Nexus Odyssey Vol. 1

24

—Será un procedimiento doloroso pero te aseguro que con él, el rumbo de la guerra cambiara. Ustedes… Serán la esperanza de nuestro mundo, no, de nuestro universo— Aseguro la voz del científico encargado del programa de Niñas Mágicas— Serán la luz que queme las alas de esos monstruos.

Las niñas mágicas son la esperanza de los Oasis, no deberían pelear entre ellas. Algo que Kayo siempre escuchaba.

Kayo se movió a gran velocidad para patear a la chica rival pero esta se cubrió con ambas manos, aun así, fue lanzada contra la pared contraria, destrozándola en el acto, y acto seguido disparo haces de luz desde su varita.

La chica magia azul salió de entre los escombros solo cubierta de polvo, con una expresión molesta.

— ¿Cómo es que hay otra niña mágica? Soy la única actualmente— Aseguro la chica pelinegra levantando su celular.

—No lo creas, seguro ahí afuera hay muchas más— Kayo se rio un poco apuntándole con su varita— No te creas tan especial. No somos más que soldados creados para enfrentar a una amenaza. La única ventaja es que se nos permite usar ropa bonita.

La chica trono sus labios y se movió a gran velocidad, con la mano cubierta de electricidad.

Kayo lo evito, agachándose solo para ser golpeada por la rodilla de la chica, quien aprovecho para atravesar su hombro con su mano, entonces se elevó, giro aun con su mano en su hombro y pateo a la chica rosa contra la puerta por la que entro, destrozándola.

—Mierda…— Kayo trato de quejarse pero la chica ya le había caído encima, sacándole el aire.

—Idiota— La chica pelinegra mantuvo su pie sobre el estómago de Kayo— ¿De qué planeta eres?

—La Tierra, claro— Kayo ya tenía sangre en la comisura de su boca.

— ¿Tierra?— Pregunto la pelinegra aplicando más presión en su estómago, lo que dibujo una mueca en su rostro— No bromees conmigo ¿De qué planeta eres? ¿Quién robo los planes del proyecto? Era alto secreto.

— ¿V-ves? Te dije que no te sintieras especial— Kayo se rió un poco, sujetando el pie de la contraria— Y otra cosa ¿Acoso no sabías? Los otros planetas están aliados con este ¡Sorpresa!

—Eso ya lo sabía— La pelinegra hizo una mueca— Pero el proyecto de niñas mágicas es alto secreto, algo que nunca dejaríamos que se filtrara, era nuestra arma contra ellos en caso de que se salieran de control ¿Llegaron a la misma conclusión? ¡Ya responde de qué planeta eres!

—Ya te dije, la Tierra— Kayo la aparto bruscamente, entonces giro en el suelo y logro desequilibrar a la contraria pateando su pie de soporte. La chica trato de dispararle con su celular pero el ataque solo le rozo el cabello pues esta se giró, entonces Kayo la imito, atacándola con su varita desde abajo, logrando rozarla en el hombro.

Kayo se impuso lejos con sus piernas mientras su enemiga trataba de dispararle de nuevo con su celular aunque de nuevo fallando, aunque rozando el borde de su vestido rosa.

Ambas sabían que sus poderes eran similares.

Se recuperaron a la misma velocidad.

—No importa, voy a eliminarte— La pelinegra parecía segura de lo que decía, tanto que sonrió con orgullo.

—Las niñas mágicas no deberían pelear entre ellas— Kayo hizo una mueca y se encogió de hombros— Somos la esperanza de nuestro mundo, nada más, no somos enemigas pero… Supongo que esa es solo mi mentalidad.

La pelinegra avanzo con velocidad para atacarla esta vez cubriendo ambas de sus manos de aquella electricidad.

Kayo esquivaba aunque de vez en cuando sentía que su ropa era destrozada o incluso su cabello.

La pelinegra entonces trato de cortar su cuello pero Kayo retrocedió, evitándolo por poco o eso parecía pues la luz creció en la mano de la chica, generando una cuchilla que corto un poco del cuello de Kayo quien tuvo que apartarse no sin antes recibir otro corte desde su otra mano en el estómago.

Kayo se tuvo que sostener con una de sus rodillas.

—Ya basta de juegos— La pelinegra esbozo de nuevo aquella sonrisa confiada.

Kayo se puso de pie, limpiando la comisura de su boca mientras sus heridas y sus ropas se regeneraban.

—Eso veo…

La pelinegra se movió de nuevo rápidamente, tratando de apuntar a la cabeza de Kayo pero esta se movió hacia la derecha, ahí, fue impactada por una línea de energía que salió desde la otra mano de la chica, dándole justo en el hombro, sorprendiendo a Kayo.

La pelinegra podía moldear su ataque, pudiendo incluso estirar la energía desde cualquier punto de su mano. Aun no conocía su límite por lo que no importaba que tanto se alejara su enemigo.

Podía fácilmente cubrir puntos ciegos de su ataque y causar el daño máximo.

Kayo se alejó de nuevo, mirando la herida de su hombro, cerrarse.

—Ríndete… quizá te puedan dejar viva para analizarte y verificar si es verdad que alguien robo nuestros planes— La pelinegra avanzaba lentamente hacia Kayo con sus dos rayos en las manos.

Tras un parpadeo de nuevo un intercambio de ataques, aunque más bien Kayo evitaba la mayoría, esquivando incluso aquellas cuchillas de luz que salían desde cualquier lado de sus manos, aunque por poco.



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En el texto hay: aliens, multiverso, batallasepicas

Editado: 17.05.2025

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