No está en tus planes

2 | Ella regresó

Howard

21 de enero de 2024

—Dijiste que querías esa bolsa de diseñador, puedes comprarla con la extensión de mi tarjeta y luego me la muestras en cuanto nos veamos —intenté fingir una sonrisa mientras hablaba por teléfono con mi novia Clarissa.

—¡Eres el mejor novio del mundo! —chilló del otro lado del teléfono, sin duda que esta mujer es insaciable e insoportable—. Tengo que ir a comprar ese bolso tan pronto como pueda. Hablamos después, te envío un besito.

—También yo, disfruta de ese bolso. Nos vemos después. —Me obligué a fingir una sonrisa para después colgar la llamada.

Apenas colgué, tiré el teléfono a un lado.

Estoy harto de tener que involucrarme en las relaciones sentimentales que mi padre cree que son buenas para mí. Lo peor de todo es que no la amo ni un poco, tampoco sé si ella me ama a mí. Ahora es muy tarde para arrepentimientos porque debo actuar como un hombre y hacerme responsable de todos mis actos.

—Juliette...¿No acabas de salir del colegio hace poco? Creo que apenas han pasado veinte minutos, me pregunto qué te trae por aquí con esa prisa. —Le interrogué con una sonrisa a mi hermana quien lucía atareada y con un rostro de confusión.

—¿Recuerdas que mi colegio iba a ir a una feria de universidades hoy? Bueno, resulta que casualmente fuimos a la universidad donde estudia Milicent Monroe y escuché algo que me dejó helada.

Los Monroe...¿Ahora qué estará sucediendo con ellos?

—¿Tiene algo que ver conmigo o por qué veniste corriendo a verme? —le pregunté sintiendo que se formaba un nudo en mi estómago. En el interior cruzaba los dedos para que no se tratara de nada malo.

—La escuché hablando con unas amigas, ella dijo que Eleonore está de regreso en Nueva York y que entrará a trabajar en la empresa en el departamento de diseño —apenas mi hermana menor me confesó aquello el mundo se me cayó al piso—. Quise venir a decírtelo porque sé que en el pasado estabas enamorado de ella, y prefería decírtelo yo a que te enteraras por los rumores. Además si ya está aquí, no me sorprendería en lo absoluto si la vemos en la empresa muy pronto.

—¿Eleonore de regreso en Nueva York? ¿Por qué tuvo que aparecerse justo ahora? —Inquirí con pesadez. Creí que la había superado, que ella había quedado encerrada en mi pasado pero veo que no es así.

—¿Crees que esto va a afectar tu vida de alguna manera hermano? Sé que ustedes dos estaban muy enamorados, no sé cómo puede ser un reencuentro entre ustedes luego de todos estos años.

—Ni siquiera comprendo el motivo por el cuál está de regreso...Sin embargo, pienso que a este punto la mayoría se está empezando a enterar y muy pronto papá vendrá a amenazarme para que no se me ocurra acercarme a ella mucho más de lo normal. —Sin duda todo esto me hacía sentir demasiado nervioso.

—Por eso quise venir a decirte, no sé mucho más que eso debido a que fue lo único que pude averiguar. Quizá puedes atreverte a hablar con Cole para preguntarle algo más sobre el tema, aunque eso ya depende ti. —Me aconsejó. —A pesar de todo, sin duda este no es el momento adecuado para que ella aparezca.

—Puede que no sea el momento adecuado, aun así no es como si yo pudiese decirle qué hacer o no hacer —murmuré—. Te agradezco mucho por haber venido a decirme todo esto hermanita, lo aprecio.

—Tenía que venir a decírtelo, aunque insisto en que debes preguntarle a Cole. Él es su hermano, si alguien puede darte cualquier información sobre ella, es él. Ahora tengo que irme a casa tengo muchas tareas por hacer. —Ella se puso de pie.

—Gracias por venir a decirme Juliette, ve a estudiar —la despedí de mi oficina, en cuanto me encontré solo de nuevo me resbalé sobre el sillón que se encontraba en mi despacho.

No puedo creer que lo que ella me dijo es verdad.

No puedo creer que Elenore esté de regreso casi cinco años después.

¿Cómo se supone que debo reaccionar ante su inesperado regreso? ¿Acaso debo permitir que ella vuelva a poner mi mundo de cabeza como lo hizo una vez o debo obligarme a actuar como si mi corazón no siguiera latiendo por ella.

Los recuerdos no terminaban de agobiarme, empecé a recordar nuestro primer beso, nuestra primera vez hasta la primera vez que rompimos.

Lo daría todo para volver a tenerla en mis brazos.

El nerviosismo me estaba consumiendo sin duda así que tuve que obligarme a dejar mi oficina y dirigirme hacia la de Cole, el hermano mayor de Eleonore, y quien además trabajaba en el mismo departamento de la empresa de nuestros padres.

Ingresé sin siquiera tocar la puerta debido a la confianza que teníamos. Él apenas levantó la mirada y soltó un suspiro, creo que acaba de darse cuenta de mis intenciones.

—Estás aquí por los rumores sobre mi hermana...¿No es así? —preguntó dejando que una sonrisa se adueñara de su rostro—. Debería haber apostado que no tardarías más que un día en venir a preguntarme si es cierto o no que ella está de regreso.

—Lamento si voy a ser demasiado directo contigo Cole, pero, se verdad quiero saber sí ella está de regreso y la razón por la que ha vuelto luego de estos años —tuve que decirle sin tapujos.

—Eleonore está en Nueva York de nuevo...Ahora, sobre la razón por la cual tuvo que volver con nosotros, no puedo decírtela debido a que es personal. —Asintió, acomodando su cabello con sus propias manos. Este hombre siempre ha sido muy vanidoso.

Solté un par de suspiros antes de atreverme a cuestionar eso que quería saber en cuestión.

—¿Su regreso tiene que ver con su condición? —le interrogue, aquello era lo que más anhelaba saber. Seguía preocupándome por ella más de lo que quisiera admitir, aun después de todo lo vivido—. ¿Su salud mental está bien? De lo contrario, no encuentro otra razón para que haya decidido volver.

Dudó por un segundo, tal vez quería decirme la verdad.

—Te lo diré porque eres mi amigo, no obstante, ni se te ocurra dejar que alguien más se entere de esto...




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.