Niña pervertida

Capítulo 18

Entre la multitud de gente pude ver a Tyler y corrí a abrazarlo, me estaba esperando muy contento y después de un cálido abrazo tomo mi valija y fuimos a comer algo.

— Estas contenta de estar de vuelta?

— Sii mucho!  Extrañaba mi país.

— Vas a quedarte en mi casa hasta que lleguen tus padres?

— Si, claro. Pero me gustaría poder darle una sorpresa a mis otros abuelos.

— Genial, seguro van a estar muy felices.

En ese momento suena el celular de Tyler, era papá para asegurarse de que este bien, hablamos unos minutos y luego corto.

Fuimos a la casa de Tyler y mis abuelos me recibieron muy felices y con ese amor incondicional que caracteriza a los abuelos, charlamos un rato me preguntaron que tal el viaje etc y luego me llevaron a mi habitación. Me di un baño y le escribí a Alex.

Hola Alex, no te olvides de llevar lo que te pedí a Tyler, a las 16 hrs en el café de la terraza del shoping.

Hola Juli, quedate tranquila que voy a ir. Como estas?  Te extraño mucho.

No respondí el último mensaje, me arregle lo más linda que pude y pedí un taxi que me llevara al shoping, mis abuelos y Tyler creían que iba a darle una sorpresa a mis otros abuelos y tíos, asique me dejaron salir sola aunque en parte no mentía.

Estaba muy nerviosa, como si fuera a verlo por primera vez, y empezaron a surgir muchos pensamientos negativos, como que tal vez no se alegrará de verme o que estaba la posibilidad de que estuviera con Julia etc pero trate de no pensar y baje del taxi, fui primero a un tocador, me retoque el brillo labial me acomode la ropa y el pelo y seque mis manos que no paraban de sudar por los nervios, mire la hora ya era 16:15 y en ese momento recibí un mensaje de Alex.

El idiota de Tyler no llego, avisale que me voy a ir pronto. No tengo tiempo que perder.

Sin pensarlo dos veces me subí al primer ascensor hasta la terraza, muy nerviosa con miedo a que se fuera, cuando llegue mire tímidamente a varias mesas pero el no estaba en ninguna. Me sentí triste y desilusionada y camine hasta la barandilla a contemplar mi amada ciudad, la que tanto había extrañado mientras una suave brisa despeinaba levemente mi cabello, luego de unos instantes me gire para retirarme y mis ojos se iluminaron, ahí estába el, más lindo que nunca, con su ropa siempre a la moda y lentes de sol color negros, miraba su celular casi con fastidio y yo lo miraba sonriendo, el tiempo pareció detenerse en el instante que guardo su teléfono en el bolsillo y lentamente levanto su cabeza y su mirada se encontró con la mia, se sacó los lentes de sol y me miro incrédulo por algunos segundos que fueron eternos, yo solo sonreía paciente como disfrutando cada momento.
Pude ver su hermosa sonrisa dibujarse en su cara y corrió a abrazarme, con tanta fuerza y ternura como si tuviera miedo a que volviera a irme.

Si supieran lo que había anhelado ese abrazo, mi alma se lleno de alegría me sentía completa sintiendo su calor, su amor, su perfume... Era como un sueño,el más hermoso de los sueños.

— Hola...

— Hola princesa!!  No puedo creer que estés acá!  Es como un sueño.

— Pienso lo mismo ja, te sorprendí?

— Si, muchísimo! Estas hermosa y alta... Ya no sos la niña que se fue hace un año.

— Jaja no te pongas nostálgico. Te extrañe muchísimo...

Me volvió a abrazar contra su pecho mientras besaba mi cabeza.

— Gracias por volver, me hacías mucha falta Juli, si supieras lo que te extrañaba y te necesitaba.

Nos sentamos a tomar algo y nos pusimos al dia, le conté porque había viajado sola, que mamá esperaba un bebé etc y el no paraba de mirarme como si no pudiera creer que estuviera ahí con el.

— Porque me miras así?

— Es que no puedo creer lo mucho que creciste, lo diferente que estas, parece que hubiesen pasado años...

— Solo fue un año Alex, y vos querías que me fuera.

— Yo jamás quise eso, en realidad no creía que te fueras a ir tan lejos y... Tanto tiempo.

Me pare frente a él y levanto su miraba.

— Te vas a quedar mirándome o me vas a invitar a tu casa?

— Ohh perdón si, si claro a donde quieras.

Pago la cuenta y caminamos hasta el estacionamiento donde tenia su auto, no había nadie en el lugar y solo se escuchaban nuestros pasos, se detuvo a sacar la llave de su bolsillo y yo me apoyé en el auto, el me miraba sonriendo.

— acércate.

Se acerco a mi y lo abraze suavemente, luego desprendi los primeros botones de su camisa, mi miro extrañado.

— Vos me prometiste algo.

Le susurre suave al oído y el cerro los ojos y pareció estremecerce mientras terminaba de desprender su camisa y contemplaba su torso musculoso.

— Que querés?

Pregunto con la voz entre cortada.

— El primer abrazo de los tantos que me vas a dar... Ya que me lo prometiste verdad?

Escuchaba mis palabras como hipnotizado, termino de sacarse la camisa y la dejo caer al suelo, al mirarlo no pude evitar morder mi labio inferior y el se abalanzó a mi envolviendome con sus fuertes brazos.



#44692 en Novela romántica
#12060 en Joven Adulto

En el texto hay: tio y sobrina, amor proh, tabu

Editado: 16.07.2018

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.