Capitulo 11: No eres su tipo

Llegamos a un restaurante, se notaba que era de 5 estrellas, la verdad desde el momento que vi el auto de Andrew y Steven me arrepentí de aceptar la invitación de Steven, ellos no son chicos ordinarios.

Steven baja del auto y se dirige a abrirme la puerta yo estoy perdida en mis pensamientos, luego miro que alguien me da la mano, con bastante pena le agradezco su caballerosidad y bajo del auto.

Andrew no está muy lejos de nosotros y no se si es mi imaginación, pero siento que el está molesto.

Entramos al restaurante y nos dan una mesa VIP.
Andrew se sienta frente a mi y Steven se sienta al lado mío.
Para poder aclarar mis pensamientos y sentirme menos avergonzada, les digo que iré al tocador, me levanto y me alejo de ellos.

Andrew
No se que sucede conmigo, pero no soporto ver a Steven siendo tan cariñoso con Elizabeth.

El no es un chico que trate enserio a las mujeres, así que cuando ella se dirige al tocador decido preguntar,
—Steven, ¿qué estás tratando de hacer con Elizabeth?

El se recuesta en la silla y me responde con esa sonrisa de idiota,
—No lo sé aún, ella es una chica bastante bonita.

Frunzo el ceño, detesto que el se porte así, pero ahora siento que es diferente, no quiero que haga sentir mal a Elizabeth, así que decido advertirle,
—No juegues con ella.

El me ve con una cara confundida y dice
—¿Te gusta ella?

Para evitar golpearlo, sin responder su pregunta, me retire de donde estábamos.

Salgo de nuestra mesa y miro que Elizabeth está parada no muy lejos de donde estoy, se ve que está un poco incomoda y pensativa.
Sin pensarlo me acerco a donde ella está y le pregunto,
—¿Te sientes bien?

Ella me ve sonrojada,
—No es nada, solo que no había venido a un restaurante tan hermoso.

No se porque, pero no quiero que ella se interese en Steven, digo,
—No te ilusiones con Steven, el no trata en serio a las chicas.

Me mira con su cara confusa y me pregunta,
—¿A qué te refieres?

Digo poniendo en mal a Steven, no se porque estoy haciendo esto,
—Steven no toma enserio a las chicas, solo le gusta divertirse con ellas.

No se que dije que fue tan gracioso para ella, pero comenzó a reír y me pregunta
—¿Crees, que me gusta Steven? La verdad el no es mi tipo.

Su respuesta me hace sentir feliz y tranquilo, la verdad no se que tiene esta chica, que puede producir tantos sentimientos en mi.
—Está bien, volvamos a la mesa.

Volviendo a Elizabeth
Me dirijo hacia la mesa con Andrew, no se qué pasó hace un momento, pero ahora se nota menos molesto.
—Al fin llegan dice Steven, creí que habían decidido escapar juntos.

Con mis mejillas nuevamente rojas,
—No, no es así, solo nos encontramos en el camino.

Veo a Andrew sonriendo, con una sonrisa de satisfacción y muy linda,
—No estés celoso Steven, "no eres su tipo."

Steven con mucho asombro dice
—¿De qué estás hablando? Tu ni siquiera sabes lo que ella piensa.

Justo antes de que pueda decir algo traen la cena, hablamos un poco.

Al terminar, Steven se ofreció a llevarme a casa, pero en el momento que estaba por abrir la puerta de su auto, recibe una llamada, frunciendo el ceño
—¿Es necesario qué vaya ahora?

No puedo escuchar lo que la otra persona responde pero puedo imaginármelo.
—Está bien iré en un momento termina la llamada Steven.

Ve a Andrew y dice,
—Andrew, surgió algo ¿puedes llevar a Elizabeth?

Muy avergonzada por molestar a Andrew
—No hay necesidad, puedo buscar un taxi.

—Tonterías, no dejaré que te marches sola dice Steven, de todas formas Andrew, no está ocupado.

Andrew no dice nada, lo que me hace sentir muy incómoda, antes de rechazarlos nuevamente, Andrew dice de forma exigente,
—Sube, dime tú dirección.

Respondo con mi voz temblorosa,
—Mmm, este, de verdad no es necesario que me lleves.

El sonríe
—No es molestia.

Nos despedimos de Steven subo al auto de Andrew, en el camino lo único que dije fue mi dirección, para caer en un silencio aterrador.
Mi apartamento no estaba muy lejos del restaurante, pero sentí que el viaje fue eterno.

Al fin llegamos pienso.
Me despido de Andrew y le agradezco.

—Oye.—dice el.

Me doy la vuelta, lo veo de manera confusa,
—¿Qué, sucede?

El sonríe y dice,
—Fue muy divertido cenar contigo.

Antes de que pueda responder, el sube la ventana del auto y se marcha.

Wow, no se que ah pasado en este momento, ese chico si que es extraño, no puedo entenderlo, primero parecía molesto, luego relajado y ahora dice que se divirtió.
No se que tiene pero hace que se me ponga la piel de gallina cuando me ve.

Entro a mi apartamento, cierro la puerta tras de mi y mi corazón está un poco acelerado, pensando en ese chico pelirrojo, para distraerme le escribo a Alissa,
—Alissa, ¿estás en casa?

De manera casi inmediata, Alissa responde
—Hola, Elizabeth, hace poco llegue ¿Qué sucede?

Como era viernes decidí decirle a Alissa que se quedara a dormir.
—¿Qué te parece una noche de chicas?

Alissa responde,
—Llegó en un momento, llevaré algunos dulces.
No le seguí contestando, me dirijo al cuarto para ponerme cómoda. Al momento que salgo a la sala, Alissa está tocando la puerta.

Después de estar hablando y riendo con Alissa, le cuento lo que sucedió.
Con una cara de asombro y con una sonrisa astuta dice
—Ahora sabes su nombre, esto si que es emocionante.

—Si lo se, pero no pude entenderlo, es un chico bastante extraño.

Sabes, dice Alissa,
—Seguro que le gustas.

—¿Qué? Cómo puedo gustarle, solo lo he visto 2 veces, la primera fue cuando me ayudo y no hablamos, esta otra vez fue en una cena, tampoco es que habláramos mucho.