Narra Hans:
H: Yo sé que ella me ama, ¡lo sé!
Mientras manejaba alejándome del lugar, no podía dejar de llorar, yo sabía que ella me amaba, porque estuvimos juntos, ella no es así con cualquiera, pero los celos me ganaron, la vi subiendo al auto de ése estúpido y arranque tras ellos, los seguí hasta la clínica, él no deja de mirarla, ¡maldito! ¡ella es mía!
Luego pasó lo que ustedes saben, no debí decir eso, herí su orgullo femenino con algo tan personal, soy un idiota.
Conduzco hasta el hospital para que me hagan curaciones, tenía el labio roto y un pequeño corte en la cara.
Al terminar me voy a casa.
Ab: ¡Amor llegaste! – dice abrazándome – Pero ¿qué te pasó? – toca mi rostro.
H: Tuve una pelea, nada importante – trato de quitarle importancia
Ab: ¿Nada importante?, tienes el labio roto y ¿no es nada importante?
H: Por favor no quiero hablar del tema – camino escaleras arriba y ella me sigue.
Ab: Tengo que contarte algo, y creo que te alegrará el día – dice sonriendo y aplaudiendo
H: ¿En serio? – digo volteando – ¿Qué es?
Ab: En la habitación te cuento – sigue caminando.
Al llegar a la habitación me sienta en la cama y me entrega un regalo.
Ab: Ábrelo – me mira ilusionada
H: ¿Tiene que ver con la noticia? – digo no comprendiendo
Ab: Puede ser – sonríe
Abro el regalo y dentro hay ¿una polerita de bebé? y eso ¿qué significa?
Ab: Vas a ser padre, ¡estoy embarazada! – grita al fin saltando de alegría
H: ¡¿Qué?! ¿¡Voy a ser padre!? – abro los ojos como platos
Ab: Si – dice comenzando a llorar
H: ¡Oh, mi amor! – la abrazo y levanto en brazos, le doy besos en toda su cara – me haces el hombre más feliz del mundo – susurro junto a sus labios
Nos quedamos conversando sobre el bebé, haciendo planes para cuando creciera, etc.
Luego decidimos contárselo a mi familia, bajamos las escaleras y fuimos a la cocina, ahí estaban todos.
H: Familia – todos nos miran – tenemos algo que contarles
Axel: ¿Que sería? – dice mirándonos atentos
A: ¡Vamos hablen! Que me pongo nerviosa – dice mirándonos expectante
Ab: ¡Estoy embarazada! ¡Vamos a ser padres! – dice besándome
Todos quedan sorprendidos, todos vienen a felicitarme, pero Issa, Andi y Santi luego se van, me quedo con mis padres y Axel... ¿Qué les pasa? dejo a Abbi con mis padres y voy donde los demás
H: ¿Qué pasa? – digo mirándolos – ¿no les alegra la noticia?
A: Sí nos alegra, es sólo que pensamos que esa noticia la darías con.... otra persona
H: ¿Quién? ¿Akane? – elevo una ceja
Is: Exacto, creímos que la seguías queriendo, pero al parecer no es así.
H: ¿Quién dice que no la sigo queriendo?
A: Con tus actos lo demuestras.
H: Ustedes no saben nada, no saben lo que yo siento
S: Lo único que yo sé, es que no te vas a acercar más a mi hermana, no vas a jugar con ella, ahora serás padre y tu deber es estar con Abbi, así que no te acerques a mi hermana, deja de hacerle daño.
H: Eso tú no lo puedes impedir
A: ¡Hans!
S: ¡Claro que puedo! – apunto su pecho – ¿sabes qué? Akane es mi protegida ahora, porqué Jazz ya tiene a Cal, y Akane está sola, así que si te veo cerca de ella te voy a alejar de ella a la buena o a la mala.
H: Habrá que verlo entonces – digo con rabia, no me iba a alejar de Akane
A: ¡Dejen de pelear! ¡por favor! – dice mi hermana
S: Ayer la vi llorar por ti – me empuja – ¿Qué le hiciste? ¿Dónde la llevaste ayer?
H: ¿Qué no te contó? – digo con una sonrisa de autosuficiencia – Fuimos a la playa y ella fue mía, ¿por qué ahí no la cuidaste?
S: ¡Eres una mierda! – me vuelve a empujar
A: No sé cómo puedes ser mi hermano – dice marchándose a su habitación
Is: ¡Eres un perro asqueroso! – se va molesta a su habitación, Axel que venía llegando va tras ella
S: Ayer no pude, pero hoy sí – me pega un puñete en la cara botándome, ya en el suelo se sube sobre mí y comienza a pegarme combos por doquier, sangro, pero no me defiendo.
H: Soy un idiota – comienzan a salirme lágrimas y Santi deja de pegarme
S: No te acerques más a mi hermana, ni a nadie de mi familia nunca más – se va dónde Andrea.
A los minutos los dos se van junto a su pequeña
Narra Akane:
Ya en la tarde llego a casa y lo primero que veo es a Génesis que corre hacía mí, la tomo en brazos y juego con ella mientras camino a la sala, ahí están todos compartiendo.