movimiento disparo hasta la computadora la cual exploto al sobrecargase.
Kayo pudo ver como explotaba pero luego se horrorizo cuando desde los restos emergieron tentáculos que de a poco se formaron en un cuerpo grande metálico hecho de cables con trozos de metal.
Los Tréboles eran seres mecánicos, como las Picas pero en forma de plantas que tienen raíces metálicas con las que defiende su computadora central la cual tiene forma de trébol, o sea su cara. Era una especie de computadora compuesta de metal líquido que cambiaba de forma.
Radis lanzo otra flecha pero esta fue repelida por un escudo metálico formado desde sus tentáculos. Los destellos no hicieron nada.
El Trébol extendió un par de brazos metálicos gigantes que trataron de atrapar a Radis y a Kayo quienes saltaron, evitando el ataque, aprovechando para apuntarle a la cabeza con sus armas.
Un disparo eléctrico acompañado de un destello de luz que exploto pero sin hacerle daño pues se protegió con sus hojas, a lo que acto seguido se movió entre los ataques con sus propios látigos metálicos para tratar de atravesar a las dos con espadas.
Ambas se percataron y Kayo lo recibió en el costado mientras Radis lo evitaba por poco usando su arco como soporte para moverse por el aire solo para ser poco atravesada por otra espada salida desde uno de los tentáculos.
Fue el cuerpo de la Pica el que termino chocando contra el látigo con espada, salvándola en el último momento.
Gerard salto para tratar de impactar un golpe en la computadora del Trébol pero este lo recibió con una placa metálica que reventó hacia adelante, lanzando al chico contra la pared cercana.
—No recordaba que pudieran ser tan fuertes— Radis hizo una mueca.
—No debería serlo— Kayo termino de recuperarse— Parece que este Trébol tenía mucho tiempo aquí aunque no sé porque actuar hasta ahora. Supongo que nunca entenderemos como funciona su cadena de mando.
—Ni que supiéramos su origen— Radis se encogió de hombros.
El Trébol trato de aplastarlos con una mano gigante pero Kayo la corto con un destello de luz concentrado, entonces lanzo otro disparo directo a la cabeza y pese a su velocidad, no logro darle antes de que levantara su defensa.
Radis se movió por su costado para dispararle un par de flechas a la vez pero la criatura las evito con sus látigos no sin antes apartar a Gerard quien se levantó para tratar de golpearle en la cara desde arriba.
Kayo incremento el poder de su varita, lanzando todavía más poder de luz, tanta que comenzó a fragmentarse para generar más disparos de luz que cortaban los tentáculos del Trébol aunque estos no tardaban en reincorporarse al cuerpo principal como si nada, reforzando la defensa contra esa luz.
La niña mágica pensó que debía mantenerlo en ese lugar y así, quizá sus amigos pudieran atraparlo con la guardia baja.
Radis se movía entre los tentáculos, tratando de apuntar a la cara con tal de alcanzar su punto ciego mientras evitaba los ataques de Kayo.
Gerard se concentró y de un momento a otro alcanzo una velocidad bestial que lo hizo atravesar la defensa de tentáculos hasta llegar lo bastante cerca de su enemigo, casi teniéndolo de frente.
Pero el monstruo levanto otra defensa que evito el impacto aunque este libero un montón de energía oscura con la fue empujado hacia atrás junto con su enemigo, provocando que el líquido negro se contrajera hacia la computadora para generar más defensas.
Su metal era resistente pero si podía quemarse.
Radis potencio su velocidad con el rayo y salto sobre el cuerpo principal. apuntando a la cabeza, justo sobre las defensas, usando dos flechas cargadas de velocidad y de energía etérea.
La energía etérea era la base de sus núcleos pues estos la absorbían de la naturaleza y la aprovechaban para convertirla en los elementos de estos.
Las flechas volaron hasta ese espacio e impactaron, generando una gran explosión.
Los tres chicos pudieron regresar al suelo.
— ¿Estas bien? Tú estabas cerca…— Kayo fue hasta Gerard.
—Estoy bien— Gerard asintió, acomodando sus guantes.
— ¡Que increíble!— Dijo Radis emocionada moviendo sus manos— Buen trabajo en equipo, supongo que entonces no fuimos elegidos al azar ¿No? Espero ¡Por que fue increíble!
—Admito que lo fue— Kayo asintió con una leve sonrisa.
Gerard dejo caer sus hombros, quizá una forma de estar de acuerdo.
—Vayamos a avisar— Los tres se movieron para salir de la habitación con cierta despreocupación hasta que Gerard empujo las chicas evitando que por poco los tres terminaran atravesados.