Han pasado tres meses y he subido mucho de peso, todo es culpa de Andrew, no me deja hacer nada y siempre le pide a las sirvientas que preparen comida deliciosa para mi, cada antojo que tengo me lo consiente, la verdad no me quejo, pero por Dios no estoy postrada solo estoy embarazada.
La boda de Alissa y Jeremy es el sábado.
Veo que Andrew viene bajando las gradas de la casa mientras yo veo televisión en la sala, así que me levanto rápidamente con mi vientre que ahora si se ve abultado, cruzo mis brazos y digo molesta,
—¿Qué estás haciendo?
Andrew se sorprende,
—Bajo las escaleras, porque voy a trabajar.
Mis hormonas comienzan a jugar con mis sentimientos y lágrimas comienzan a correr por mis mejillas,
—Claro, porque ahora estoy gorda y fea, quieres ir a trabajar, para estar con tu estúpida secretaria de cuerpo perfecto y de hermoso rostro.
Andrew frunce el ceño, pero me abraza y me acaricia el cabello,
—Lizzy, tu no estás fea, te vez hermosa con tu embarazo, a demás despedí a la secretaría la semana pasada.
Me separo de él, mientras hago un puchero,
—Andrew tu prometiste que trabajarías en casa y también prometiste que hoy irías de compras conmigo porque el sábado es la boda de Alissa, no tengo que ponerme, todo me queda mal porque estoy gorda.
Termino de decir, mientras continúo llorando.
Rápidamente mi tristeza cambia a enojo,
—Sabes que, vete, ve a trabajar, me iré de compras sola y tal vez encuentre a un chico guapo en el centro comercial y lo enamoré para que tu no tengas que lidiar más conmigo.
El me ve a los ojos de manera seria,
—Sabes que desaparece a cualquier chico que se acerque a ti.
Me cruzo de brazos,
—Eso es injusto, Andrew, sabes que, llamaré a Alejandro, le diré que no me quieres acompañar a comprar ropa.
Andrew toma mis manos,
—Cariño no llames a papá, iré de compras contigo, solo necesito ir a la oficina un momento.
—Está bien, cuídate.
El me besa y se aleja de la casa, salgo a la puerta de la entrada a despedirlo, antes de irse también besa mi vientre y se despide de nuestros hijos,
—Volveré pronto, te amo y a nuestros hijos.
Digo adiós con mi mano, mientras el sube al auto y sale de nuestra casa.
Últimamente me he sentido muy malhumorada, Andrew no se como me ha soportado, no se de donde ha sacado la paciencia para no enojarse conmigo, pero todo me molesta, me molesta que me hable, me molesta que no me hable, me molesta que respire cerca de mi, me molesta que duerma conmigo, pero también me molesta que no duerma conmigo, según tengo entendido este mal humor es producto del embarazo y las hormonas.
Ha pasado media hora y Andrew no me ha escrito, ni tampoco me ha llamado, frunzo el ceño y le hago rápidamente una videollamada, me sorprende que contesta pero mantiene su video pausado, siento que toda la tranquilidad que tenia, se me fue en un instante y digo casi gritando y muy molesta,
—Andrew Lindsor, ¿por qué demonios no puedo verte?
Andrew
Estos meses han sido muy cansados, la verdad estoy muy feliz porque seré padre, pero Elizabeth ha estado muy sensible y de mal humor, según el médico son consecuencias del embarazo.
Hace días dice que no tenia que ponerse, así que decidí buscar un diseñador y mandarle a hacer un nuevo guardarropas, pero no sabía cómo salir de casa, así que le dije que iría de compras con ella luego de salir del trabajo, pero en realidad no iré a la oficina, iré a ver el nuevo guardarropas de mi esposa, mientras estoy observando la ropa, Elizabeth me hace una video llamada, por Dios, ¿Cómo le hace esta mujer, para saber cuando le estoy mintiendo? Comienzo a sentirme nervioso, contesto pero no activó mi cámara, rápidamente dice muy molesta,
—Andrew Lindsor, ¿por qué demonios no puedo verte?
Trago saliva y estoy tratando de inventar una excusa, ella vuelve a hablar,
—Si no activas tu cámara en este instante, no me encontrarás en casa cuando vuelvas.
Tengo la excusa perfecta,
—Lizzy cariño, estoy en una reunión de trabajo y los inversionistas están escuchando todo.
—Ellos ya me conocen, entonces, ¿por qué no activas tu cámara?
Suspiro, me acerco a una puerta que veo a lo lejos de mi, me acerco y activo la cámara,
—Hola cariño, ¿ya puedes verme?
Ella me sonríe dulcemente,
—Si, amor dijiste que vendrías pronto, para ir de compras, pero ya paso media hora.
Para mi desgracia, cuando estoy a punto de decirle que llegaré en quince minutos, de la puerta sale una chica en toalla, ella me sonríe amablemente, me acabo de dar cuenta que donde estoy es en los vestidores de chicas, Elizabeth me sonríe de una manera que me aterra,
—Amor, puedo explicar... antes de terminar la palabra Elizabeth termino la llamada.
Mi corazón duele demasiado, no puedo creer que vi a Andrew con una chica en toalla, llamo a Arthur y le pido que me lleve a donde los padres de Andrew, llego a la casa de ellos llorando, Valentina se sorprende al verme tan triste,
—Lizzy, ¿sucede algo?
Ni siquiera puedo hablar por el llanto, por el dolor que siento, mientras estoy llorando fuertemente, Sofía se acerca a donde estoy,
—Lizzy, ¿Qué sucede?
Digo entre sollozos,
—Andrew, ya no quiere seguir conmigo, "se aburrió de mi."
Alejandro se acerca,
—¿De qué hablas? ¿Que hizo Andrew?
Me acerco a él,
—Andrew ¿fue a trabajar hoy?
El me ve sorprendido,
—No, Andrew dejo de trabajar en la oficina desde que supo de tu embarazo de gemelos.
Con sus palabras no soporto más y sigo llorando, Sofía acaricia mi cabello,
—Tranquila, dinos ¿Qué pasó?
Les conté lo sucedido, Valentina y Alejandro inmediatamente se molestan, Sofía solo me tranquiliza, pero al igual que los demás está molesta, Alejandro llama a Andrew, pone el alta voz para que podamos escuchar lo que Andrew tiene que decir,
—Hola, papá, ¿Qué sucede?
Editado: 11.06.2022