Nexus Parte I V: La Singularidad

Origen.

Todos se quedaron en silencio mientras Edwina estaba sentada de mariposa sobre la mesa contemplando a todos aunque centrándose en su manzana roja más que en ellos, mordiéndola con una expresión despreocupada.

— ¿Qué pasa? ¿Por qué las muecas preocupadas? ¡Todo saldrá bien!— Edwina los tranquilizo— Pudimos desarrollar gracias a Beatrisa e Irene bastantes medidas contra nuestros enemigos ¡Estas dos son brillantes! ¡También Heldegarde! Pero ella no estaba en condiciones para trabajar así que la mandamos con Andrej a la Ciudad Sumergida.

—Está bien, no se preocupen pero aun necesitaba tiempo para su duelo— Les dijo Irene.

Tenía sentido. Descubrió que su hijo perdido en el desierto blanco era el Kraj, el enemigo más grande de la humanidad.

—Entonces ¿Podemos ganar?— Pregunto Navier hacia las científicas.

Irene y Beatrisa intercambiaron miradas.

— ¡Sí! ¡Hay un ochenta por ciento de posibilidad!— Les dijo Edwina, notando de nuevo las muecas de preocupación— ¡Dejen las caras largas! ¡La probabilidad solo puede aumentar, no disminuir!

—Mi ma… Esos tipos son demasiado poderosos ¿De verdad podemos…?— Comenzó Amapola con nerviosismo.

—Pero no son poderosos ni peligrosos solo porque si— Edwina termino su manzana y arrojo el corazón a la basura— Todo poder viene de algún lado y es hora de ponerlos en contexto ¿Saben que es un dios?

Todos miraron a Irene y Beatrisa quienes se cohibieron.

—Ah, claro, Prasma y Átropos, sí, claro— Edwina se rio un poco ante eso— Ellas son cuerpos artificiales con capacidades increíbles para absorber la energía etérea en caso de Prasma y la Corrupción, en caso de Átropos pero al final, son tan mortales como cualquier de nosotros.

— ¿Me estás diciendo que existe dios?— Diego sonrió de lado, incrédulo.

—Sí, pero esa es la respuesta corta, la compleja es que en realidad son cuatro y no son nada parecido a lo que conocemos como “Dios”— La mujer noto la expresión de todos, algunos consternados, otros aun expectantes— Lo importante es que un mortal puede aspirar a ser un dios.

Eso levanto todas las cejas.

—Dejando las explicaciones del génesis, solo diré que con el tiempo en el desierto blanco dejaron de crearse solo universos y comenzaron a tomar forma los conceptos que influyen en estos Oasis: El poder imparable del tiempo, el espacio mismo, la materia como lo que existe, los elementos, todo, para ser precisos el origen de su poder— Dijo la chica extendiendo sus manos— Eso es lo que llamamos Orígenes.

—Puedes ir más lento— Alejandro no entendió nada.

—Yo también tarde en entenderlo pero creo que podría explicarlo mejor con un ejemplo— Comenzó Irene— Por ejemplo ¿Cómo explicas el congelamiento? Es detener el movimiento de las partículas que componen la materia hasta el cero, eso genera la congelación y eso es el origen del poder. No se trata del fenómeno que da como resultado, el hielo, si no el proceso, en este caso, el detener el movimiento de materia, lo mismo con el fuego, el fuego como fenómeno es solo el resultado de aumentar el movimiento de las partículas a grandes velocidades.

—Ella lo explico bien— Edwina asintió.

— ¿Me estás diciendo que conceptos tomaron formar solida? ¿Cómo cristales?— José entendió eso.

—No toman forma física tal cual, solo existen como concepto invisible, pero compuesto de todas sus partes— Edwina se encogió de hombros y entonces un gato negro salido de la nada le tendió una nueva manzana, antes de volver a desaparecer.

—Katze, por ejemplo, ese gato obtuvo el origen del espacio…

— ¡¿Un gato?!— Lavanda no podía creerlo.

—Por eso les digo que el plan está garantizado en un ochenta por ciento de funcionar— La mujer mordió la manzana— Dentro de un Oasis no se pueden obtener un Origen porque estos forman parte del todo en ese Oasis pero afuera, en la zona donde se crean, una persona con afinidad a algún origen, podría obtenerlo al completo.

—Literalmente sería ser un dios…— Diego se quedó pensando.

—Los cuatro líderes tienen un Origen y por eso son tan poderosos— Señalo Edwina— Y nosotros tenemos ventaja pues estas chicas tienen afinidad a un Origen, incluso dentro de su Oasis así que…

—Será más fácil para las niñas mágicas obtener un Origen en el desierto blanco por su alta afinidad a un fenómeno natural, el problema es que no tendremos tiempo para entrenar con ese poder y podrían estar en desventaja…

—Los líderes dominan su Origen al cien por ciento, lo que llamábamos “alcanzar la verdad” y también cuentan con su gran intelecto.

—Pero nosotros también tenemos afinidad al viento, al fuego…— Comenzó Alejandro.

—Seré honesto con ustedes— Edwina se puso seria pero era difícil con restos de manzana en la boca— Los humanos pueden aspirar a obtener un Origen, si o incluso más de uno pero su cerebro podría no soportarlo. La gente se vuelve loca o muere en el mejor de los casos.

—Entonces…— Ulises hizo una mueca.

—Pero aquí de nuevo tenemos una ventaja— Edwina los tranquilizo.




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