Capítulo 8:

Narra Akane:

Después de un rato nos fuimos a casa junto con Jazz, llegamos y ahí estaba Ana, Liam, Santi y Gabi, Liam se iba a acercar, pero le hice una señal de que no lo hiciera, no quería hablar con nadie, ni siquiera quería molestar a mi hermana en esto, llevábamos un par de días juntas y ya la había hecho pasar rabia muchas veces.

Subí a mi habitación y cerré la puerta con seguro, me tiré sobre la cama y tomé mi móvil, entré en Facebook y había una solicitud nueva de amistad, la vi y era Evan, la acepté ya que más daba, Hans podía hacer lo que quisiera con su vida, y yo haría lo que quisiera con la mía.

Seguí mirando fotos en las que estaba etiquetada, publicaciones de amigos, etc.

Estaba en eso cuando me llega un mensaje de Evan.

E: Hola preciosa, ¿cómo estás?

Aka: Hola, bien ¿y tú?

E: Bien, aquí pensando en una señorita muy linda que conocí ayer.

Aka: Jaja ¿en serio? – digo creando misterio

E: Sí, es muy linda, risueña, pero al parecer le gusta un idiota – ¿Seré yo?

Aka: ¿A sí? y ¿la conozco? – digo curiosa

E: Sí, creo que tú la conoces muy bien.

Aka: No logro descubrir quién es. – digo haciéndome la desentendida

E: Tú, eres tú la chica que roba mis pensamientos, la que no deja trabajar tranquilo a mi corazón y mente.

Aka: Que lindo Evan.

E: Tú eres linda. Oye una pregunta.

Aka: Sí, dime.

E: ¿Cómo se comportó ese tipo contigo anoche?

Cuando me hizo esa pregunta comencé a recordar lo que había sucedido anoche, Hans y yo, nuestro beso, lo hermoso que se sintió.

E: Akane, ¿estás? – Aah Evan

Aka: Sí, aquí estoy, Hans se comportó muy bien conmigo, no te preocupes.

E: Ah, muy bien, perfecto. ¿Qué harás mañana?

Aka: Ir al instituto – dije obvia.

E: Aparte preciosa.

Aka: Nada, sólo ir al Instituto y volver a casa.

E: ¿Quieres que vaya por ti al Instituto y vayamos por sushi, pizza o lo que quieras?

Aka: Amm, no tengo ánimo de nada a decir verdad Evan, no quiero ser pesada, pero no tengo ánimo.

E: Por eso, para que subas tu ánimo, vamos, ¿Qué dices?, sólo será un rato

Aka: Ok, pero sólo un rato

E: Perfecto, entonces mañana paso por ti a tu Instituto.

Aka: Bueno, nos vemos.

E: Nos vemos mañana hermosa, cuídate.

Terminamos de hablar y salí de Facebook.

Me apoyé en mi cabecera y cerré los ojos, desperté después de un rato, alguien tocaba a mi puerta, ¿Quién será?

Fui a abrir la puerta y ahí estaba Santi.

S: Hola hermana

Aka: Hola Santi, pasa.

S: Permiso – dice entrando.

Aka: ¿Qué te trae por acá?

S: La verdad vengo a pedir disculpas, Gabi se comportó mal contigo y fue por mi culpa – dice sentándose en mi cama

Aka: Tranquilo Santi, no fue tú culpa, ella se comportó mal conmigo, no tú – me siento a su lado

S: Bueno, en parte es verdad, pero igual perdón – me mira y acaricia mi cabello – es verdad lo que dijo Liam, tú eres demasiado buena.

Aka: Gracias Santi, espero que de aquí al futuro no ocurran más problemas.

S: Eso te lo aseguro, ahora vamos a comer algo – dice tomando mi brazo.

Bajamos al comedor y tomé una banana del cesto de fruta, y Santi una manzana, luego fuimos al sillón y conversamos de la vida.

Al otro día me fui a clases con Andrea, me dijo que Lucy estuvo en su casa hasta muy tarde.

Al llenar al Instituto vi de inmediato a Issa, caminó hacia nosotras.

Is: Hola chicas, ¿Cómo están? – se sienta a nuestro lado

Aka: Se puede decir bien, ¿y tú? – la miro atenta

Is: Bien, un poco preocupada por ti – tuerce el gesto – pero bien.

Aka: ¿Por mí? – alzo una ceja – ¿Qué pasa?

Is: Como ya sabrás, Lucy está visitando mucho a Hans desde que llegó y pienso que eso te molesta ¿o no? – me mira como esperando una respuesta

A: Hasta la pregunta es estúpida – dice enojada – ¿qué crees tú?, es tú hermana la que se está metiendo en esa amistad.

Is: ¿Y por qué tú hermanito no le dice que no vuelva más? – dice enojada también – ¿no será porque le gusta?

A: ¿y no será que tú hermana es una suelta? – dice acercándose demasiado a Issa