Capitulo 2: El viaje

Antes de "El viaje" tenía que pedir a mi jefe un permiso o simplemente renunciar, no quería renunciar porque a pesar de que ese trabajo no fuera mi sueño, mi superiores se portaban muy bien conmigo y trataba de dar lo mejor de mi, tal vez era por eso que en la compañía todos me tenían aprecio.

Llego a la oficina de mi jefe y estoy muy nerviosa nunca creí que tendría que hablar con el por un motivo así, creo que ninguna persona le daría un permiso tan extenso a su empleado.

Tocó la puerta de su oficina digo nerviosa,
—Buenos días señor López, ¿Puedo pasar? Necesito hablar con usted.

Mi jefe dice de forma tranquila,
—Adelante Elizabeth.

Me siento frente a él y digo suspirando,
—¿Cómo se encuentra?

Mi jefe:
-Buen día señorita Elizabeth, todo está muy bien, cuénteme de qué quiere hablarme.

Sonrió genuinamente,
—Me alegra mucho, quería hablar con usted sobre algo que me sucedió y debo pedirle un permiso de viaje por 3 años.

El me ve sorprendido, pero pregunta curioso,
—Wow, eso es una gran sorpresa, dígame, ¿por qué necesita ese permiso? ¿De que trata ese viaje?

Lo veo y mis ojos se iluminan al empezar a contarle sobre mi viaje,
—Sinceramente desde que yo era una niña siempre he sentido pasión por la escritura, pero usted sabe en este país es imposible tener una vida más o menos con un trabajo así, entonces renuncie a mis sueños y decidí estudiar ingeniería, pero hace un mes participé en un concurso, la verdad lo hice por diversión, nunca me imagine ganando el primer lugar, me otorgaron una beca por 3 años, la consta por una carrera de escritura en Inglaterra y quería pedirle un permiso para estudiar, pero si usted no está de acuerdo yo entenderé, pero eso no quiere decir que abandonare el viaje, si no que renunciaré a este trabajo, no estoy haciendo esto porque usted o mis superiores sean malos, al contrario son muy buenos y amables conmigo. Pero yo quiero cumplir mis sueños y no creo volver a tener otra oportunidad cómo está.

Mi jefe me mira con ojos de admiración:
—Elizabeth estoy muy impresionado contigo, muchas felicidades por esta oportunidad que por tus mismos méritos obtuviste, sinceramente no quiero dejarte ir ya que eres una empleada muy eficiente, pero no quiero oponerme en tus sueños así que te daré la oportunidad de irte sin ser despedida o tener que renunciar, ¿cuándo te irás? Recuerda que tu suplente no está muy bien preparado así que lo único que te pediré es que lo entrenes lo más que puedas antes de partir y cuando regreses si aún quieres seguir trabajando para nosotros estaremos muy felices de recibirte.

Realmente no se que decir, el es un gran jefe, digo emocionada,
—Muchas gracias jefe, no sabe lo feliz que me hace escuchar esas palabras.

Llego el día en que me tocaba viajar a Inglaterra, estaba con sentimientos encontrados, muy feliz de por fin conocer la cuna de Shakespeare y estaba triste porque iba a un país completamente desconocido para mi, lejos de mi familia y viviría sola.

En el aeropuerto, mi mamá estaba igual que yo, estaba muy feliz de que al fin cumpliría mi sueño, pero estaba triste, su hija se iba a otro país y no a un país cercano se iba a 8338km de casa e iba a estar sola, a pesar de que tengo 23 años, para mis padres sigo siendo su bebé y en media hora su bebé se iría lejos.

Mi mamá me ve con ternura, dice con sus ojos tristes, pero también llenos de orgullo,
—Elizabeth, ¿llevas todo lo necesario?, ¿tu cepillo de dientes?, recuerda cuando llegues llámanos, no importa que ya sea de madrugada aquí, recuerda llamarnos.

La veo y realmente la extrañare mucho,
—Si mamá, no te preocupes está compañía que entrega becas es muy confiable, no hay de que preocuparse y sí, llevo todo lo necesario.

En ese momento vimos la hora y ya era tiempo de subir al avión, me despedí de mi familia, estaba llorando no era tan fácil dejar mi país, mi vida y familia por tantos años.
Cuando pase por seguridad, mi corazón se emocionaba más y más, cada paso que daba era más cerca de cumplir mis sueños.

En el avión estaba sentada al lado de una chica, la cual resulta que también se ganó una beca a Inglaterra solo que su beca era de pintura, hablamos y  teníamos mucho en común, su nombre es Alissa, es muy dulce y me sentí en confianza con ella.

Cuando bajamos del avión y estábamos en el aeropuerto de Inglaterra, la misma persona nos estaba esperando e íbamos al mismo edificio, ambas nos vimos y nos reímos, estábamos muy felices de estar juntas.

A las 7:00pm (hora inglés) llegamos al lugar donde viviríamos me despedí de Alissa, cambiamos información para ponernos de acuerdo en salir a conocer Inglaterra a la mañana siguiente.

En cuanto entré a mi habitación mire la hora en mi teléfono, aún no se había cambiado tenia 2:20am , estaba muy cansada por el jet lag, mire el cuarto donde me quedaría a dormir, no me fije en nada más y me fui a acostar, en la cama marqué el número de mi mamá para informarle que había llegado bien, no hable mucho con ella porque era de madrugada donde ella estaba.

Me desperté en la madrugada, inspeccioné mi habitación, era muy bonita, tenía paredes blancas, en mi cuarto tenía una pequeña cama que combinaba muy bien con la mesita de estudio, al salir de mi cuarto, tenía la sala, con un par de muebles grises, sus cojines rosas, era una combinación que nunca había imaginado pero se veía muy bien, también tenía un televisor de 42 pulgadas, caminé hacia la cocina, la cocina era hermosa, tenía una isla pequeña bien acondicionada, también tenía un pequeño balcón con vista hacia la calle, al ser una habitación de una persona era muy hermosa.

Aunque la beca era bastante completa, también me proporcionaron un chofer para que me ayudará a viajar hasta que estuviera acostumbrada al país.

En la mañana después del desayuno, salimos con Alissa a conocer todo lo que pudiéramos, había visto Inglaterra en fotos o en películas, pero verlo con mis propios ojos era otra cosa, era un país sumamente hermoso. Sin importar que teníamos un chofer para ambas decidimos subirnos en los autobuses de dos pisos, solo para saber lo que se sentía, era imposible que las personas a nuestro alrededor, no notaran nuestra emoción. En todo el camino Alissa estaba tomando fotos y pensando en dibujar ya que su carrera era pintura, en mi caso estaba imaginando historias de reyes y reinas para escribir.