~Narra Emma~
Mamá prepara lasagna, Liam y Thomi lucen concentrados en el juego de la memoria.
Yo simplemente la observo, no se me da muy bien la cocina pero en cuanto desocupa algún recipiente aprovecho a lavarlo.
-¿que tal tu trabajo hija?- inquiere ella
-bien mamá- respondo -¿te adaptaste a esta ciudad?- pregunto, la verdad no quiero hablar de trabajo en estos momentos.
-si. es bonita, además he conocido bastante gente agradable-
-me alegro mucho por ti-
-¡gane!- chilla Thomi. Ambas reimos ante su entusiasmo
-¿has hablado con tu papá?- dice seria
-no, pero supongo estamos bien asi-
-deseo que su relación sea mas unida algún día-
-no estamos enojados, es nuestra forma de estar bien-
-lo sé linda-
Poco después pasamos a la sala, la cena está lista y muero de hambre.
-¡que rico abuela!-
-gracias mi amor- replica ella.
-esta delicioso - agrega mi hermano
-lo está- aseguro. Ella sonrie.
Mamá comenta sobre una mujer que acaba de conocer, ambas tienen los mismos gustos y le agrada su forma de ser. Desea tener una buena amistad. Me alegra verla feliz y sobretodo tenerla cerca.
Luego del postre Thomi dice tener sueño, mamá ofrece su cuarto y lo llevó a acostar. Le quito su calzado y beso su frente. Me acurrucó a su lado mientras masajeo su cabello. Mi pequeñito está creciendo, cada día me asombra con algo nuevo.
Más tarde regreso a la cocina, Liam lava los platos
-si que te tiene amaestrado Sarah- bromeo y el solo niega divertido. Decido ayudarlo, entre los dos terminamos de ordenar. Nos dirigimos a la sala y tomamos asiento, mamá se sienta también
-puede que no sea el momento pero necesito decirles que extraño viajar, durante toda mi vida me dedique a conocer lugares y ahora que llevo tiempo aquí pienso seguir haciéndolo- miro a mi hermano, él solo la observa serio -espero no se molesten-
-para nada mamá- responde él. Era demasiado bueno para ser real, no exagero tampoco es capricho pero durante mucho tiempo me hizo falta. Liam presiona mi mano supongo ante mi silencio ha notado cuanto me afecta la noticia
-¿no dirás nada?- cuestiona ella con preocupación
-no se que decir - confieso
-no será para siempre, regresaré aquí-
-esta bien mamá, disfruta- se que es lo que le gusta simplemente me limito a alegrarme por ella.
~Narra John~
Aaron se la pasa en el celular, su rostro ha cambiado, ya no luce divertido. Al contrario frunce el entrecejo cada que le llega un mensaje
-lo siento chicos, realmente me apena esto. Pero me iré-
-descuida amigo- replica el rubio
-no te preocupes- respondo
-tengo dos opciones realmente, apagar el móvil llegar más tarde y discutir toda la noche o retirarme ahora e intentar arreglar las cosas -
-de todos modos pasamos un buen rato- dice Anthon
-ve bro, nosotros estamos bien -
-gracias amigos, nos vemos- se despide y sale.
En cuanto quedamos solos pedimos otro trago
-¿aun amas a Emma?- pregunta
-claro que si- replico seguro
-¿deseas estar con ella?- indaga
-si- admito -como lo mencione antes su mal humor me estresa bastante-
-digamos que cuando te conocimos tu no eras el mas simpático- ironiza
-lo sé, de hecho cambie un poco gracias a Emma y sus locuras- sonrío
-asi es amigo, tu y Emma son los padrinos de todos. Si ustedes terminan dejo de creer en el amor- da un largo trago y yo suelto una carcajada
-¿como así?-
-asi es, tu y ella han sido la primera pareja, luego están Liam y Sarah. Quienes también pasaron por tantas cosas. Son las parejitas más queridas-
-es cierto, nada ha sido sencillo ... sabes prefiero a la Emma despistada, la que olvida cosas, incluso la Emma desalineada con su cabello alborotado aún así me encanta . Su carácter ha sido tranquilo y ahora al verla molesta me cuesta- lo bueno es que Thomi no se entera de nuestros altercados.
-todos tenemos momentos de mal humor y se nos quita estando solos, deberías darle ese espacio y así evitar discusiones-
-tienes razón amigo - su móvil suena
-debo contestar - dice, yo asiento. Se pone de pie y toma algo de distancia. En cuanto regresa me informa que su primo está en apuros. Me ofrezco de inmediato si necesita mi ayuda pero él dice que no me preocupe luego de disculparse repetidas veces se retira. La noche no es como la esperaba pero decido tomar un trago más antes de irme también. Busco mi móvil, apenas son las dos de la mañana.
La guardo, veo a alguien de pie a mi lado y levanto la vista.
Ella toma asiento
-buenas noches ¿como estas?- inquiere la chica del accidente -¿me recuerdas?- pregunta sonriente
-hola- respondo
-ya tengo mi coche y no extraño para nada los taxis- es agradable y simpática pero no me parece buena idea estar con una mujer cuando debería estar con mis amigos
-me alegro por ti- levanto la mano y llamo al mesero. Él chico se acerca rápidamente
-yo quiero .... -
-la cuenta por favor- interrumpo a la muchacha mientras, él asiente
-en seguida. ¿que desea usted?- le pregunta a la castaña. Ella me mira sorprendida, luego ve en dirección al chico
-tekila para los dos-
-no amigo, solo para ella. Yo ya me voy- explico bastante incómodo.
-para los dos- repite ella y pongo los ojos en blanco.
-pagare la cuenta y me largo de aqui- no tengo idea en que momento quedamos solos nuevamente
-no te molestes, eres muy gruñon- dice divertida
-y tu bastante infantil- replico
-eso no es cierto, quiero invitarte un trago. Eso es todo. Me siento feliz al verte - sonrie mientras ve hacia los lados como si buscará algo. -estas siendo descortés y aun así quiero hacerte compañía-
-te lo agradezco pero ya me voy- me pongo de pie. Dejo el dinero sobre la mesa, lo sufieciente como para cubrir los gastos, de un movimiento rápido se levanta y apoya su boca en la comisura de mis labios, confieso que he bebido bastante alcohol pero estoy en mis cabales como para reaccionar a tiempo.
-¿que haces?- la aparto bruscamente, sin esperar respuesta me dirijo hacia la salida. Oigo sus pasos tras de mi pero le resto importancia. Al salir camino hacia el coche
-¡John para!- grita, giro a verla lo suficiente molesto
-no debiste hacer eso, lo mejor es que no te acerques a mi-
-¿por qué? ¿A caso te parezco tan fea?- pregunta en un hilo de voz
-tengo novia y la amo- respondo
-ya se lo se, incluso se que tienes un hijo. Pero solo necesito saber si te parezco bonita- se acerca un poco más y retrocedo
-no voy a responderte, no me interesa hacerlo- giro para irme y empieza a llorar. Me siento lo suficiente cretino como para dejarla en ese estado, regreso a su lado. -ya no llores- digo, no se que agregar en realidad la gente que pasa a un lado se queda viéndonos raro. -si hay algo que pueda hacer para que te sientas mejor...
-abrázame- pide en suplica. Lo dudo un poco y luego lo hago, ella me presiona con fuerza, durante unos escasos segundos la dejo que lo haga en cuanto se repone me alejo un poco.
-siento todo esto, en verdad solo quería compartir un trago contigo- sonríe débil.
-es hora de irme, adios- me despido.