14-Propositos

Flashback

Esto ocurrió hace quince años.

Heichin había solicitado a su agente unas semanas para dedicarse a proyectos varios, al concluir el plazo este fue a visitarle y lo encontró en un estado lamentable.

-¿Qué te está sucediendo?, tus vecinos dicen que has estado como loco buscando a una mujer, ¿de quién se trata?

-No puedo decirlo.

-Soy tu agente, por contrato debo saber todo lo que te perturbe.

-No recuerdo haber leído esa parte.

-¿Cuánto llevas sin dormir?

-Dos…tres días…pero ya voy a parar.

-¿Sabes?, me gusta pensar que también somos amigos-Heichin le dedico una mirada vacua-algo, ¿no?, quisiera que confiaras en mi como para dejar que te ayude.

-No voy a suicidarme.

-¿Qué?, ¿Quién hablo de…?-resoplo y se puso a recoger el desorden-¡Dios!, artistas, son todos unas prima donas dramáticas.

-¿Qué haces?

-Te ayudare aunque no quieras, soy tu agente, ahora ve y date un baño… ¡Anda!, ¿o quieres que me encargue de eso también?

Matt Harris le llevaba diez años pero no le había conocido esa faceta ruda hasta entonces, obedeció, tras la ducha le hizo tomar la primera comida decente que hacía en días y le mando a la cama, donde cayó fulminado de agotamiento.

Ruidos en el estudio le despertaron  altas horas de la noche.

-¿Matt?, ¿sigues aquí?

Había una sombra revolviendo sus cosas, en lo que se dio cuenta de que la mitad era blanca esta atravesó la sala y le levanto del cuello.

-¡No, aguarda!

-¡Pintura!-bramo, por medio de un globo de texto sobre su cabeza.

-¿Eso es…?

-¡Necesito pintura!, ¡Se está diluyendo, incluso dentro de mí!, ¡Ella va a morir!

-¿Ella?-por fin lo entendió-¡Suéltame!, ¡Te la daré!

Corrió a su armario de suministros y le dio toda la pintura en acuarela que tenia, Ink casi destrozo los botecitos y pomos para echarse la pintura encima, su cuerpo la adsorbió al instante, Heichin se hinco a su lado para observarla, por su parte Dreken se le había bajado para subirse a Picazo y proteger a su camada.

-¿Te…se encuentran bien?

-Puedo obtener tinta con facilidad pero no pintura, no supe donde más ir.

-Estaba muerto de preocupación por ustedes.

-¿Quién eres?-pregunto, a él le sorprendió que no lo supiera.

-Soy Heichin, yo te dibuje y la pinte a…a ella, la otra… ¿puedo verla?

-Nos trajiste a este mundo, ¿Por qué?

-Fue un accidente, lo hizo esto-le mostro su medallón-no sabía que pasaría, pero están aquí ahora, deja que las ayude, podría encontrar un modo de separarlas.

-¿Separarnos?

-Y regresarles donde pertenecen.

-No puedo volver todavía-se levanto-tengo asuntos pendientes.

-¿Qué asuntos?, ¿de qué hablas?

-En este mundo hay seres viles, arañas, mi misión es exterminarlas.

-¿Arañas?, yo puse eso en tus hojas-Ink le miro-pero es cierto, así llamaba mi madre a esa gente.

-¿Qué sabes?, dímelo.

-Primero déjame verla-exigió.

Ink no aceptaba ordenes pero lo considero un acuerdo por la pintura y la información y realizo el cambio, Heichin sitio como se le aceleraba el corazón.

-Hola, ¿te sientes mejor?-ella asintió-¿no puedes hablar?-negro-¿segura?, ¿Por qué no lo intentas?

Abrió la boca y la movió como si cantara, no producía ningún sonido pero resultaba adorable.