Katherine Brown:
Polvo, escoba, barrer, escuchar tonterías. Polvo, escoba, barrer, escuchar tonterías. Así pase mi viernes y presiento que así pasare este. Mi hermana y su “mejor amiga” por su parte tuvieron que limpiar el gimnasio. Y aunque casi me vuelvo loca por limpiar la cafetería con míster engreído prefiero eso a tener que limpiar el gimnasio y lavar todas las camisetas apestosas y sudadas de los jugadores. Eso sí que sería una locura.
Hoy es miércoles y no ha pasado nada interesante. Mi semana ha transcurrido como siempre aburrida y rutinaria. Nada interesante que recalcar. Más miradas de todos obviamente por la escena de la semana pasada pero nada importante. Después del viernes afortunadamente no volví a encontrarme a Hill bueno si pero no entablamos conversación y tampoco me interesa mucho hacerlo.
– Me encantara seguir viéndonos las caras aquí… – Ríe –, Pero tengo mejores cosas que hacer – Aseguro Matthew levantándose de su asiento. Isabela por su parte lo tomo del brazo e hizo que se sentara de nuevo.
– Tenemos que terminar esto – Lo miro seria – Nadie se va hasta que acabemos – Sentencio mi mejor amiga soltando a Matthew.
– Quiero comer Isa, vamos a comer – La jalaba del brazo – Luego terminamos, vamos – Insistió y la pelinegra lo fulmino con la mirada, haciendo que se callara y se quedara quieto.
Estamos haciendo un informe, Literatura. Además que la profesora dijo que no quería nada de a caletre. Que teníamos que analizar y toda la cosa. Toda la clase se revienta la cabeza haciendo dicho informe, bueno algunos, otros no les importa mucho y están esperando a que suene el timbre, otros ya se fueron. Mientras que nosotros estamos aquí.
Isabela terminaba su parte mientras Matthew le dictaba, yo descansaba un poco después de haber escrito un buen rato. Revisaba mi celular y llego una notificación.
Número desconocido:
Deberíamos salir de aquí koalita.
Sabía exactamente quien había enviado ese mensaje, me levante disimuladamente de mi asiento y fue hacia él. Me pregunto cómo patrañas tiene mi número.
– ¿Cómo es que tienes mi teléfono Hill? – Pregunte parándome frente a él. Estaba en su asiento esperando que su compañero terminara, Estaba recostado en su silla y se hizo el sorprendido en cuanto me escucho.
– Frunció el ceño – Veo que tienes el teléfono en las manos – Apunto mi mano y volvió a recostarse. Que idiota.
– Sabes a lo que me refiero Hill, ¿Cómo conseguiste mi número?– Pregunte mirándolo irritada. El me miro sonriendo burlón.
– Bufo – Ya quisieras que tuviera tu numero Brown – Ríe sarcástico – Ya vete, a cambio de ti yo si quiero terminar esto – Su compañero le paso la hoja y empezó a escribir. Idiota. Musite para volver a mi asiento. Sé que me escucho, pero hizo como si no.
Terminamos el informe, entregamos y nos dirigimos a la cafetería. Muero de hambre, quiero una hamburguesa. Pero como aquí los deseos no son ordenes, hoy no hay hamburguesas. Pero igual devoro mi espagueti como una.
– Espero al menos sacar un jodido 8, con tanto que escribimos – Se quejó Isabela, mordiendo su emparedado.
– Esperemos que miss 01 nos ponga al menos un 6 – Comento Matthew tomando de su soda. Miss 01, Matthew le puso ese apodo a la profesora de literatura me imagino que saben porque, pero igual se los explico. La profesora todo el tiempo pone notas bajas por más que nos esforcemos. Esperemos que no saquemos 01.
– Tienen expectativas muy bajas, vamos a sacar 10 ya lo verán – Mis amigos son unos pesimistas. Hay que decirle si al positivismo chico, suban esos ánimos.
Seguimos hablando pero algo llamo mi atención era Hill entrando con su escuadrón llamando la atención de ahora toda la cafetería. Paso de largo frente a nosotros no sin antes echarme una mirada y luego sonreír arrogante.
Idiota.
Joshua Hill:
A veces es un poco exhausto ser popular. Todos te miran, y debes fingir que no te importar aunque a hay veces sí, dependiendo de quién te mire. Todo el instituto podría mirarme y no me inmutaría, pero cuando ella lo hace es diferente, tengo la necesidad de molestarla y verla irritada, de ver como sus lindos y delicados labios reiteran cada cosa que digo. No me gusta, tampoco me atrae solo me encanta verla enojada, a veces su cara se enrojece y arruga su nariz de una manera muy graciosa. Hay veces que trato de solo bromear y no ser pesado, otras trato de solo molestarla. O a veces trato de neutro con ella. No quiero que piense que quiero algo más. No es así, es diferente solo me gusta molestarla. Katherine no es como las chicas que conozco, no se fija en lo físico, se fija más en la actitud. Lo sé porque me lo dijo alguna vez, que podía ser lindo pero mi actitud me hacía un idiota, o algo así. Y quizá tenga razón, pero si supiera porque me comporto de esta forma quizá diría algo distinto o no porque Brown es la chica más terca que conozco. Soy algo bipolar con ella, lo acepto, a veces sin querer soy amable con ella, luego recuerdo que no debo serlo y de nuevo soy algo serio o cosas por el estilo, su reacción es graciosa ver como se confunde cuando yo cambio de actitud de repente es gracioso. Brown a creado algo en mí, no sabría decir que es, solo en ocasiones tengo la necesidad, de detenerla cuando hace tonterías (La pelea por ejemplo), de defenderla cuando alguien la molesta, de aunque no lo admito preocuparme por ella, de querer hablar con ella, de querer molestarla. Aunque estoy seguro que nunca sentiría algo por ella. Admito que es bonita pero nunca me gustaría y que también algunas veces a llamado mi atención, pero somos muy diferentes y al final ni siquiera le caigo bien.
– ¿Y qué harán el viernes?– Pregunto Jacob tomando de su soda mientras miraba su celular. Algunos dijeron que irían a alguna fiesta, otros que saldrían con sus amigos y yo me quede en silencio. – ¿Y tú a dónde iras?