Narra Loreth.
Me quedo pensando en esas palabras de Shadd
"Estoy enamorada" "estoy enamorada"
Me quedo frente al espejo y me señalo con el dedo índice.
-Tú sabes perfectamente que Shadday nunca pero nunca habla de hombres, así que eso ha sido muy raro, Tú, tú y tú lo sabes perfectamente- lo hago presionando un poco en el espejo -pero claro algún día se tiene que enamorar, cierto? Pfff será que le gustan... las mujeres? Oh por Dios!! Y si eres tú Loreth, no, no y no- me quito del espejo y me dejo caer en la cama y nuevamente vuelve ese "estoy enamorada". Me levanto y salgo de casa sin rumbo alguno. Llevo un tiempo caminando.
-¡Oye! ¿Qué te traes? - habla Saidy mi prima, espera ¿Cómo llegué hasta esta calle? Miro hacia los lados y si, estoy en la casa de mi prima. -¿Qué haces por aquí?- lo dice un poco sorprendida.
-Pasaba por aquí y deseaba hablar contigo- miento con lo de "pasaba por aquí" pero con lo otro estoy feliz. Ella me sabrá ayudar. Río ante eso ya que es más que cierto.
No es que me de miedo que Shadd se enamore, de hecho me haría feliz pero espero que no sea de una mujer, para ser exactas espero que no sea de mi.
-¿Qué pasa Loreth? Te noto rara, ven siéntate- me siento en una silla de esas estilo playera como si estuviese en una cita psicológica- cuéntame todo. Te peliaste con uno de tus novios?- me río ante eso y luego me pongo seria y le tiro una mirada asesina.
-hey, no digas eso. Todos están bien. Somos felices como siempre.- lo digo en un tono burlón por lo que ella pone los ojos en blanco.
-cuando realmente te enamores no hablaras de tantos "MACHOS" ya veras.- lo dice tan segura que casi lo creo.
-hey primita, sabes que mi corazón es muy grande, ahí caben por lo menos cuatro.-rió ante y eso -oye pero hablando serio ya- ella asiente y se dispone a escuchar. -Sabes que nuestra querida Shadd me dijo que estaba "enamorada"- lo hago haciendo las comillas con las manos, ella al escuchar enamorada pela los ojos.
-Espera espera, hablamos de Shadday Sanez? -asiento, por lo que ella se levanta y pone sus manos en la cabeza -eso es mentira cierto? Jajaja SHADDAY ENAMORADA? -parece loca.
-Oye cállate, ahora todo el mundo se tiene que enterar o qué?- Lo digo mirandola seria. Se sienta y pone las manos hacia arriba en son de paz.
-Mira querida Loreth aunque nos parezca raro ella tiene 17 años, ya estaba demorando mucho, hasta llegué a pensar que sería la tía solterona de su familia- ríe para ella ya que yo estoy más que seria.
-Si, lo entiendo pero creo que a ella no le gusta un aaah como te digo
-suspiro y cierro los ojos- creo que no le gustan los hombres, para ser exactas-lo digo un poco dudosa y achicando los ojos.
-Estas loca? ¿Por qué lo dices? Acaso dijo que le gustaba una mujer?-se levanta y se que lo que me dirá me ayudará mucho. -la conoces de toda la vida ¿cómo se te ocurre decir eso? -hace una pausa, se acerca a mí me toma mis mejillas y me obliga a verla a los ojos - Tú más que nadie sabes que ella no es muy expresiva con lo que siente, debes entenderla, no le es facil hablar. Sea lo que sea o lo que a ella le guste debes ayudarla, debes estar para ella ¡Carajo! ERES SU MEJOR AMIGA LORETH.
Quedo en silencio ante lo que me ha dicho, es cierto que Shadd no es muy expresiva como lo soy yo y eso no es malo. Solo que ella jamas menciona algo de hombres y hoy me dice que está enamorada y aunque haya dicho que era mentira que solo era una broma algo de verdad debe existir. Pero sea lo que sea la ayudaré y estaré para ella.
Me levanto y beso la mejilla de mi prima - sabía que me ayudarías Saidy- ella sonríe y nos despedimos.
*****
Visito a Shadday y no sé porqué estoy tan nerviosa.
-aja niña Sanez, ¿Cómo estas?- me siento rara diciéndole así pero eso salió por si solo.
-estas enferma Loreth- lo dice seria e intentando tocar mi frente, por lo que reacciono y aparto su mano de mi -¿Qué te pasa? Estas en tus días o ¿qué?
-Oh no, no. Perdón solo que no he hablado con uno de los tantos y ya sabes que me preocupo- me rasco la cabeza, en serio estoy nerviosa.
-Tú estas nerviosa y en este momento me diras el motivo- se sienta y pone sus brazos cruzados dispuesta a escuchar.
-Ok, ok Shadd ya sé lo que eres- ella levanta su ceja izquierda -y quiero que sepas que estoy para ti. Claro está, si es que la elegida no soy yo. De ser yo me largo y hasta que se te pase el efecto de gusto por mi- lo digo tan rápido que ella queda mirándome con cara de "no entendí ni un carajo". Doblo los ojos -digo que sé que te gustan las niñas- ya lo solté. Ella abrió tanto los ojos que pensé que pronto debería recogerlos del suelo para volver a colocarlos en su puesto.