Emma me mira fijamente sin decir una palabra y me inquieta bastante aunque en sus ojos no veo enojo, tampoco dolor esta vez me observa con amor. Como solíamos mirarnos, paso mi mano en su mejilla extrañaba tanto sentir su piel.
-¿no vas a decir nada?- inquiero nervioso. Niega con la cabeza y me desconcierta, frunzo el entrecejo comienzo a creer que perdió el habla
-¿es que no tienes lengua?- inquiero divertido, la pasa en mi cuello y rio nervioso ella es la única que logra hacerlo -¿dónde quedo mi chica timida? Ahora te diré mi pervertida- en ese momento siento sus labios sobre los mios. Y puedo asegurar que es la sensación mas maravillosa que experimente jamas, si bien nos besamos una infinidad de veces ahora es especial supongo que es por la falta que me hizo, ella enciende en mi un encantador placer, roza mis labios dejando una suave caricia, suspira y luego los lame incrementando la oscuridad en mis ojos, llevo mis manos hacia su cadera mientra la pego a mi cuerpo, me alejo un poco para contemplar su mirada cargada de deseo
-te amo mi despistada- hablo agitado, me regala una encantadora sonrisa. Definitivamente perdió el habla ante tanto encanto. La siento a horcajadas sobre mi mientras la sigo mirando a los ojos, todo en ella es perfecto, bajo la vista hasta sus labios carnosos, su pecho sube y baja ante la agitada respiración, no deja de mirarme y ambos sabemos que apenas es el comienzo.
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Es bueno estar de nuevo en casa junto a mi familia. Ha sido una gran lección para no volver a ocultarle nada, no quiero perderla la amo demasiado. Tras hablar con mamá dejo el teléfono sobre la mesa, le acabo de anunciar que Emma y yo nos reconciliarnos y para mi sorpresa quiere que vayamos a cenar a su casa, eso es extraño aunque pensándolo bien la platica que tuvimos quizás ayudo.
No estoy seguro de que Emma acepte asistir pero nada pierdo intentándolo, seria grandioso que se llevaran bien, deseo que lo hagan alguna vez pero no quiero forzar a que suceda. Camino hacia ella quien lee un papel, me siento a su lado
-amor- comienzo a decir -mamá quiere que vayamos a cenar el próximo sábado, si sientes que no estás preparada o simplemente no quieres lo entenderé. Tal vez quiera disculparse, yo creo que intenta recomponer algo del tiempo perdido- lo piensa unos segundos
-¿crees que funcione? Es decir durante mucho tiempo espere que me aceptará pero no lo sé, no quiero que haga algún comentario indebido frente a Thomi-
-no se atreverá a ser imprudente delante de él y no te preocupes si no quieres esta bien. Te entiendo- digo sincero.
-no dije que no iría, solo desconfio un poco. No sé cuales sean sus intenciones pero lo haré por ti, eso si al primer comentario fuera de lugar me voy-
-esta bien amor, no quiero que lo pases mal. Hablare con ella para que se comporte- dejo un beso en su frente y me pongo de pie, la dejo que siga con sus cosas.