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— ¡Incluso esta pequeña nave es increíble!— Mandrágora estaba muy emocionada, mirando el panel brillante que manejaba Gerard con mucha familiaridad. La realidad es que había estado investigado como funcionaba todo en la nave y esa nave pequeña, de hecho, tenía menos características y era más fácil de manejar.

—Me alegra que hayas venido tú, yo no habría leído nada de la nave y Radis, pues…

Gerard esbozo una sonrisa, segura de lo que dirá.

—Si lo necesitan, yo también aprenderé a usarla— Mandrágora tenía unos ojos brillantes.

—Me parece bien— Aseguro Gerard levantándose para que Mandrágora se sentará en la silla principal— Por lo que dijeron, no es peleadora, así que necesitamos que aprenda a usarla en caso de ser necesario, mientras nosotros la cubrimos.

—Tengo mis trucos pero es verdad que no peleo— Mandrágora se sentó en la silla frente al panel mientras Gerard le explicaba las características más básicas. Kayo también estaba prestando atención, por si acaso.

—B-bien— Mandrágora ya entendía la mayoría, así que tomo el control, desactivando el piloto automático— El control es suave, eso me alegra, y todo parece en orden ¡Bien! ¡Me encanta!

Gerard aun así la vigilaba de cerca.

— ¿Y cuál es el plan?— Gerard miro a Kayo.

—De momento me gustaría escuchar la información de la que disponemos sobre el planeta— Kayo miro a la conductora que susurraba para sí misma los pasos a seguir para mantener todo en orden.

La mujer miro por encima del hombro y asintió, activando el piloto automático de nuevo para girar en su silla.

—Tovs es un planeta industrializado, a diferencia de Ploresi quienes buscan un equilibrio con la Plora o el mismo T’k’bileuli quienes descubrieron el Akari como materia prima para su energías, estos usan principalmente el carbón y el petróleo, aunque últimamente están buscando fuentes más sustentables.

—No suena diferente de mi mundo— Kayo asintió.

— ¿De verdad? ¿Cómo era?— Mandrágora se mostró muy interesada.

—No sabría cómo decirlo, solo se parecen mucho— Kayo le sonrió con cierta vergüenza.

— ¿Sabes dónde está el pedazo de dios?— Preguntó Gerard.

—Ustedes la llaman escama ¿No? Pues sí pero como en Ploresi, suele moverse de lugar— explicó la mujer, entonces se giró al panel para teclear algunas cosas, a lo que frente a ellos apareció un holograma del planeta con una flecha— Listo, la encontré, no es una base muy fortificada pero…

—Pero…— Kayo levanto una ceja.

—Está en medio de una ciudad…

—Eso complica las cosas…— Gerard hizo una mueca.

—Sí, la última vez estábamos escondidos y fue una tortura de todas formas— Kayo hizo una mueca.

—No se preocupen, esta vez quizá podamos ser más discretos, como les dije, es un planeta industrializado pero si lo comparamos con las facilidades de otros planetas, se quedan solo un poco atrás— Mandrágora comenzó a conducir ella misma de nuevo— Aprovechemos eso.

— ¿Tienes un plan?— Pero Kayo.

—La infiltración será fácil conmigo ahí— Dijo la mujer— Seremos enviados de Ploresi y para la extracción nos centraremos en causar problemas en dos sectores específicos que son importantes para la central, entonces huiremos en el caos…

Ambos chicos intercambiaron miradas.

—Créanme, funcionara— Mandrágora parecía muy orgullosa de su plan.

—Bueno, tampoco nos falló antes así que está bien— Kayo tranquilizo a Gerard— Iremos con ese plan, pero de nuevo debemos estar conscientes de que tiene que salir a la primera. Infiltrarnos de nuevo será imposible.

Ambos asintieron.

—En primera, explicare esas todos zonas— Mandrágora desabrocho su pulsera y la conecto a la nave, entonces en un holograma aparecieron varios documentos que sorprendieron a la mujer— Increíble, los digitaliza al instante.

—Espero que no haya virus…

—Imposible, no creo que haya virus capaz de infiltrar esta seguridad ni estos sistemas, al menos no ninguno de nuestros planetas— La chica comenzó a mover los documentos con rapidez— Aquí esta.

La chica abrió uno, demostrando el mapa de la central, un edificio alto de unos diez pisos con lo que parecían pisos subterráneos, unos diez también, entonces acerco el mapa al punto de interés, primero, la planta baja.

­ —Entraremos por aquí, entonces nos dividiremos, yo con alguno de ustedes subiremos a donde está la escama, mientras el otro, justo en antepenúltimo piso encontraremos la planta de energía y debemos apagarla.

— ¿La escama está arriba?— Gerard hizo una meuca.

—Así es…— Aseguro la mujer acercando al mapa en la zona de arriba— Verán, el transporte en este planeta es completamente por aire por lo que tienen un sistema de defensa aéreo increíble, raramente algo pasa sin que se enteren.

— ¿De verdad?— Eso preocupo a Kayo.

—Sospecho que esta nave puede burlar el sistema pero si no, de todas formas es la única forma de hacerlo— Mandrágora se cruzó de brazos.