Orquídeas azules.

¿Su familia tiene una historia? La mía tiene una muy particular que pocos han escuchado y que si alguien más la oyera nos llamarían locos.

Hace muchos años, no me pregunten cuántos, una criatura llena de maldad y oscuridad se paseaba por las calles esparciendo el caos por dónde quiera que fuera, se dice que el pasto del suelo que pisaba se podría al tener contacto sus pies sucios, el cielo comenzaba a oscurecer cuando se acercaba a una nueva ciudad. Nadie sabe cómo se llamaba o lo que era antes de convertirse en "el lich", eso gritaban las personas cuando lo veían acercarse.

-Tus días de atormentar a la gente de esta ciudad han acabado lich- exclamó Dorian Blackwood mientras desenvainaba su espada

La batalla fué legendaria, casi todo el pueblo fue destruido en el transcurso, pero al fin, al cabo de 7 días el bien logró triunfar sobre el mal, la espada de Dorian atravesó de un el corazón de la bestia, el lich cayó rendido sobre el suelo mientras que las nubes negras en el cielo desaparecían dejando ver un color celeste brillante.

- disculpe, señorita Vega, creí que la tarea era traer la historia real de nuestra familia- comentó la odiosa Sarah seguida de una sinfonía de risas de los compañeros

-¿Real como tus tetas operadas?- se escuchó la voz de Lucien con una sonrisa arrogante mientras todos en el aula estallaban en risas nuevamente

-muy bien fue suficiente de burlas, Malakai regresa a tu lugar, tienes una C por al menos traer la tarea- dijo la señorita Vega mientras yo caminaba hasta el asiento que compartía con Lucien

-no hagas caso Kai, son todos unos imbéciles que no saben apreciar la verdadera literatura- dijo el joven

-lo sé, la mayoría solo toma esta clase por los puntos extras, manda ridículos- me queje viendo de reojo a todos

Lucien y yo hemos sido amigos desde hace años, prácticamente desde el vientre, no sé que sería de mi sin el en esta escuela, no solo me apoya en todo sino que también me defiende de todos los que me molestan a diario, entre ellos Sarah Beckett y su ejército de tarados, a veces me cuesta creer que alguien como ella pueda estar a lado de alguien como él...

-tierra llamando a Kai, tierra llamando a Kai, ya deja de babear por Dustin o vas a mojar mis zapatos- se ríe mientras me daba palmadas suaves en la cara sacándome de mi trance

-no lo...no lo estaba viendo ¿Qué dices?- pregunto mientras sacudía la cabeza por las palmadas que me había dado

Estábamos tan metidos en nuestra conversación que no noté cuando Tara le susurra algo a uno de sus seguidiotas el cual luego de eso lanza su pelota en nuestra dirección, la pelota aterrizó justo en medio de nuestras bandejas de comida haciéndolas volar por el aire, tirando la comida sobre nosotros. Todos en el patio comenzaron a reír mientras Lucien maldecia y amenazaba al idiota que hacía lanzado esa pelota. Por mi parte simplemente me camine hasta los baños para poder limpiarme la cara en silencio, odiaba a todos en esta escuela ¿Por qué eran tan malos con la gente que nunca les había hecho nada?

-¿Estás bien?- escuché una voz preguntar detrás de mis espaldas

Mi corazón se aceleró al escuchar a Dustin hablarme, ¿Por qué me estaba hablando? ¿Por qué precisamente a mí? Estoy feliz porque me esté hablando pero al mismo tiempo siento como si el estómago estuviera por salirse de mí boca al mismo tiempo que...

-disculpa, ¿Qué decías?- pregunté saliendo de mis propios pensamientos al darme cuenta que seguía ahí, parado justo frente a mí hablándome

-que me disculpo por parte de Sarah, ella puede ser mala con las personas que no son afines a ella- intenta defenderla, como siempre

-si no te preocupes, además solo fue una broma boba, nada que no pueda manejar- mencioné restándole importancia mientras limpiaba mí cara

-¿Seguro? Sabes que aunque ya no hablemos seguimos siendo amigos y me preocupo por ti- correción, dejamos de ser amigos hace mucho tiempo, solo que el ni siquiera se da cuenta de eso

Al terminar aquella incómoda charla salí del baño escuchando la campana, indicando que había llegado la hora de regresar a casa, mientras camino lo veo alejarse de mí hasta llegar con Sarah, rodeándola con el brazo mientras caminan juntos hasta su auto y desaparecen de mi rango de visión. A veces me pregunto que se sentiría ser ella, tener a todos en el puto mundo comiendo de tu mano, saber que puedes ser cruel con la gente y que nadie te dirá nada, tener al chico perfecto, con la sonrisa mas bella de todas y su..

-¿Kai me estás escuchando siquiera?- escuché la voz de Lucien de fondo trayendome de nuevo a la realidad, había vuelto a divagar mentalmente y no había escuchado nada de lo que dijo

-perdon estaba distraído- musite algo apenado, dirigiendo la vista hacia mi amigo el cual solo me da una sonrisa

-siempre lo estás, a veces pienso que tú lugar no es en la tierra, sino en las nubes, ya que ahí está tu cabeza siempre- solté una risa ante aquel comentario, Lucien siempre sabía cómo hacerme reir- pero ya hablando en serio, no entiendo como Dusty puede ser novio de esa tipa

-según el no es culpa, que fué criada así y ya- dije mientras tomaba una piedra en mi mano para después lanzarla lejos

-lleva diciéndote eso desde hace años, Kai tu sabes que te quiero pero creo que lo mejor esque te hagas a la idea de que... Dustin no va terminar con esa perra nunca, seguirán juntos hasta la graduación y después de unos dos o tres años se casarán y tendrán bebés fastidiosos- a veces Lucien podía llegar a ser demasiado sincero, aunque no estaba diciendo nada que no supiera

-lo sé ¿Pero soñar no cuesta nada verdad?- reí esbozando una sonrisa divertida a lo cual Lucien me rodea con sus brazos en un abrazo grande

-mi dulce Kai, eres demasiado para este mundo ¿Lo sabes verdad?- pregunta sonriendo, respondí asintiendo con la cabeza

Una vez llegue a casa procedí a buscar a mí padre, sabía perfecto dónde estaría, en el jardín removiendo la tierra y cuidando de sus orquídeas, esas eran las favoritas de mamá, o al menos eso me contó el. No me equivoqué, ahí estaba el sacando las orquídeas para poder reubicarlas.