SOFIA
En medio de mis contradictorios pensamientos y juicio, decido que no está mal ser humanitaria y acompañar a un conocido que ha tenido un mal día.
Brad me ha traído a un parque hermoso que no sabía que existía,el cual queda en un cerro,ofreciéndonos una preciosa vista de la Ciudad.Para acceder a el hemos pasado una brecha;nos sentamos en una banca,destapó un tarro de helado que hemos comprado en el camino.
-mi favorito!de fresa-le digo saboreando la cucharada de helado que saboreo en mi boca.
Brad me detalla,y me hace sentir rara.
Así que le ofresco el tarro de helado para que saque su cucharada.
-Esta bueno-dice con la mirada puesta en la vista de la ciudad.
-Este sitio es precioso!,pero un poco solo,para ser tan espectacular-cuestiono
-Debe ser porque es propiedad privada-me contesta mirándome a los ojos.
-No me digas que estamos invadiendo un lugar sin permiso-le digo un poco preocupada
-digamos...que estás autorizada soy el dueño,es parte del terreno que me dejó mi abuelo,la casa está un poco más hacia aya-me dice señalandome una vivienda a lo lejos.
Repiro más tranquila.
-definitivamente es precioso-le digo reparando a mi alrededor las diferentes especies florales.
-Si,a él le encantaba,y me he encargado de mantenerlo como el lo hacía.Este sitio no solo me trae buenos recuerdos,me da ese toque de tranquilidad cuando quiero evadir el mundo,siento que una parte de el está aquí conmigo-me dice pensativo
-La esencia de los que se van se mantienen en nuestros recuerdos y en esos sitios que nos transportan a los momentos vividos-le aporto un poco de lo que se me pasa por la mente.
-muy cierto-me dice,tomando el tarro de helado y comiendo un poco mas.
-gracias por enseñarmelo-le digo quitándole el tarro de helado para comer un poco más.
-como supiste que Julián y yo teníamos una cita?,acaso me sigues...-le pregunto lo que desde que salimos de casa ronda mi cabeza.
-tu novio hablo en la cafetería en voz alta,solo escuché,no tendría porque seguirte-me dice con tono de desagrado.
-ok,pero no es mi novio-respondo
-pero has dicho que tenían una cita-me dice en cierto tono de reclamo.
Por un momento cuestiono que si lo he dicho sin querer,bueno...en el fondo sentía que era una cita y se lo he manifestado a quien menos le interesa.
-bueno...tal vez hubiese Sido una cita.
-enserio...te gusta?,ese tipo-me dice acercándose de manera que queda muy pegado a mi.
Su mirada anclada en la mía,su cercanía,esa atracción que despierta en mi,hace que cuestione como me gusta.
-si!!-le digo,como modo de defensa para que pare de mirarme como lo está haciendo,para que se rompa estás ganas que siento de besarlo al tenerlo tan cerca.
Tomo el tarro de helado que le queda una cucharada y nerviosa la meto a mi boca,y torpemente me refriego por fuera de mi boca.
El sonríe pícaro,y eso lo hace ver más guapo que siempre.
Con su índice comiensa a tratar de limpiarme y yo lo esquivo,para que no lo haga.
-Solo quiero ayudarte-me dice con cierta risita maliciosa.
-Pero no lo haces-le digo soltando sin querer lo que siento,ya que su actitud no ayuda a alejarme de lo que despierta en mi.
Sonríe más,y siento un poco de disgusto por no tener sensura en mi boca.
-Lo haré a mi manera-me contesta tomando una actitud más seria.
-A que te refieres,con a mi mane...-antes de que termine de preguntar,en un acto rápido que no ví venir me toma del cuello con una de sus manos delicadamemte y comienza a lamerme con su lengua los rastros demas del helado alrededor de mi boca.
Mis labios arden clamando el disfrute de sus besos,mi cuerpo se estremese.
Nos miramos fijamente,no tengo fuerza de voluntad para detenerlo en este punto,no puedo negar que me gusta demasiado,en cada una de las facetas positivas que voy distinguiéndole.
Cuando termina de retirar todo el ecseso de helado,se saborea sobre mis labios, tragando grueso; el acto causa efectos de gran nivel a todo el hormigueo que recorre mi cuerpo.
-que haces?-pregunto perdida en su mirada,y mi pregunta se enfoca no solo en lo obvio.
-limpiarte...probarte...-responde sensual sobre mi boca afectando cada fibra de mis sentidos.
Saca la punta de la lengua para lamer con delicadeza mis labios.
-sabes a fresa-me dice en susurro sobre mi boca para seguir torturandome.
Estoy en una especie de transe hipnotizada por la atracción incontrolable y su mirada que hace perderme.
Mis manos viajan a su cuello tomándolo,acariciándolo suavemente,despues de soltar el tarro de helado en la banca.
-que quieres de mi?,me confundes?-le digo en susurro sobre sus labios sin dejar de mirarlo.
-quiero todo de ti...-menciona para instantáneamente apoderarse de mi boca.
Caigo en el abismo placentero de el disfrute de sus besos,de esa sensación de disfrutar algo con el máximo gusto.Un beso cargado de gran deleite.
Nos soltamos del beso recuperando el aire,nos miramos fijamente y me sonríe.
-vamos a la casa,ya está haciendo mucho calor-dice grasioso,mi cara no es de las que me guste su chiste de doble sentido con un antónimo,al notarlo, se ríe diciendo -perdon...se está poniendo frío...bueno...el aire.
No puedo evitar reír por su tonta manera de molestarme.
-esta sola la casa?- pregunto,para ser un poco sensata ya que es complejo cuando lo tengo cerca.
-si,tienes miedo a perderte en mis encantos-me dice gracioso-se lo dijiste a mi madre
-Cuanto escuchaste!?-le reclamo apenada de que haya escuchado todo,confirmando con su comentario que estuvo escuchando mi conversación con Beti antes de entrar a la habitación con el café.
-vamos y te doy detalles de cuánto te gusto-me dice,levantándose de la banca extendiendome su mano para que la tome y lo siga.
Creo que mis mejillas arden de vergüenza,pero ya que...me delate sin querer y por su semblante parece que disfruta la información que posee de mi en cuanto a él.