El tío Salvatore

El tío Salvatore me dijo "Muy bien sobrino, el abuelo estaría orgulloso de ti", realmente me cuesta creer que el abuelo se enorgulleceria de eso.

Mi tío me mandó a matar a otros sujetos, todos de la familia Cipriacci, todos ellos fueron los culpables de la muerte de mi abuelo.

Mis tíos tenían problemas entre ellos, siempre vinculados al control de la familia, una vez el tío Salvatore y el tío Antonio llegaron a golpearse.

La familia se dividió entre los que apoyaban a Salvatore y los que apoyaban a Antonio, yo estuve del lado de Salvatore.

Pronto fui asesinando a miembros de mi propia familia, lo curioso es que no era tan difícil hacerlo, ya era un asesino de calibre en la familia, ya era un objetivo peligroso.

Mi tío Antonio junto a mis otros parientes fueron asesinados por Salvatore, el decía "Antonio no era capaz de sostener a la familia, era un hombre débil para una vida de mierda como lo es en la mafia".

Durante este proceso Dalila siempre me cuestionó el unirme a la mafia, ella continúaba su carrera como periodista, sin embargo ella era incapaz de sostenerla monetariamente así que pague su carrera, ella era hermosa, era como una sirena que me encantaba con su voz aunque sus amigas eran muy distantes conmigo.

Esa belleza de Dalila la presente ante la familia y posteriormente le propuse matrimonio una vez calmada la situación con Antonio.

Ella aceptó casi de inmediato al ver el anillo de diamantes que le compre, el día de la boda fue según la tradición, una boda donde se podía ver el lujo e influencia de mi familia, políticos de alto calibre, actores, cantantes famosos e incluso mi tío Salvatore pudo regalarme un panda de mascota después de que le comenté que ese era el animal favorito de Dalila.

Fue un desfile de lujos y excesos, pero siempre atentos a un posible ataque de los Cipriacci.

Nuestra luna de miel fue en China, un país interesante para mi amada, conocí y aprendí cosas de ahí, Salvatore me pidió pasar desapercibido o mi prescencia podía molestar a la mafia local.

Fuimos a la muralla, la ciudad prohibida y sobre todo comimos mucha comida, claro también tuvimos mucha intimidad pero no era como que jamás hubiera probado su cuerpo, conocía ya su sabor, su textura, tuvimos demasiado sexo pero realmente no sentí nada, creo que es exagerado decirlo siendo que llevaba 2 días de casados pero creo me empecé a aburrir de ella.

Al volver a Estados Unidos el tío Salvatore volvió a utilizarme como asesino, la familia Cipriacci se hizo más fuerte, asesiné a más personas, al inicio mataba a los responsables de la muerte de mi abuelo, ahora eran completos desconocidos, también la sensación cambió paso de ser gratificante a sentirse igual a un trabajo.

La mafia cambia tu forma de ver la vida creía que la vida era hermosa, pero es una mierda.

Mientras estaba solo en casa una de las amigas de mi esposa Margaret entró, me empezó a intentar seducir y finalmente la besé.