—No puedo creer encontrarte aquí de casualidad, te ves muy hermosa No parece que han pasado tres años. Estás igual que la última vez que te vi.
— Que sorpresa verte Cristian. Me parece increíble que ya hayan sido tres años desde la última que te vi. Veo que lograse tu sueño, estas con una cámara fotográfica colgando de su cuello como siempre soñaste.
—La vida no me ha tratado tan mal, ¿Cómo has estado? Se nota que es idéntico a...
—Su padre lo sé, pero no quisiera hablar de eso Cristian que bueno verte y pedirte disculpas por lo que paso hace años, debí ser más delicada cuando te respondí.
— Tu tranquila no te preocupes te lo dije ese día agradezco tu sinceridad de verdad, lo importante es que Seas feliz ¿Por qué lo eres verdad?
—¿Qué es la felicidad Cristian?