La flecha se acercó a gran velocidad hacia el rostro de Dextrosa pero esta la cortó en el aire con uno de sus abanicos con suma facilidad, entonces giro y trato de cortar la cabeza de Radis pero esta lo evito, usando el cuerpo del arco para cubrirse del embiste de la mujer.
Radis no se detuvo con eso, creando una flecha en su mano y tratando de enterrarla en su hombro pero la mujer la evito con su abanico, golpeando el antebrazo de Radis con su codo para entonces lanzar un corte que le hizo daño en la mejilla.
Sin opciones, Radis se apartó usando el forcejeo como impulso para dar un giro hacia atrás pero Dextrosa avanzo para interceptarla en el aire a lo que esta logro aventar otra flecha que por poco le da en los pies. La mujer se detuvo justo a tiempo pero aprovecho para lanzar una onda eléctrica directa a la chica.
Radis de nuevo uso el arco para evitar el daño, dispersando el rayo y regresando al suelo, con seguridad.
Pese a su control con los rayos, la joven se encontraba temblorosa debido a las corrientes de Dextrosa. Debía encontrar una forma de contrarrestarlo.
—Que gran habilidad tienes querida, que molesta— Aseguro Dextrosa quien no estaba afectada para nada.
—Muchas gracias— Radis preparo tres flechas en su arco— Pero aun no termino así que si me disculpa, tengo que dejarla inconsciente.
—Me pregunto…— Dextrosa no pudo evitar relamerse los labios.
Entonces Radis disparo.
Las tres flechas volaron a gran velocidad, pero Dextrosa las evito, cortando solo una en el aire mientras se movía hacia la chica, pero se percató de algo, por lo que salto evitando una de las flechas que esquivo antes y acto seguido esquivo la otra que también iba hacia ella, entonces con un giro relampagueante, corto ambas flechas en el aire.
Radis había creado esas flechas para que rebotaran o más bien, usaran los materiales magnéticos del ambiente para moverlas, además de la estática liberada durante combate para dirigirlas con los dedos.
Cuando Dextrosa regreso al suelo, Radis ya había disparado tres flechas más.
— ¡Qué molesta!
Mientras tanto, Anid disparaba a los soldados que trataban de acercarse. Eran bastantes y muchos tenían una puntería de miedo.
Aun así, no se acercaban mucho, y solo ella sabía porque.
Dextrosa cortó otra de las flechas que reboto hacia ella, entonces acto seguido creo una onda de choque que fue hasta Radis pero esta logro evitarla, saltando hacia un lado y lanzando tres flechas más mientras lo hacía.
La mujer solo pudo cortar una de las flechas pues las otras dos se desviaron hacia sus costados, logrando cortar una en el aire con una onda eléctrica pero la otra logrando herirla en el hombro para entonces cortarla antes de que pudiera redirigirse hacia ella.
Dextrosa miro su ropa destrozada— Te subestime pero no te creas tanto, pequeña…
—Lo hago— Radis sonrió con orgullo, lista para lanzar tres flechas más.
Hela sabía que las capas de pared y Akari eran gruesas por lo que tendría que juntar mucho viento, sin mencionar que debía usarlo también para dispersar a la gente que pudiera estar cerca, todo para que pudieran salir de la forma más limpia posible. Aunque tomando en cuenta como había salido todo hasta ahora, eso sería imposible.
De todos modos, ya casi terminaba. Radis era fuerte pero esa mujer también y era peligrosa. Si el combate continuaba, no tendría más opción que usar eso.
Solo un poco más.
Dextrosa se abalanzó contra Radis antes de que disparara pero la velocidad de Radis para disparar era increíble así que incluso si logro acortar distancia, las flechas fueron hacia ella a gran velocidad.
La mujer salto para girar sobre sí misma, atrayendo las flechas o más bien, generando ondas eléctricas que las cortaron con un rápido movimiento.
Radis preparo otra tanda pero Dextrosa la había alcanzado, por lo que tuvo que usar el arco como escudo. Su impulso fue tal que terminó estrellándose contra la pared contraria, sacándole el aire.
—Eres rápida pero tu tipo de combate es a larga distancia— Aseguro Dextrosa presionándola contra la pared, usando ambos abanicos mientras una sonrisa se dibujaba en su rostro— Que molesta pero que habilidosa, para tu edad.
Radis le sonrió pero estaba un poco preocupada.
La mujer era capaz de usar el rayo en una armadura, tal como ella, por eso se movía tan rápido, por eso incluso a veces parecía que las flechas se desviaban de ella o bien, no le hacían daño. Radis también podía hacer eso pero esa mujer realmente sabia como sacarle provecho.
Radis no iba a terminar ahí, así que empujo con todas sus fuerzas usando el arco de soporte y la pared pero entonces la mujer le lanzo un corte que dio justo en su costado, sacándole sangre.
Pese a su defensa eléctrica y su ropa, fue capaz de atravesarla. Tal vez le dio a quemarropa.
—Que molesta, tu armadura también es dura— Dextrosa sonrió un poco.
Radis ya no pudo meter tanta fuerza como le hubiera gustado.
Ahora es cuando debía hacer algo sorprendente.