Narra Akane:
Caminamos a un asiento, nos miramos, pero no decimos nada, Hans se acerca a mí, mi fuerza de voluntad estaba pérdida, no me movía, ni para acercarme, ni para alejarme.
H: Akane, ¿Puedo besarte por última vez antes de dejarte ir? – sus ojos se llenaban de lágrimas
Aka: Sí es lo que necesitas para cerrar éste ciclo... hazlo – cierro mis ojos y siento su respiración en mi rostro, se acerca y siento el contacto de sus labios en los míos.
Las mariposas comienzan a revolotear nuevamente en mi estómago, sigo el beso y lo tomo de la nuca enredando mis manos en su cabello, se siente tan bien besarlo otra vez, acaricia mi espalda y me acerca más a él.
Hans seguía siendo el dueño de mi cariño, el dueño de mis pensamientos.
Termino el beso y lo miro.
H: No puedo dejarte ir... – susurra junto a mis labios
Aka: Pero debes hacerlo – digo con un nudo en mi garganta
H: Ven, vamos – me toma de la mano y me lleva de vuelta al auto – súbete, nos vamos.
Aka: ¿Hans que pasa? – lo miro atenta
H: Nos vamos – me mira – súbete – me subo y parte nuevamente, pero no sigue el camino a casa.
Aka: ¿Hacia dónde vamos? – miro por la ventana
H: A un lugar especial – dice sin dejar de mirar hacia adelante.
¿Dónde íbamos?, condujo por cerca de media hora y llegamos a una playa, ¿Qué hacíamos en una playa?, nos bajamos y fuimos a la playa, se hacía tarde, la noche estaba por caer.
Aka: Hans debemos volver...
H: Sólo espera un poco – me toma de la mano y comienza a caminar en la arena, lo sigo – siempre quise traerte aquí, para que viéramos el atardecer.
Aka: ¿Por eso me trajiste aquí? – lo miro tratando de entenderlo
H: Así es – no deja de mirar el horizonte – ven siéntate, se sienta y toca la arena, me siento junto a él.
Aka: ¿Qué pasa Hans? – lo miro confundida
H: No te quiero perder – se gira a mirarme – no quiero que alguien más te bese, te abrace y diga que te ama.
Aka: Eso es egoísta de tu parte, tú tienes a Abbi, es tu novia y yo al contrario estoy sola...
Se acerca a mí y me besa, no deja que siga hablando, le sigo el beso, no puedo resistirme a él, nos seguimos besando, y él me bota en la arena, lo miro hacia arriba, me mira con ternura, se pone sobre mí, pero sin aplastarme, se sostiene sobre sus brazos, me vuelve a besar, enredo mis dedos en su cabello, comienza a besar mi cuello, reprimo un suspiro que se convierte en gemido, se deja caer sobre mí, esto era una locura, pero quería ser parte de ella, no lo detuve.
2 horas más tarde:
Me sentía mal, estuve con Hans, y no tuve remordimiento alguno, pero ahora sentía que le había fallado a Abbi, porque ella es la pareja de Hans, no yo... él es hombre, no siente remordimiento alguno.
Encerrada en mi habitación, mirando mi ropa, me sentía en parte sucia.
Narra Hans:
Ya estoy en casa, acabo de llegar de la playa, estuve con Akane y fue increíble.
*flashback*
Estaba debajo de mí, se veía hermosa, sus ojos brillantes me miraban con ilusión, besaba su cuello, comencé a acariciar su cuerpo, ella quitaba mi polera y tocaba mi torso desnudo, yo quitaba su vestido seguido de besos, me encanta.
Estábamos completamente desnudos, la admiro, es perfecta en un 100%, lentamente entro en ella, su rostro comienza a mostrar dolor.
Aka: Hans... – gime
H: Tranquila – la beso
Se aferra a mi espalda y comienzo a dar fuertes envestidas, comienza a gemir y eso me incita a acelerar, ella enterraba sus uñas en mis brazos y espalda, beso su cuello y labios.
Aka: Amm... – sus ojos brillan
H: Te amo – susurro en su oído antes de llegar al clímax.
*Fin flashback *
Eso fue perfecto, ella es perfecta.
Narra Akane:
Camino al paradero, no quiero verlo, espero no esté ahí.
Llego y ahí está... ¿espera por mí?
X: Señorita Hood – dicen tras de mí
Aka: David... perdón Doctor Murray – sonrío amplio
D: Sólo David – me sonríe – ¿Te llevo? Mi auto está en aquella esquina – apunta a mi cuadra
Aka: ¿Vives ahí? –*es mi calle*
D: Sí, llegué hace 2 años – sonríe amplio – ¿Y tú vives cerca?
Aka: Sí, en la misma calle – sonrió
D: Excelente, así podré llevarte a la clínica todos los días y si quieres también de regreso – me sonríe
Aka: No tengo ningún problema – bajo la mirada
D: Entonces... ¿Vamos?